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XX. PARAÍSO.
NO SE SI SERÍA POSIBLE estar más rota de lo que ya estaba. Todos desaparecieren ante mi, dejándome sola. Sentía un enorme vacío que ya nadie podría llenarlo. Las palabras de Jackson y ver a los demás fue más fuerte y doloroso que cualquier tortura física o mental. Ellos habían muerto en batalla, y nadie pudo hacer algo para evitarlo. Yo no pude ni nunca podré arreglar esta situación.
Las luces brillantes que iluminaban el lugar, poco a poco comenzaron a esfumarse. Las cosas podían verse con más claridad, arrastrando todo a su paso. Hasta que, me arrastro junto a todo los demás. Fue como si algo me absorbiera y escupiera en otro lugar.
Otro lugar que conocía demasiado bien.
Mis ojos se abrieron, dejando ver unos pequeños rayos de luz. Mi cuerpo dolía completamente, era como si algo me hubiera pasado por arriba. Todo se veía confuso, sin nitidez. Oía susurros y sollozos, que no entendí hasta que mi visión se mejoró. Estábamos en el gran comedor, junto al alumnado y grupo de profesores. Junto a mi estaba la familia Weasley. Estaban agrupados en pequeños lugares, llorando y sollozando. Ninguno estaba prestando atención, todos estaban sumergidos en sus burbujas de pena y dolor. La única que me estaba mirando, era una chica que estaba al frente de mi. Estaba atónita, sorprendida. Lentamente, me senté en la camilla. El dolor de cabeza era insoportable, era parecido a sentir un crucio.
—Por Merlín....—la voz de Ginny se oyó
Pero yo la ignoré, al igual que los demás murmullos que comenzaron a escucharse.
Al girar hacia mi derecha, encontré una fila de camillas. Ahí estaba él, estaba Jack. Sus ojos estaban cerrados, asimilando que estaba en un sueño. Un sueño profundo del qu nunca despertaría. Una lágrima resbaló sobre mi mejilla al verlo. Él tenía que venir conmigo, no debía dejarme sola. Hubiera preferido haberme quedado junto a él, a pesar de que esa decisión conllevaría miles de cosas y sufrimientos a los demás. Yo hubiera feliz.
No estaría sufriendo todo este dolor.
Junto a él, yacía el cadáver de Fred, en su camilla. También parecía dormido, muy tranquilo y sereno. Una tonta y pequeña esperanza de que se despertara y haga una broma se hizo presente. Pero no, nada sucedió. Al igual que con Remus y Tonks. Sus camillas estaban continuas y estaban agarrados de las manos. Los recuerdos de ese lugar, vinieron a mi mente. Cada palabra, cada sentimiento se hizo presente. Pensé en Teddy, el pobre niño que había perdido a sus padres el día de hoy. Pensé en los Weasley, que perdieron a un hijo. Y pensé en mi, que perdí a un amigo. A mi eterno y mejor amigo: Jackson Frederick Pillot. El hombre más divertido y leal que conocí en toda mi vida.
El rostro de Charlie apareció frente a mí.
Sus ojos estaban llorosos, al igual que el de su hermano. Percy estaba junto a él, abrazándolo de una manera muy sentimental.
—¿Q...qué...
—P...per...perdo...n—balbuceé, por lo bajo
Mi garganta estaba seca como una pasa de uva. Tuve que tragar saliva varias veces para poder hablar. Bueno, hacer el intento.
—Por Merlín, Morgana y todos los magos...
Molly Weasley se hizo presencia. Su boca estaba entreabierta, sin poder creerlo.
Yo también estaría así en su lugar.
—Tráiganle agua, llamen a una enfermera—mandó la matriarca de la familia
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𝗛𝗘𝗔𝗩𝗘𝗡 | bill. weasley
Fiksi Penggemar↷ La vida de una chica que rompe maldiciones más que vivir es muy fácil, relativamente. En el intento trata de no morir y también, trata de sobrevivir al estúpido pelirrojo que tienes como compañero↶ hermosa portada hecha por la genia de @amygranger...