somebody like you || hardzzello

11

Joe Mazzello.

Los chicos y yo aún seguimos cenando, entre charlas y risas.

Minutos después, acabamos de cenar y nos miramos entre los tres con cara desafiante, ya que ninguno quería lavar los platos.

Gwilym me miró a mi, yo a Ben y Ben a Gwilym.

-Joe. - me llamó Gwil. Levanté un poco la barbilla como respuesta. -¿Puedes lavar los platos?

-Ni ganas tengo. - respondí. -¿Ben?

-Ni crean que los lavaré yo.

-Hagamos piedra papel o tijera. —Sugirió Gwil.

-Hecho. - dijimos al unísono.

Luego de cinco partidas termino perdiendo Ben.

-¡Mierda! - se maldijo el rubio y pateo el suelo con enojo, provocando que Gwil y yo riéramos.

-Perdiste, te toca lavar los platos. - exclamó el alto.

-Okey, ahí voy. - fue a la cocina, se puso unos guantes color naranja y comenzó a lavar los platos, mientras que Gwil y yo hablábamos.

-Entonces... - dijo el alto. -¿Ben y vos van bien?

-Súper bien, cada día mejor.

-Me alegro por ustedes, de verdad que se aman. Ben en la oficina, habla de vos todo el perro día.

-¿De verdad? - exclamé riendo.

-Sip, cuenta todo lo que hacen juntos. Con que durmieron juntos, ¿eh? - dijo en tono divertido.

-Lo voy a matar. - me sonrojé. -Pero matar a besos.

-Están hasta las manos, ¿que más quieren esperar?

-Acordamos que en un mes definimos nuestra relación. Pero de verdad estoy haciendo un esfuerzo inhumano para que el mes pase rápido.

-Me imagino lo que debes estar sufriendo por que pase el mes. - reímos. -Si yo y Les hubiéramos hecho ese juego, yo enseguida mandaba todo a la mierda.

-Ben quería hacer eso, pero yo le dije que siguiéramos esperando.

-¿Por? Si van súper bien.

-Lo se, sólo que acabo de salir de una relación totalmente tóxica y traumante, y la verdad la pasé súper mal, yo se que con Ben no me va a pasar eso pero igualmente, necesito tiempo.

-Te entiendo. Me imagino lo horrible que debiste pasar.

-Si, fue terrible, pero gracias a Ben, estoy acá y sigo de pie. El me saco del horrible hoyo negro en el que estaba viviendo y no se que más hacer para agradecerle. El es tan lindo conmigo, amable, dulce, como un oso.

-¿Un oso? - río.

-Es que es muy grande y abrazable. Como un oso. - suspiré. -Demás, también es muy leal a las personas que quieren, súper cariñoso y se puede confiar en el. Lo amo.

-¿De verdad piensas eso de mi? - preguntó el rubio.

Me di la vuelta para verlo y sonreí.

-Si. - lo mire tiernamente.

Ben también sonrió y se acercó a entrelazar su mano con la mía y depositar un beso en esta.

-Ya acabe de lavar los platos.

-Creo que nos tenemos que ir. Ya es tarde y tenemos que ir al trabajo temprano mañana. - dijo Gwil.

-Ustedes vayan, no se preocupen por mi. Como ya les dije, ustedes vivan su vida.