somebody like you || hardzzello

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Jueves 14 de enero, 10:00 AM.

En ese mes y medio que había transcurrido a Ben lo aceptaron en el mismo hotel que trabajaba Joe, por lo ahora trabajaban juntos pero no siempre a las mismas horas ni días, pero por lo menos también pasaban juntos en el trabajo.

La pareja aún se encontraba durmiendo, el rubio con los brazos arriba flexionados recostados sobre la almohada, a los lados de su cabeza, y Joe abrazado a Ben.
Benjamín entre abrió los ojos despertándose y frotó sus ojos, a los pocos segundos Joe se despertó también y miró a su prometido y le sonrió, por lo que éste hizo lo mismo al ver que se había despertado.

—Benny. —Entrecerró sus ojos y abrazó al rubio, por lo que éste le devolvió el abrazo.

—Hola amor. —Besó su cabeza y acarició su pelo— Como durmió el hombre más bello del mundo?

—Bien, de ahora en adelante tenemos que dormir temprano, te juro que dormí re bien.

—Como quieras.

—Y vos?

—Yo bien. —Responde y se acomoda en la cama tomando su celular— Tengo que mostrarte una cosa.

Joe se acomoda apoyándose en su hombro prestandole atención a su novio mientras que buscaba en su celular.

—Mira. —Le pasó su celular y Joe vio con el ceño fruncido.

—Y este lugar tan bonito?

—Es una opción de lugar nomás.

Joe se sorprendió al ver cuánto costaba el lugar. —Imposible que esto así tan lindo cueste tan poco.

—Podemos buscar otro lugar si quieres.

—Digo que esto esta muy bonito, nomás me sorprende que salga tan barato. Si quieres lo alquilamos y cuando lo alquilemos vemos a quien podemos llamar para que nos ayuden a decorar el salón y todo.

—Como vos querás.

El castaño se pone a pensar. —Mejor vemos después, no me quiero poner a pensar en gastos ahora.

—Bueno, no hay problema.

Joe se vuelve a acomodar y está vez se sienta en las piernas de su prometido abrazándolo, por lo cual este le devolvió el abrazo.

—A las 11 tenemos que ir al hotel.

—Y que hora es?

—Las 10 creo.

Joe se queja. —Que pereza.

—Por el mal tiempo igual no va haber tanta gente y como en estos días va llover quizás y hasta la semana que viene no tenemos que ir.

—Ojalá. —Dice y lo mira— No te animas a llevarme abajo ya que estamos así? —Pregunta riéndose.

Ben se ríe y con Joe en sus piernas se levanta y cargándolo lo lleva hasta abajo. Al llegar lo deja acostado en el sofá dándole un beso. —Querés café? —Joe asiente y Ben va hasta la cocina a hacer un café para Joe y para él.

[...]

A los pocos minutos estaban los dos sentados tomando café, Ben mirando su celular y Joe mirando el café.

—Sabes lo que me estuve dando cuenta el otro día?

Ben deja su celular y lo mira.