Capítulo 49. Ahogando las penas en galletas.

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Maratón 4/4

Llegué a mi casa después de que cancelaran las clases. Llegué desanimada y confundida, la verdad ya no sabía en qué pensar, en qué era lo correcto y qué no.

Me dirigí a la cocina y del gabinete saqué una caja llena de paquetes con galletas Chips, lo tomé y me dirigí a mi habitación, mientras iba en las escaleras había abierto un paquetito.

~Canción en multimedia~

Llegué a mi habitación y me tiré en mi cama. ¿Por qué Harry cambio tanto? Por no decir “Marcel”, ya que su nombre real era Harry.

Suspiré, tomé una galleta y le introduje en mi boca.

¿Por qué el eligió salir con Jessica y no conmigo?

¿Por qué no puedo ser así de bonita y sexy como ella?, pero no, tengo que ser una niña tierna y ridícula.

Cerré los ojos y me imaginé con otro look. En eso, se me prendió el foco. Me senté en mi cama y recordé que tenía mucha ropa vieja y nueva, de la cual me sirva para cambiar de look.

Me levanté y me dirigí a aquél armario lleno de ropa y zapatos. Saqué absolutamente todo y lo puse en mi cama, ¡era una gran montaña de ropa de todos los colores!

Como primera ropa para modelar, combiné una camisa blanca de botones con cuello, un short negro; pegado y corto hasta la cintura, unos tirantes grises, un moño de cuello color rojo, calcetas blancas cortas, tenis Converse negros. Me peiné de dos colitas altas y me coloqué unos lentes hipsters. Me miré al espejo.

Torcí los labios

—Demasiado nerd…

Después intenté hacer otra combinación de: una blusa de tirantes con un infinito negro, unos legins negros pegados, unos Vans grises, me hice un chongo alto despeinado y me coloqué los lentes hipster. Me miré al espejo de nuevo.

— ¡Demasiado Hipster! —me dije irritada. No sé qué rayos me estaba pasando.

Y por último me puse: Una blusa escotada color rosa, una falda corta negra y unos tacones zapatilla negros.

Me miré al espejo.

—Demasiado puta…—me decepcioné. Me senté en mi cama de nuevo desilusionada mirando esa gran montaña de ropa sin uso…

Suspiré.

¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué no puedo ser como las chicas populares? Simplemente, desearía ser como ellas

Tomé otro paquete de galletas, me recosté en mi cama y me las fui echando a la boca una, tras otra.

Prendí el radio, y por pura casualidad estaba una canción muy parecida a mi caso. Le subí el volumen. Me senté en mi cama y me volví a echar más galletas, genial, ahora iba a quedar gorda. Escuché el pedazo más repetido de la canción y comencé a cantar con la boca llena, escuchándome verdaderamente triste, hasta tenía lágrimas en los ojos.

—I wish that I could be like the cool kids, cause all the cool kids they seem to fit in. I wish that I could be like the cool kids, like the cool ki-i-ds.

La verdad, me siento como una niña. ¡Quiero ser como ellas! No quiero ser infantil…

Resoplé enfadada.

Volví a mirar mi ropa, mi enorme montaña de ropa que no usaré. ¿Por qué? ¡Porque no tengo ropa sexy que le llame la atención a Harry!

Suspiré, pero, de pronto tuve una idea, al ver mi ropa junto la ropa que combiné me di una idea.

Marcel... ¿Eres tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora