Marcel... ¿Eres tú?

Capítulo 33. Como un dios.

[Cap un poco Hot D;]

(Canción den multimedia)

Harry.

Abrí al puerta del copiloto y entré al auto de Dave. Cerré la puerta y me acomodé en mi lugar, Dave sólo me miró.

Encendí mi cigarro y coloqué éste en mi boca inhalando todo el humo.

-¿Y luego?- le pregunté a Dave.

-Sólo espera unos cuantos minutos.

-¿Por qué?- dije soltando el humo.

-La fiesta empieza a las 9:30 son las 9:15- aclaró él.

Levanté las cejas.

-¿Y mientras que hacemos?

-No lo sé- hizo una pausa.- ¿Cómo te fue ayer con Lisa?- preguntó animado.

-La muy puta no se quiso acostar conmigo.

Rió.

-Calla, imbécil- bromeé.

-¿Por qué rayos dijo que no se acostaría contigo?- preguntó aún sonriéndo divertido.

-La muy idiota dijo: "No. No quiero que me pegues el sida"- imité su voz chillona exagerándola.

-Qué rayos- rió.

-Lo sé, gente subnormal, sólo eso- contesté.

-¿Y a quién te follarás hoy?- preguntó.

-No a muchas.

-¿Por qué?

-Dave... no soy ese tipo de chico- contesté.

Dave levantó las cejas incrédulo.

-Vale, sí. Pero no hay nadie espesificamente a quien decida follarme, no hay nadie nueva, ¿o si?

-Uhm, ¿qué tal Stephany, de noveno grado?

-Bien sabes que me gustan las grandes ¿o no?- sonreí levantándo una ceja.

-Sí, te conozco Harold.

-Bien, pues a darle, que la fiesta comienze- dije y enseguida arrancó el vehículo.

Sí, ahora era éste Harry, ni si quiera me recuerden a Marcel. Ahora, ¿quién soy?, soy: el popular, el playboy, el chico más deseado, el más mujeriego, etc. ¿Qué no era?, bueno, ya no era un cerebrito, no, eso no. Siempre reprobaba más de 3 materias a lo mucho. Pero bueno, ahora sólo importa el presente, ahora lo que vivo se lo agradezco a mi querida hemana Gemma, quien por cierto según ella estaba desepcionada de mí, la última vez que hablamos me dijo: "Harry... estas llegando muy lejos, para" tube que contestar: "Gemma, tú me convertiste en esto, y por eso te agradezo. No debería estarme diciendo éstas cosas, ¿estás desepcionada?" "Sí Harry, lo estoy y mucho, estas llegando muy lejos, dime ¿con cuantas chicas te has acostado? apuesto a que has perdido la cuenta, ¿cuántas materias has reprobado? vuelvo a apostar lo mismo, de hecho pienso que ni siquiera recuerdas los nombres de las pobres chicas..." Después de eso, no le contesté, me fui donde justo estoy ahora, en el auto de Dave.