Capítulo 20. Una novia para Marcel.

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Marcel.

~Lo que pasó en el capítulo anterior, pero como lo ve Marcel~

Depués de pasar media hora pensando sentado en el baño, fui a parar en el segundo patio sentado en el céped tranquílamente. Empezó a chispiar, pero no me afectó en absoluto. Las gotas caían mientras empapaban mis anteojos, gota tras gota caía en el cristal de éste. Era como si no me afectara ni un poco, lo poco que me hacía mal esto, no se comparaba con lo anterior, en absoluto. Ya nada me puede doler más.

Escuché unos pasos en el césped, limpié mis anteojos con el suéter y me los coloqué. Miré hacia los lados sin ver nada. Volví a mirar un punto no fijo y perderme en mis pensamientos, pero otra vez me interrumpió algo. Ahora muchos paso se escucharon dirigiéndoce a mi rápidamente, ni si quiera me dio tiempo de voltear, pues ya me tenían agarrádo dos chicos. Uno me tenía de las manos y otro de los pies, cargándome.

Me asusté y pedí que me bajaran, la lluvia comenzó más fuerte. Intenté zafarme moviéndome bruscamente, pero no pude. Me estaban apretando demasiado, me lastimaban.

Un chico se puso en frente de mi, no lo pude ver bien al principio porque la sombra lo tapo, cuando se fue la sombra me dejó ver al chico. Estaba con una gran sonrisa en frente de mi, burlándoce a simple vista. 

Si, era Sam.

-¿Con que quieres quitarme a Jade?- Cambió su aspecto drásticamente y se puso serio. Puso su puño atrás de él preparado para pegarme y dijo: -No creo que le gustes muerto.

Me golpeó en la cara con todas sus fuerzas, los chicos me dejaron caer a propósito, empezé a ver todo borroso. Estaba en el césped mojado. Sentía como me pateaban mientras yo temblaba de dolor en el piso, los lentes se me cayeron y vi como Sam los pisó haciendo que se rompieran. Y fue ahí donde me desmayé.

Jade


Me quedé pensando sentada en aquél mismo lugar. No paraba de pensar en ese chico y en cómo fue que lo golpearon, se veía mal, muy mal. Pero, también pensaba en Marcel, no sólo de que en dónde estaba, no, sino en el porqué de su tristeza al verme así. ¿Seré tan obvia como para que se me vea lo mal que estoy? o 'a caso Marcel se siente solo porque ya no me la paso con él?. No sé, las dudas van y vienen.

La puerta se escuchó y volteé al instante viéndo hacia atrás.

-Ya llegué, lo lamento Jade.

Negué con la cabeza y miré la siluéta de la directora dirigirse a su lugar.

-Bien, si quieres saber fui a llevar al muchacho a la clínica. Vi que estaba muy mal, así que lo llevé para que descanse.

Asentí.

¡¿Por qué rayos no dice su nombre?! ¡quiero saber su nombre!

-Bien Jade, veamos- Sacó mi expediente. Murmuró algunas cosas en voz baja inentendibles.- Bien, no tienes reportes Jade. Puedes irte- Me sonrió.

-Gracias- le devolví la sonrisa.

Me levanté dispuesta a irme, pero un poco insegura. Aún tenía una duda.

Marcel... ¿Eres tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora