Marcel... ¿Eres tú?

Capítulo 22. Último primer beso.

~Canción en multimedia (8), (recomiendo que la escuchen ya cuando van al último)~

Caminé hacia la ducha, sólo quería relajarme un poco y no pensar en lo sucedido. 

Me despojé de mi ropa y me metí a la ducha. Salí y me envolví en una toalla blanca, me puse otra envuelta en el la cabeza. Después saqué la ropa que me iba a poner, no quería estar todo el día en pijama, bueno si queria, pero tenía que ir a remediar las cosas con Marcel justo ahora, claro, y devolverle la mochila.

Después de haberme cambiado, peinado y arreglado, tomé mi celular y la mochila de Marcel. Justo al irme un sonido familiar inesperado comenzó a sonar de mi celular. Fruncí el ceño, lo tomé y desbloquié. Leí el titulo de este alarmante mensaje: "Sam"

Bufé rodándo los ojos. Abrí el mensaje:

"Jade, por favor, déjame remediar las cosas. Por favor, si quieres ven esta noche a mi casa."

<<Claro, la idiota de Jade cae en todo menos en tus trampas Sam.>> Pensé.

El idiota quería todavía que yo fuera a su casa, y también en la noche. Era obvio que quería acostarse conmigo, pero no es tan fácil como el piensa. ¿Por qué no mejor manda un ejercito de sus amigos simios a secuestrarme y después llevarme con él?,pero no, él es un idiota y no piensa. 

Bufé de nuevo y guardé mi celular. 

Una vez estando en la puerta principal de mi casa salí cerrándo ésta. Miré el paisaje unos segunos, después miré el cielo. Parecía nublado, no quería llevar sombrilla, si lo que más amo de que llueva es mojarme.

Iba a media calle cuando empezó a sonar miles de veces mi celular, el sonido entre cortandoce de tanto que sonaba al mismo tiempo. Revisé quien era, y sin llevarme sorpresa vi que era Sam. Eran sólo mensajes que decían lo mismo una y otra vez, ¿para qué molestarme?

Seguí caminando en dirección a la casa de Marcel, poco a poco empezé a ver la silueta de la gran casa de Marcel. Corrí rápido hasta la entrada de la casa. Subí los tres escalones hasta llegar directamente en frente de la puerta.

Suspiré, me tensé, lo pensé dos veces; después toqué la puerta con mi puño dos veces.

Resoplé.

Pasaron segundos, e incluso minutos y no abrían. Puse mi oído pegado a la puerta para ver si captaba algún sonido, pero ninguno. Miré por la ventanas pero estaban tapadas por cortinas.

Me senté en un escalón esperando. No me di cuenta cuanto tiempo pasé ahí esperando, aún seguía escuchandoce los mensajes que me llegaban de Sam.

Suspiré de nuevo.

Tomé mi celular para ponerlo en vibrador, miré en la pantalla antes de desbloquearla: "13:50", dios ¿cuánto tiempo llevo aquí?, después de ver eso miré mis notificaciones: "24 mensajes"