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Llevaba tres fines de semana sin ir al bosque cumpliendo su promesa de ignorar el llamado de la naturaleza. Por eso estaba sentado en la barra del restaurante dándole la espalda al exterior, no quería verlo.

¿Cómo terminó en el lugar? No lo sabía. No sabía porque bajo del autobús a en el restaurante en lugar de su casa. Pero lo que si sabía era que no debería entrar al bosque.

Sin embargo, la tentación era más grande. De reojo miro hacia la ventana para ver al menos los árboles. El sol se estaba poniendo dejando ver un agradable paisaje, al ser otoño las hojas eran de tonos cafés y amarillas, hermoso.

Frente a sus ojos un rostro conocido apareció, iba corriendo en dirección a la universidad, volteaba hacía atrás como si los estuvieran siguiendo. No aparto la vista del chico, lo siguió girando la cabeza quedando al lado contrario, entonces lo vio introducirse en el bosque, le sorprendió verlo ya que el chico se supone estaba desparecido. Era Young Jae.

Segundos después aparecieron tres hombres corriendo de la misma forma que el universitario. La situación no parecía nada buena, de inmediato captó que iban prosiguiendo al delta. De un salto bajo de la silla, pago la cuenta antes de salir y se adentró al bosque.

¿Por qué un omega iría al rescate de un delta que seguramente estaba siendo perseguido por alfas? No había respuesta. Sus pies se movían solos, ni siquiera se detuvo al no verlos por ninguna parte, los perdió de inmediato.

Estaba tan familiarizado con el bosque que no le hacía mucha falta el sol para ver donde pisaba, además de que confiaba en que Moonie apareciera a su rescate.

Pasaron minutos antes de que lograra encontrar una pista en forma de ropa o más bien lo que quedaba de ella, tomo una de las piezas en el suelo, en definitiva, era la manga de una camisa.

—Young Jae —el miedo le recorrió el cuerpo.

Siguió el camino de ropa hasta que no había más rastro de ellos. No procesaba nada. La ropa rasgada, Young Jae corriendo siendo perseguido, ¿Qué significaría?

Detuvo al paso al darse cuenta de que no podía hacer nada más que salir del bosque en busca de la policía, les diría lo que vio, eso haría.

Se puso en alerta al escuchar pasos yendo hacía el, lo que sea que fuera estaba corriendo. De entre los árboles una figura con apariencia humana apareció deteniéndose de golpe al verlo.

—¿Qué haces aquí? —era el moreno llamado Namjoon.

—Busco a un amigo.

—¿Un lobo? —más que pregunta lo dijo como si lo hubiese adivinado.

Yoongi lo miro sin gracia.

—No. Mi amigo. Un chico.

El moreno no parecía muy convencido de sus palabras, se ofendió al ver que lo creía un loco en busca de lobos imaginarios.

—Enserio. Lo vi entrar y unos hombres lo perseguían... —un aullido agudo lo interrumpió —¿Escuchaste eso? —miro a chico anonadado.

—¿Qué cosa?

—No intentes hacerme quedar como un loco —respondió molesto —vi tu cara. Los escuchaste

—El bosque es peligroso debes de salir de aquí —¿orden o sugerencia? era un alfa, ahora se daba cuenta. El olor lleno el aire.

—Vas a decir que soy un omega y tú por ser un alfa no te pasara nada —contestó a la defensiva.

—No pretendo ofenderte, pero el bosque no es seguro para nadie. Esta anocheciendo vuelve a casa —hablaba de manera tranquila.

—No puedo dejarlo solo... —otro aullido resonó en el lugar. Yoongi miro al alfa con cara de "¿Ves?".

—Lo buscaré ¿Te tranquiliza?

—Bueno.

Lo estaba convenciendo. Yoongi tenía claro que su insistencia no tenía lugar, al final tampoco podría encontrarlo.

Las hojas comenzaron a crujir haciendo que el alfa se enderezara mirando a sus alrededores.

—Ven

El alfa lo tomo por el brazo llevándolo a un escondite entre los arbustos como el antes lo hizo, pero esta vez todo era más rápido. Lo jalo hacia el suelo cayendo sentados quedando el omega entre las piernas del alfa dándole la espalda, le puso la mano en la boca sin taparle la nariz y con la otra le rodeo el vientre, quiso zafarse, pero el alfa le pidió que guardara silencio.

Además de las pisadas comenzaron a escuchar gruñidos como si las criaturas se estuvieran comunicando entre ellas. Yoongi se aferró a los brazos de su protector, sea lo que fuera aquello que los mantenía ocultos parecía acercarse a ellos. Entonces el alfa libero su fragancia impregnándolo de ella.

Al principio fue incómodo ya que el aroma del alfa era fuerte, olía a chocolate amargo con un toque de vino. Poco a poco el aroma se le metía por las fosas nasales embriagándolo y tranquilizándolo, tanto que dejo de pensar en el peligro que los asechaba. No supo cuánto tiempo fue que estuvieron así, nunca lo sabría. Lo que si sabía era que el alfa le estaba respirando en la nuca y el olor disminuía.

—Lo buscare, pero primero tengo que sacarte de aquí —ya no susurraba.

Yoongi se dio cuenta de que ya no escuchaba los sonidos extraños. Se levantaron de prisa, al omega poco le importo ser estirado del brazo a la salida, una parte de el temía queriendo ir a casa. Al salir la luz del restaurante junto a la de la gasolinera los dejo verse mejor.

—Llamare a la policía —Yoongi bajo la mirada al agarre en una indirecta para que lo soltara, pero el alfa no lo hizo.

—No lo hagas —se puso a la defensiva.

—Sus padres lo están buscando.

—Ya no lo hacen.

El omega lo miro dudoso, como el sabría eso.

—Entonces encuéntralo tu... Namjoon —dudo en decir el nombre, pero al final lo hizo —lo prometiste.

—No lo prometí —fue entonces que lo soltó guardándose las manos en los bolsillos del pantalón, Yoongi lo arremedo —pero lo hare, buscare un poco a ver si lo encuentro.

Cuando Namjoon pretendía marcharse Yoongi lo sujeto de la camisa.

—¿Qué pasa? —recibió silencio en respuesta. Se incomodo ante la mirada fija del omega sobre él, se aflojo el cuello de la camisa —eran lobos pequeños. Mi papá me enseñó a cazar no tienes por qué preocuparte.

Yoongi lo soltó de inmediato, la cara se le torno roja. Quizás estaba siendo paranoico al final de cuentas el alfa vagaba por el bosque solo porque sabía valerse por sí mismo o eso creía.

—Okey.

Namjoon llevo una mano a la cabeza de Yoongi despeinándolo, vio como el alfa sonrió enternecido antes de entrar en el bosque.

Sus padres le enseñaron a no fiarse de extraños, ignorando al alfa llamo a la policía, para su sorpresa la denuncia de desaparición fue cancelada. El policía le dijo que el mismo Young Jae se presentó en la estación de policías para decir que se iba por su cuenta y que los padres del chico estaban informados.

Lo que no entendía era que hacia el delta en la zona después de decidir marcharse. Últimamente las piezas del rompecabezas no encajaban para Yoongi.

 Últimamente las piezas del rompecabezas no encajaban para Yoongi

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L𝖆 S𝖔𝖒𝖇𝖗𝖆 D𝖊𝖑 O𝖒𝖊𝖌𝖆 [𝐈] - 𝐍𝐀𝐌𝐆𝐈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora