El misterio de Kim Taehyung ♡ KookV

Capítulo 8

Taehyung siempre había sido un niño relativamente calmado y silencioso, su madre no recuerda haber tenido que lidiar mucho con él, todo lo contrario al pequeño terremoto de diez años que ingresaba a la casa corriendo y devolviéndole la vida al lugar.

- ¡Mamá! - Sanha llegó con la corbata deshecha, la camisa desencajada, el cabello revuelto y manchas de pintura en su rostro. Mientras que Taehyung, quien entró después cerrando la puerta, vestía pulcramente su uniforme y su cabello liso caía en su frente de manera descuidada pero sin llegar a ser desordenada.

- Hola, mamá.

- ¡Mamá! ¡Mami! - el menor de los Kim ni siquiera había dejado hablar a su madre, cuando después de arrojar su bolso al sofá corrió a su encuentro.

- Sanha, tranquilízate - el niño no le hizo caso y con ojos brillosos comenzó a relatar el porqué de su emoción.

- Ha estado así en todo el camino - Taehyung sonrió viendo a su hermano mientras se ubicaba en el sofá y apoyaba su mandíbula sobre la palma de su mano.

- Hoy Park Minhyuk se presentó como alfa, es el primero de la clase en hacerlo y todos creemos que es muy cool - la madre de los niños se le hizo gracia que su emoción fuera tan grande por ese simple hecho - ¡Yo quiero ser un gran alfa también! - y aquello lo hizo reír, porque tenía sus sospechas que el menor no sería precisamente eso.

- Yo fui el último de mi clase cuando me presenté como omega - Sanha se giró para ver a su hermano sentado cómodamente sobre el sofá gris y luego habló en su dirección desinteresadamente.

- Eso es porque tú no eres cool - fingió hacerse el ofendido y luego hizo una mueca graciosa en dirección al menor, quien después de seguir contando acerca del chico de su salón se fue corriendo a ducharse por órdenes de la madre.

- Tae, ¿Cómo te fue? - la omega recogía el desorden de su hijo menor, queriendo saber acerca de su otro cachorro porque sí, para ella siempre serían sus bebés.

- Bien - solo contestó eso haciendo que su madre lo mirara incrédulo, siempre respondía lo mismo. Se acercó dejando las cosas sobre la mesa para ubicarse junto a su hijo mayor.

- Cariño, bien puede tener muchos significados.

- Solo me fue bien, mamá - sonrió haciendo que sus ojos se tornaran pequeños y que el corazón de la omega se regocijara por verlo feliz - Mamá - Taehyung la llamó nuevamente, algo nervioso por lo que preguntaría - Mañana... mañana es el cumpleaños de Nayeon... ella me invitó y tú sabes... yo quería saber, si podía ir - soltó las palabras que venían asfixiándolo durante un mes entero.

- Claro que puedes ir. Sabes que yo quiero que salgas y te diviertas - su madre habló incluso más emocionada que él por la salida del día siguiente.

- Pero papá... - la señora chasqueó la lengua restándole importancia al asunto.

- De tu padre me encargo yo, tranquilo - y Taehyung confió, a fin de cuentas era su madre.

~♡~

La casa de Nayeon era a unas pocas cuadras de la suya, no le presentó dificultad caminar hasta la residencia de su compañera, pero si lo fue tratar de no estar nervioso. En realidad era la primera vez que salía solo, y que sus compañeros lo verían con algo más que el monótono uniforme, o sus acostumbradas prendas. Ese día su madre había insistido en que usara la camisa cuello alto blanca que estaba guardada en su armario desde hace meses, aquella que se ajustaba mucho a su torso, y unos pantalones que solo usó en su cumpleaños pasado, además había sido persistente en su intento de realizar ondas suaves a su cabello, y a pesar de que no había sido su reflejo de siempre, aceptaba que se veía lindo, casi como los demás omegas de su clase.