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Jungkook últimamente no sabía que estaba haciendo con su vida, era de esos efímeros instantes donde su mente se ponía analizar cada aspecto de su cotidianidad y sin llegar a estar completamente satisfecho con su realidad. Porque bien, él podía exponer todas las cosas por las que estaba orgulloso, como por ejemplo vivir de aquello que le apasiona, como lo es el arte, expresado en bocetos o en detallados cuadros donde deja fluir su imaginación, cerrando la boca de muchos que un pasado le dijeron que del arte no se podía vivir. Jungkook no era estúpido, y sabe que el dinero es algo necesario para el sustento de cada persona, pero creía tanto en sí mismo como para arriesgarse y lanzarse al precipicio sin ningún paracaídas, fue difícil al inicio, porque un artista con talento no es reconocido de un día a otro, tuvo que ir a millones de galerías tentando su suerte hasta que finalmente una puso su confianza en él, y con el dinero que consiguió lo invirtió, y siguió pintando e invirtiendo, y en un punto de su vida el dinero se convirtió en un factor que ya no lo estresaba, porque a pesar de que pudo pedir ayuda a sus madres nunca lo hizo, era demasiado testarudo para eso.
Pero luego estaban los momentos donde llegaba a la soledad de su casa, y el silencio que a veces era tan tranquilizador se convertía en uno asfixiante, y luego simplemente quería escapar o haciendo que Jimin o Yoongi lo acompañaran, pero cada quien tenía su vida, y habían instantes donde su compañía no era suficiente y la necesidad de anhelar algo desconocido lo invadían.
- Jungkook... - La voz de Seokjin lo sacó de sus extrañas divagaciones - ¿Qué haces aquí? – su primo venía con unos papeles en la mano, su bata médica y unos anteojos negros que lo hacían lucir muy intelectual. Hermoso. Seokjin era hermoso, y aun así estaba soltero, y Jungkook se cuestionaba como lidiaba tan fácil con eso, como las dudas acerca del futuro le permitían dormir con tranquilidad, como la idea de quedarse solo no lo asustaba, porque el tiempo pasaban y ellos envejecían, y la vida cada día avanzaba con mayor rapidez.
- Solo quería hablar – la relación entre ellos era fácil de entender. Dos hombres que vivían del molestarse el uno al otro, pero que llegado el momento, estarían para el otro.
- Pues, tienes suerte de que la cita de ahora haya sido cancelada... pasa – siguió al consultorio del mayor, el aroma del alfa siendo opacado por esos extraños ventiladores en los conductos del techo que no permitían a los olores concentrarse en la habitación – siéntate – lo hizo, acatando mecánicamente cada cosa y cuando Seokjin hacía su camino en dirección a la silla al otro lado del escritorio tropezó con un bolígrafo ubicado en el suelo. Al menor le sacó una sonrisa ver maldecir a su primo, ver como los papeles en su mano se desordenaron completamente en su intento de buscar apoyo sobre la superficie donde residían sus cosas.
- Creí que el torpe de la familia era yo – Jin le dio una mala mirada mientras empezaba su acción de recoger todas las hojas esparcidas en el consultorio, y Jungkook sintiéndose caritativo ese día lo ayudó, pero entonces estaban esas letras en negrita, con una fuente que resaltaba sobre las demás y su ceño fruncido fue detectado por el mayor - ¿Qué es esto?
- Es de un amigo, lo ayudo con unas cosas – los documentos fueron arrebatados de sus manos sin darle tiempo de continuar leyéndolos, pero las palabras ondeaban en su mente continuamente.
- ¿Cómo podrías ayudarlo tú en la adopción? – Seokjin siempre había sido un experto en el arte de la mentira y hacia alarde de ello en la tranquilidad de sus movimientos, en lo fácil que sus ojos observaban al menor mientras las palabras salían fluidamente de su boca.
- Eso mismo le pregunté yo, pero él solo me los dejó hace un rato que nos vimos en la cafetería... A mí, a quien no puede cuidar ni siquiera de su pez, porque lo dejó morir en menos de 48 horas – y luego estaba bromeando de esa manera particular suya, que era imposible no creerle y regresarle la sonrisa – Entonces – habló cuando estaba acomodado en su silla - ¿Qué es lo que está mortificando a tu minúsculo cerebro? – el alfa menor rodó los ojos, no lo malentiendan, él no era un ingrato que solo visitaba a su primo cuando lo necesitaba, solo que era extraño verlo entre semana, a las nueve de la mañana cuando probablemente el chico debería estar soñando con leches de banana ganando una invasión zombie, o alguna mierda rara de la que solo Jungkook era capaz de soñar.
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El misterio de Kim Taehyung ♡ KookV
FanfictionEntre las calles de Daegu, cuando el sol se encontraba oculto y la luna se elevaba en majestuosidad, la vida de Jeon Jungkook había cambiado. Cuando encontró los ojos cafés al otro lado de la acera el extraño sentimiento que se instauró en él no le...