Capítulo 27

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Jungkook caminó por la casa deteniéndose en la isla de la cocina para tomar la billetera y las llaves del auto que había dejado ahí. El alfa observó al castaño sentado en la mesa del comedor dormitando frente a la computadora y sonrió acercándose.

- Tae - el omega elevó su rostro y acomodó su postura al escuchar su nombre - ¿Por qué no te acuestas un rato? - el menor negó tallando sus ojos con el dorso de su mano haciendo que el contrario chasqueara la lengua - Puedes seguir trabajando después, ves a la cama - Jungkook dijo con voz suave ubicando su mano en los cabellos del chico.

- Debo hacer la cena antes de que regreses - Taehyung cerró los ojos un momento disfrutando del contacto y del olor del alfa.

Desde el día en que el menor se había aventurado a pedir un abrazo y que el contrario le diera vía libre a hacerlo siempre que quisiera, se había vuelto más cariñoso y últimamente ansiaba más del toque y el aroma del azabache, como si nunca tuviera suficiente de él.

- Compraré algo después de la reunión. No te preocupes y ve a descansar - el omega se veía dudoso desde su asiento en la silla del comedor, pero Jungkook sabía que ha estado trabajando demasiado y exigiéndose a sí mismo. Entre las tareas universitarias, ahora que inició el nuevo periodo académico, las visitas cada vez más constantes a Sanha y su necesidad de dejar reluciente cada rincón de la casa, lo han mantenido tan ocupado que apenas y duerme un par de horas al día - Bien, deja eso - el alfa cerró la computadora que el menor había traído de su casa y se bajó hasta llegar a la altura del contrario ubicando sus manos a ambos lados del cuerpo sobre la silla - Necesitas descansar Tae, no quiero que te enfermes.

- Está bien - el castaño se rindió finalmente mostrando una sonrisa de dientes completos que hizo al contrario feliz - No te demores mucho - Taehyung volvió a hablar jugando con los dedos de su mano sobre sus piernas.

Jungkook no quería salir, realmente no quería, en especial ahora que el omega parecía muy sensible e incluso si quisiera disimularlo, había notado que inventaba pequeñas excusas para tocarlo, abrazarlo y estar cerca suyo.

Pero tenía una reunión importante con una curadora de arte y la había estado aplazando por mucho tiempo por no querer dejar solo al menor. Y a pesar de las restricciones no tuvo más opción que ceder cuando el castaño se enteró y dijo que estaría bien por su cuenta.

- No lo haré. Ven - Jungkook retomó la posición inicial y abrió los brazos haciendo que el contrario entendiera de inmediato lo que quería.

Taehyung encontró una fascinación en ser cargado por el alfa cada vez que iba a dormir, ninguno de los dos sabe a ciencia cierta cómo comenzó eso entre ambos, pero se había formado parte de la rutina y se acostumbraron de tantas veces que repitieron la acción.

El castaño se levantó y dio un suave brinco enredando sus piernas en la cintura del mayor y escondiendo su cara en su cuello mientras sentía las palmas de las manos ajenas apretar suavemente sus muslos para sostenerlo y caminar en dirección a la habitación.

- Estoy seguro que cuando despiertes ya estaré de vuelta - Jungkook dijo recibiendo un murmullo inentendible como respuesta contra su piel, y riendo un poco al sentir la nariz del omega hacerle cosquilla mientras inhalaba su aroma.

- ¿Puedo tomar una de tus camisas? - Taehyung preguntó apenado cuando fue dejado en la cama doble y sus mejillas rojas, a veces sentía que se sobrepasaba con sus pedidos y muestras de afecto, pero no lograba controlarse, menos ahora que incluso creía que iba a llorar cuando Jungkook saliera por la puerta de la casa, a pesar de haber sido él mismo quien lo convenció de que fuera.

El menor no quería ser un estorbo en la vida diaria del alfa y llevarlo a dejar de hacer las cosas necesarias en su vida.

- Claro - Jungkook no le tomó importancia al asunto y dejó un beso en el cabello castaño despidiéndose y mirando la casa dudoso antes de reprenderse a él mismo y salir del lugar.

El misterio de Kim Taehyung  ♡ KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora