El misterio de Kim Taehyung ♡ KookV

Capítulo 43

La primera nevada del año.

El omega observaba los copos de nieve caer uno tras otro a través del cristal. Una espesa capa blanca se cernía en el exterior, sobre el asfalto de las carreteras, los autos, los tejados e incluso sobre las puntas de los árboles.

Una majestuosa imagen de lo atractivo que la pureza en esa época podía llegar a ser.

Taehyung sintió como su mano fue tomada con suavidad y apartó la mirada de la ventana para observar a su alfa. Jungkook transmitía la misma calidez que siempre, era una fuente inagotable de ella, y el menor no podía evitar buscar su cuerpo para que dispersara todo el frío que la estación traía consigo.

Los ojos cafés lo observaban con deleite y ternura. El omega sabía que era la combinación perfecta que desearía tener para toda su vida. 

- Tu madre quiere hablar contigo - el castaño se había encerrado aún más en esa pequeña burbujita donde sólo él y Jungkook existían. Ahí no había nada malo, solo el cuidado y protección que el alfa podía otorgarle, a su lobo vivir tranquilo y sin temores mientras olvidaba que había todo un mundo afuera esperando por explicaciones - No te quiero presionar, pero también debes declarar - el cuerpo del omega se tensó de inmediato pero a los pocos segundos, el roce que creaba la nariz del mayor en un costado de su mejilla fue suficiente como para hacerlo caer nuevamente en ese estado dócil.

Taehyung había salido hace cuatro días del hospital, un poco después que el alta de Jungkook fue dada. Y una semana completa desde que aquel incidente había sucedido.

El alfa recuerda cómo la mirada de su novio había sido esquiva de dirigirse a la casa de enfrente, de cómo sus manos apretaban su abrigo buscando acercarse a su costado tanto como le fuese posible hasta que el interior de su hogar los recibió.

Jungkook no iba a negar que estaba demasiado estresado por todo. Taehyung no hablaba con nadie que no fuese él, sentía que de alguna manera habían retrocedido al inicio de ese camino que cruzaba junto a su pareja, y de no ser por el hecho de que el omega estaba incluso más apegado a él que antes, creería que nuevamente estaba frente al chico de mirada oscura y triste que conoció hace unos meses.

La señora Kim y él se habían encargado de hablar con la policía y dar sus testimonios, Hoseok había tomado su caso y defendía a Tae, quien era el principal sospechoso del homicidio dada las huellas presentes en el arma. Realmente ante la ley, Kim Taehyung era un culpable más, aparentemente. Pero la cruda verdad que se escondía tras la muerte del alfa Jinwoo era más complicada de tratar.

Si no fuese por el ex-novio de su mejor amigo, ahora el omega se encontraría tras las rejas, sobretodo porque no ha querido presentarse ante la justicia. Dada las circunstancias, el secreto con el que castaño había cargado durante gran parte de su vida tuvo que ser revelado.

Los informes médicos corroboraban el abuso al que fue expuesto Taehyung por muchos años, las heridas que su cuerpo presentaban eran un recuerdo con el que lidiaba diariamente, sus muslos apenas estaban cicatrizando correctamente, y las viejas marcas de su espalda, brazos y más partes de las que Jungkook antes ni siquiera imaginaba, también eran pruebas del calvario que más de una persona, desgraciada e injustamente, ha sufrido.

- Hace frío, iré mañana - La respuesta del castaño fácilmente pudo ser satisfactoria para cualquiera, pero no para el alfa que ha estado escuchando esa clase de excusas durante varios días. 

Un suspiro salió de los labios del azabache acomodándose en la cama junto al menor, el panorama que se veía a través de la ventana era el de la blanca navidad que estaba a la vuelta de la esquina.

- ¿Y tu madre? - Jungkook siente pena por la omega, ha querido ver a su cachorro pero al igual que con la otra situación, una excusa se anticipa o simplemente se encierra negándose a salir, como aquellas ocasiones donde se había  presentado en la casa donde ahora residía su hijo. Y en el tiempo que estuvo en el hospital fue muy complicado para Miyeon estar fuera de la cama debido a la contusión causada por su difunto esposo.