Como mi tinta

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Inspiración ON. Hoy dos capis chics! 

Narra Travis

No he dormido. Definitivamente eso no estaba en mi mente esta noche. Los pecados reunidos, son tal vez lo único que me queda, así que es a lo que me adhiero. 

El café baja caliente por mi garganta en el amanecer, esta terraza, aquí con la taza hirviendo y el cigarro en mi boca es lo más cerca que puedo llegar al paraíso en estos instantes. 

La puerta de cristal se abre y sale la única persona a la que no quiero ver. 

Se sienta a mi lado, saca su cajetilla, lleva un pitillo a sus labios y coge mi mechero de la mesa para encenderlo. El silencio es una mierda, ya lo sufrí anoche de la peor forma posible. Tras unas caladas sonoras por su parte y un buen sorbo de cafeína pura, apoya sus antebrazos en la mesa de madera que enfrentamos. No me mira, no le miro. Eso esta bien para mi. 

- No nos han presentado formalmente, pero creo que tampoco lo necesitamos. Por lo menos yo no lo quiero- gira su cabeza hacia mi, con una sonrisa absurda en su cara, suspira y vuelve a mirar al frente- Tan ciego, tan hundido y tan lleno de mierda. 

- No sabes un carajo, así que cierra tu puta boca- digo cortante. No quiero esta conversación. 

- Oh pero no tienes razón, si qué lo se, lo se muy bien. Puedes pensar que es mierda lo que sale de mi boca, pero eso está bien, solo soy una mierda más en el mundo ¿no? como tu.

Suspiro lentamente, haciendo que el odio y la repulsión por este hombre llene cada poro de mi cuerpo. 

- Ella no se merece esto- dice. 

- Se perfectamente lo que ella merece y lo que no- se rie. 

- No, mierda, no lo sabes. No tienes una puta idea de lo que merece. Conozco esa jodida mirada, que llevas como un cachorro apaleado, la conozco perfectamente, porque es la misma que veo en el espejo cada día de mierda que estoy cerca de ella. Y se que es igual para los dos, una bendición y una maldición. 

- ¿El qué?- no se ni por qué pregunto, ya que lo único que quiero es que se calle. 

- Danielle, Dani, Dan, Ángel. Como prefieras llamarla. 

- Dan no es una maldición- digo serio y cortante. 

- Si que lo es. Por lo menos para aquellos que la amamos más que como se ama a una amiga o a una hermana. Eres tan estúpido que me encantaría ahogarte en el mar- dice riendo sin diversión- Hay dos tipos de tios que pueden amarla de esa forma. Los que jamás podrán ver en su interior la realidad, los que nunca repararan las piezas rotas o quitarle la carga que porta, porque no lo comprenden, no entienden que hay cosas que no se pueden solucionar. Ella es así ¿no? rota y luchadora, llena de feladad y a la vez hermosa. Es una contradicción andante. Es lo que atrae a los segundos tipos de hombres que pueden amarla. Hombres como nosotros, que portamos nuestro propio equipaje, que llevamos sangre en nuestras manos. Sabemos por lo que pasa, y sabemos como arreglarla, porque no se trata de hacer obras, si no de estar cerca, de sostenerla, de hacerla saber que la amas. No necesitas citas absurdas, ni regalos o palabras llenas de corazones. Solo estar en pie, a su lado. 

- ¿Por qué coño me estas diciendo esto?

- Porque necesitas despertar. Pero callate de una jodida vez y dejame continuar-dice serio y con una voz de advertencia, me da igual lo único que quiero es que acabe-  Porque tu y yo, somos tan diferentes pero a la vez tan iguales que solo quien mira y observa desde fuera puede verlo. Ambos llevamos sangre inocente chorreando por nuestros dedos. Pero hay una tremenda diferencia; yo soy un delicuente, tu eres un jodido héroe de mierda- resoplo- Si, no hagas eso, no te victimices, deja de ser el pobrecito soldado que todos llevan en palmas, y comienza a comoportarte como un jodido hombre. Porque das maldita lástima, capullo. 

- ¿Crees haber perdido todo? Solo eres un niñato roto que se ha dado por vencido. Jodidamente patético. Piensa en grande, sueña en grande, comienza pequeño. Una frase llena de sabiduría que una vez me hizo levantarme. Reconoce lo que tienes, aprecia lo que sabes, porque así seras pleno. El peor enemigo que tienes eres tu mismo. Si no hay un enemigo dentro, jamás habrá un enemigo fuera que pueda usar armas. Todas las millones de cosas que podrías hacer y no haces, por el simple razocinio de que tienes miedo. ¿Tienes miedo de fallar? ¿de cometer un error? Tienes miedo de no ser perfecto, pero escuchame bien, capullo, porque nadie es perfecto. No tienes que ser perfecto para coneguir lo que quieres, lo que sueñas, para se quien quieres ser. No hay ningun momento explícito en la vida para dar un paso hacia delante, para hacer algo bueno, si esperas por un momento perfecto, el perfecto tiempo se te escapa de las manos. ¿Sabes lo que quieres hacer? crea tu mismo el jodido momento perfecto, la oportunidad clave, y la situación correcta. Mucha gente se conforma, se queda en ese tiempo, no buscan ni esperan. Sal de esa situación de confort de autolástima que te has creado en la cabeza, recupera tu espíritu, no tu alma, porque puedes pensar que ya no está, pero es la parte pura que siempre estará intacta con nosotros. Nunca vas a crecer, nunca vas a dar el paso si no dejas de mirar a tus pies y miras hacia arriba. Nadie lo va a hacer por ti, chico. Ni siquiera Danielle lo va a hacer. Ella no es tu espíritu, ni tu alma. 

- ¿Por qué me dices todo esto?

-Porque ella te ama, y tu la amas. Y es este instante en el que tienes que crear tu momento. Porque si no os marchitareis los dos. No lo hago por ti, lo hago por ella. Mirar hacia arriba para ti, es mirar en la dirección correcta, hacia Dani. Es tu oportunidad, eres la suya, para ser felices. Esta clase de mierda solo aparece una vez en la vida, y si la dejas marchar, la sangre que llevas en tus manos, no se comparará con la perdida de ella. ¿Te sientes mal ahora? Imaginate dentro de veinte años cuando ella no este a tu lado. Poneros los dos en pien, ponte rígido frente a ella, levántala contigo. Haz algo bien, ahora, hazla levantarse, y ella, sin que tu te des cuenta hará que te incorpores a su lado. Solo necesitas un pequeño paso, chico. Solo uno. Y tienes tu mundo a tus pies. ¿Vivirás con un y si...? No te lo recomiendo. Jamás dejes de luchar. Guarda en tu cabeza las vivencias que sufriste, porque eso te convertirá en el hombre que una vez llegarás a ser. Pero no vivas en el pasado.  Crea tu futuro a tu medida.

Nos quedamos ambos en silencio. Cada uno perdido en su cabeza. Jodida mierda que tenga que ser Ryder quien venga a darme un discurso motivacional. Se levanta y recoge su taza. 

- Regresa al puto campo de flores, chico.