- Sabía que me amabas desde el primer día tanto tiempo atrás en el instituto- llevamos unos veinte minutos sentados en el porche trasero y hasta ahora no habíamos hablado. Parker rompió el silencio.
- ¿Ayer?- mi cabeza descansa sobre su hombro mientras este saca otro cigarro de la cajetilla.
- El amor no entiende de espacios temporales muñeca- me río. Se hace un cómodo silencio, pero soy buena amiga, y como tal, quiero saber que pasó ahí atrás con Travis.
- Parker...
- Lo se, ha sido extraño ¿cierto?- no presiono, se leer a la gente, y se que Parker quiere contarmelo, pero necesita ordenar su cabeza, puede que ni el mismo sepa por qué lo hizo. Pero noto una confianza agradable en el ambiente, es raro, porque nos conocemos de hace veinticuatro horas, sin embargo, he podido descifrar suficiente de él en este corto periodo de tiempo.
- La chica pelirroja- comienza.
- ¿Linda?- asiente- ¿qué le sucede?- continúo en voz baja.
- Es muy buena chica, tímida, trabajadora, amable, simpática y odia a los playboys- levanto mis cejas, no concuerda mucho esa descripción con lo que me encontré en el baño llorando. Venga, fue desvirgada por el playboy del instituto en un baño...- Si, de verdad, ella es así. No entiendo porque pasó lo que pasó esta mañana con Travis ¿Por qué mierda lo hizo?, ella no es así.
- ¿La conoces?
- No- Parker eres muy extraño- Sé que te lo puedo contar, no me digas cómo, pero lo sé. Pero no te puedes reir de mi ¿ok?- me mira y asiento con una pequeña sonrisa- Bien. Hace tres años nos juntaron para hacer un trabajo en clase por parejas. Ella era mi compañera. Nunca me había fijado en ella en realidad, es pequeñita, no habla mucho, es una especie de nerd, aunque nunca he visto que alguien le intente putear en el instituto. La cosa es, que desde ese día me intrigó, yo intenté acercarme a ella, pero era imposible, tenía unas barreras terribles, no dejaba pasar a nadie, y era tan jodidamente frustrante...mierda. Después de unos meses pensé que era un reto para mí, ya sabes, destrozar sus barreras, esas cosas, para que me dejase pasar. Pero por mucho que intentase, nunca llegó a hablar conmigo, me miraba hasta mal joder- rie- Yo empecé a observarla, en los pasillos, la cafetería, cuando llegaba y cuando se marchaba. Dios, sueno como una acosador- empezamos a reirnos.
- Continua por favor- le insto.
- Un día ella no vino a clase- agacha la cabeza y pasa sus manos arrastrando su pelo hacia atrás- eso era jodidamente extraño, nunca la había visto faltar. No vino en una semana. Cuando llegó tenía una herida en el labio y un moratón en la mejilla, lo intentó tapar con maquillaje, nadie se dio cuenta, pero yo sí. Le intenté pregunta que había sucedido, dejó de hablarme en ese mismo momento, pidió incluso un cambio de compañero.
- Lo siento- niega con la cabeza frunciendo los labios.
- No te voy a decir que estoy enamorado de ella, porque la verdad, no lo se. Pero tenía una necesidad de protegerla de todo lo malo. No voy a profundizar en el tema ¿ok? no es mi historia para contar, pero la maltrataban en casa, se mudó con su tia y parece que volvió a ser la misma.
- Hasta hoy...
- Hasta hoy. Nunca jamás pensé que podría ser una de las putas de Travis- hace un largo silencio- es un buen tio ¿sabes?, es muy buen tio, desaparece continuamente, es bipolar, y posiblemente su foto aparezca al lado de la definición de problemas. Pero es un gran amigo, nos conocemos de siempre. Pero desde hace unos cuatro años todo cambió, su madre falleció, su padre nunca está en casa y se fue a vivir con su abuela. Solo viene a la casa de enfrente para pensar y estar solo.
- ¿De qué falleció su madre?
- Cancer. Y terminó endeudado hasta el culo, un crio de catorce años...Cambió totalmente, alcohol, drogas, sexo a todas horas con cualquiera, las peleas, mucha fiesta, no se, nadie entiende lo que le pasó. Ni siquiera tu hermano, que es como su confidente.
- ¿Las peleas?- pregunto.
- Peleas, carreras, todo lo que tenga posibilidades de apostar, el participa, y gana siempre joder, es una maquina de ira y destrucción. Así paga todo.
Nos quedamos en silencio. Pensando. Travis era todo un misterio. Uno que no quería resolver, me recuerda a Dylan en cierto modo, las peleas y las carreras, pero lo de la ira es otra cosa, no lo hace por diversión, tal y como nosotros lo hacíamos, si no como escapé ¿no? eso es lo que me está dando a entender Parker.
Lo de Linda, no lo quiere decir, pero se le ve preocupado por ella, y no como un hermano mayor se preocupa por su hermana pequeña.
A veces la vida misma, te pone un muro a tu alrededor que no puedes saltar, es como una barrera de la que no puedes escapar, no porque no quieras, si no porque tu cabeza no te lo permite. Solo tu te pones las barreras, pero yo estuve ahí, en momentos en los que solo quieres no salir de tu cama, solo porque no entiendes el por qué de todo lo que te sucede. Y lo peor, es que no eres tu el que tiene el problema, generalmente es alguien que te hace pasar por ello. No sabes como afrontarlo, no tienes una visión...periférica, solo ves un punto negro, el problema, es un bucle de que no puedes salir, e incluso a veces ni quieres salir de el, la comodidad al intentar ignorar todo. Dylan fue mi ancla. Me sacó de ese circulo vicioso, me fuí a vivir con el durante el verano, me levantaba a horas intempestivas solo para hacer deporte, comiamos y cenabamos fuera, salíamos todos los días, me prohibio el alcohol, para no ahogar penas...Dylan me salvó junto con su familia, que pasó a formar parte de mi vida.
Seguramente le deba mi vida a él.
- ¡La pequeña Daniellita!- oh dios...rompieron totalmente nuestro silencio. Giré para ver a mi adorada vecina.
- ¡Señora García!- me levanté agarrando del brazo a Parker para que me acompañase a la valla que separaba nuestras casas. Llegamos para ver a una deslumbrante mujer latina, con el cabello blanco y largo enredado en una trenza perfecta que llegaba hasta su cintura. La señora García nos hacía todos los domingos galletas, gelatina, pasteles, cualquier cosa, es una mujer increíble.
- Oh preciosa, ¿cómo te atreves a no venir a visitarme?
- Llegué ayer Alicia, por supuesto que iba a ir a visitarte- con todo se me había olvidado. Ups.
- Mirate, hermosa como siempre, madre mia, quien viviese en tus años todavía, eres todo un ángel. ¿Y este es tu novio preciosa?- dijo señalando a Parker.
- Oh no, no, es un buen amigo Alicia, te presento a Parker, Parker Alicia, Alicia Parker- enseguida se acercaron, Parker extendiendo su mano, a lo que Alicia lo agarro fuerte y lo empotró contra la valla para darle un gran abrazo.
- Te he visto por aquí, ¿eres amigo de mi Lucas? ¿cierto?
- Si, señora- afirmó Parker con una extensa sonrisa.
- Que muchacho tan guapo.
- No, no Alicia, no aumentes su ego- reímos los tres, Parker pasó su brazo por mis hombros y me acercó a él.
- Muchas gracias señora García- contestó.
- Nada de señora cariño, Alicia, llamamé Alicia.
- Por supuesto Alicia- dijo mirandome y dandome una sonrisa ladeada.
- Mañana vienes y os hago un postre para todos, hace mucho que no cocino para mi hermosa niña...
Después de un rato hablando sobre la valla, le conté que viviría aquí hasta que empezasé la universidad. Entramos en la casa para ver a todos observandonos con nerviosismo, delante dos pizzas sin comer. Ups. Nos sentamos en los sofas y comenzamos a comer como cerdos.
Travis ya no estaba cuando llegamos.

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Como mi tinta
ChickLitConoce una para nada peculiar historia. Donde el chico malo no es tan malo y la chica buena realmente es mucho menos buena. Después de años de recuerdos olvidados para unos pero no por otros...¿qué sucederá cuando se de el reencuentro? Mentiras, ce...