KYLER. [AKDR #2]. ©

29

La nieve cae en pequeños copos, doy pasos tranquilos de regreso a mi vieja casa, salí tan rápido rumbo a casa de Billie, que no me pude detener a admirar la nieve.

Veo a lo lejos el auto de Kyler venir en esta dirección, apresuro mi paso hasta la casa, al llegar empujo la puerta que la había dejado junta, cierro la puerta detrás de mi, Pamela está recostada en el sillón, y Danielle no se encuentra.

—Pamela.. ¿Te sientes bien? —Me acerco a ella, tomo asiento a su lado, ella está perdida en sus pensamientos, solo dirige su mirada a mi unos segundos y asiente con la cabeza.

No tardamos mucho en oír la puerta, esta tiene dos seguros, en este lugar no solían meterse a las casas si veían las puertas abiertas, por ello algunas tenían la opción de juntarse y colocar un atado desde afuera al salir.

Darwin es el primero en entrar, Pamela gira su rostro hacia la puerta, yo intento examinar sus expresiones, sus ojos al ver al chico se iluminan, Darwin solo sonríe sin notar lo que yo.

Pamela cambió su expresión de vacío por una que reflejaba el como si hubiese visto un mismísimo angel.

—Hola Sage. —Darwin me sonríe, le devuelvo la sonrisa en saludo, sus ojos se posan en los de Pamela, le regala una sonrisa amable no tan sonriente y se aleja de nosotras. —Danielle. ¿Donde estas? Te traje algoo.

Desaparece en el pasillo, yo en silencio veo el rostro de Pamela cambiar completamente, volvió a sumirse en el vacío de antes, oh no, esto no es bueno.

—Pamela... —Susurro mirándola, pero ella de golpe se levanta y sale en dirección a las habitaciones.

No puede ser, Pamela no puede gustarle Darwin, él... Ya está ilusionado y enamorado de Danielle, como ella de él.

Me levanto y voy a la puerta, en cuanto voy a abrirla se abre dejando ver a Kyler, sus ojos verdes me escanean rápidamente.

—Estas aquí... —Murmuro llevando mi mano a la suya, sin quererlo vuelvo a oír en mi cabeza la voz de Alexer.

No me deja en paz.

"Te amo, adiós."

No, no, no. Sal de mi mente.

—Sage. —Levanto la vista, me siento un poco mareada.

—Kyler, creo.. —Creo que Alexer está atormentando mi mente, eso quiere decir que está muerto? —Creo que, Pamela está... Atraída por Darwin, no sé si le gusta.

—¿Pamela atraída por Darwin? Pero... Recién lo conoce, debe ser algo pasajero. —Le resta importancia, si, debe ser eso, ella no se enamoraría de él, es decir... Ella ya debe saber que entre Danielle y Darwin hay "algo"

—Está todo listo para tus clases, ¿Vamos? —Coloca un mechón rebelde detrás de mi oreja.

Asiento con la cabeza.

—Vamos. —Hago una suave presión en su mano, él abre la puerta, sale primero, verificando que todo esté en orden, salgo detrás de él, me guía al auto, subo al copiloto y él no tarda en acompañarme en el lado del piloto.

—Por fin vas a enseñarme como fue que me arrebataste la pistola la vez pasada?

—Mmh, puede que sí. —Sonríe de lado, llevo mi mano detrás de su nuca y acaricio su cabello con suavidad.

—Me gustaría hacer la misión de la OMC el 24, tendremos estos días hasta ese para entrenar. ¿De acuerdo?

—Sage. —Reduce la velocidad. —Es muy apresurado...

—Quiero hacerlo, antes de mi cumpleaños. —Donde oficialmente seré mayor de edad, cumplir 18 en tan solos unos cuantos días.

—De acuerdo. —No pareció convencido, pero accedió a mi petición.

Veo el camino en espera a llegar al lugar donde empezaré a aprender de Kyler.

***

Todo Frelighsburg está cubierto por inmensas capaz de nieve, llegamos a un... ¿Establo? Bajo del auto al mismo tiempo que él.

—Seré tú oponente, si puedes vencerme estarás lista. —Asiento, tengo que mentalizarme.

Empiezo a caminar al interior del establo, aquí hace demasiado frío, supongo que adentro será más fácil.

—Recuerda que solo estamos entrenando, no te obsesiones ni intentes exigir a tu cuerpo más de lo que da. —Siento su mano enlazarse con la mía, ambos entramos al establo vacío, viejo y lleno de paja.

—Empecemos. —Camino casi un metro lejos de Kyler, llevo mis manos a ajustar el moño que sostiene mi coleta.

—Para arrebatar la pistola, debes estar cerca del oponente, no muestres tus intensiones, muéstrate segura pero no al punto de alardear que no puede disparar, por qué lo hará.

Asiento con la cabeza, doy unos pasos acercándome, veo que quita el cartucho de balas, tal y como Alexer me enseñó, solo que él lo hace rapidísimo.

Me apunta. —Una vez que esté apuntando, vas a necesitar de fuerza en tus dos manos, ya que una debe sostener la parte de la corredera, no la boca de la pistola.

Veo atentamente sus ojos, luce concentrado en explicarme.

—La otra, debe golpear la muñeca que sostiene la pistola, las manos deben moverse al mismo tiempo, una vez hecho, la boca de fuego debe apuntar lejos de ti, no te interpongas que le puede salir un tiro.

—Déjame intentarlo. —El sostiene con firmeza la pistola, me acerco a tal punto que tengo la pistola a solo centímetros de mi rostro.

Hago los movimientos tal y como Kyler me explicó, pero no lo consigo, gruño e intento nuevamente.

—No te exijas, Sage. —No hago caso a sus palabras, intento hacerlo más fuerte por segunda vez.

—Estas muy duro, Kyler, así no podré arrebatarte la pistola. —Suspiro frustrada, a mi mente llega una idea, la tercera es la vencida.

Una vez más lo hago, esta vez no intento alejar su muñeca de la pistola, aprieto mi agarre en sus venas y ejerzo toda la fuerza que me brindan mis brazos.

Y logro arrebatarle la pistola.

—Ohh, ¡Lo logré! —Me acerco a él y planto un corto beso en sus labios. —Sigamos.

—Eres bellísima, y toda una fiera. ¿Eh? — Sonríe divertido, acercándose. —Mi fierecilla.

Murmuró a centímetros de mi.

—¿Tú fierecilla? —Bufo divertida, él asiente.

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