Epilogo

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Los dioses se encontraban de nuevo en una iglesia, esta vez se casarían Percy y Annabeth, Jason y Piper y casualmente, también se casarían Nico y Lilly, seria una asombrosa boda triple, todo el campamento se encontraba ahí y los dioses Olímpicos serían los padrinos y madrinas de las bodas, en la primera fila se encontraban, Thanatos, Deimos, Fobos, Amelie y Hades mirando a las parejas, los dioses menores se encontraban detrás de los antes mencionados y los campistas se encontraban del otro lado del pasillo.

-No pensé que dejaras que tu hijita se casa con huesitos -dijo Deimos.

-Pues no quería, pero huesitos me convenció -dijo Thanatos.

-Más respeto, que es mi hijo -dijo Hades, llamando la atención de los cuatro dioses.

-Hombre, pero calmado -dijo Amelie- Todos en algún momento lo veíamos venir.

-Sinceramente pensé que se casaría contigo -dijo Fobos.

-Primero congelo el inframundo -dijo Hades.

-Admite que me quieres -dijo Amelie mirando a Hades y posteriormente miro a los tres dioses- ¿Ya les conté que me abrazo? -Deimos, Thanatos y Fobos miraban a Hades con la boca abierta 

-Cuéntanos el chisme -dijo Deimos.

-Se podrían callar -dijo Selene detrás de los dioses- No me dejan escuchar los votos.

-Lo sentimos -dijeron los cinco dioses. 

-Si alguien que piense que estos matrimonios no se lleven acabo, que hable ahora o calle para siempre -dijo el cura y toda la iglesia se sumió en silencio,

-Los declaro, marido y mujer, pueden besar a sus novias.

La iglesia se lleno de aplausos.

Horas después los oscuros se encontraban con sus versiones de dioses, en uno de los jardines donde se celebraría la fiesta.

-Y así fue como Hades me abrazo -termino de decir Amelie.

-No te abrace -dijo Hades

-Solo te pisaste la túnica.

Mientras que adentro, se encontraban los olímpicos y los dioses menores, mirando a los oscuros.

-Llegue a la conclusión de que ellos no necesitan de nadie más, cuando están los cinco -dijo Zeus.

-Solo se necesitan a ellos -dijo Apolo sonriendo mientras miraba a las dos niñas que iban corriendo hacia Amelie.

-¿Ellas también serán semidiosas? -pregunto Grace mientras se sentaba al lado de su padre.

-Dicen que si -dijo Apolo- Me recuerdas de que eres diosa.

-Gracias papá por ponerme atención -dijo Grace riendo- Diosa de la luz.

-Por eso le digo rayito de Luz -dijo Malakai llegando.

-Hace mucho que no estábamos juntos -dijo Apolo, mirando que Amelie se acercaba con Vanessa de la mano y Valeria en brazos, Kian se acerco a su madre y cargo a Vanessa, ambos siguieron caminando hacia Apolo.

-Bueno estamos juntos -dijo Amelie sonriendo- Hola queridos 

-Madre -dijeron Grace y Malakai, los cuales besaron a su madre y saludaron a Kian y a las gemelas.

-Oye Malakai -dijo Kian.

-Si, dime -respondió.

-¿De que eres dios? -pregunto Kian.

-De la oscuridad y las mentiras -sonrió.

-Yo salí muy a papá y tu muy a mamá -dijo Grace mirando a su hermano.

-¿Celosa porque salí como mamá? -pregunto Malakai 

-¿Celoso porque salí como papá? - se la regreso Grace.

-Claro que no -dijeron ambos y tras rodar los ojos se fueron junto Kian, Vanessa y Valeria, para irse con sus hermanos semidioses.

-Nunca pensé que uno de mis hijos saldría con uno de Ares -dijo Apolo 

-Pues, al parecer nada es lo que parece querido -dijo Amelie tomándolo de la mano y llevándolo a la pista de baile, donde los recién casados se encontraban bailando.

Por fin hubo paz y tranquilidad para los semidioses, por fin podrían vivir una vida feliz sin complicaciones, haciendo familias, creciendo y siendo libres, todos son libres, por lo menos hasta que llegue la otra generación de semidioses.

Y este cuento griego a terminado. 

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