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Jungkook abre la puerta y entra, la deja abierta y solo sigue su camino al interior de la casa. Taehyung suspira y asiente con su cabeza, no sabe que va a pasar pero ya está nervioso, entra a la casa y de primeras solo se enfoca en cerrar la puerta atrás de él.

Luego mira toda la casa o lo que puede ver, es de un tamaño mediano, suficiente para que los cuatro vivan muy cómodos. Los olores... puede sentir el de pintura, al invierno, por supuesto al olor de la miel y la menta, pero hay otro más suave, manzanilla, es el de Jangmi que se ha ido disipando por su ausencia.

Sigue el olor de la miel y la menta, encontrándose luego de pasar una pared con una cocina muy bonita, grande, casi del tamaño de su habitación por dos.

Jungkook se queda en el interior de la isla en la cocina mientras Taehyung ocupa un lugar en los bancos de esta misma.

—Tu casa es grande —sin más que decir, es lo único que se le ocurre.

—¿Sí? Era más grande en Jungdu, aquí quisimos estar más juntos, más cálidos —Jungkook se encoge de hombros —. ¿Deberíamos pedir algo de cenar? —mira el reloj en su móvil.

—¿Eh? —Taehyung mira al reloj que enseña la estufa, son las siete de la tarde —. ¿Quieres cenar?

Jungkook mira a Taehyung y luego asiente con su cabeza.

—Bien, ahí lo tienes —Taehyung da un golpe a la isla para dramatizar solo un poco. —. Pediremos algo de comer y luego haremos las galletas, ¿eso suena bien para ti?

—Sí, recuerda el helado —ahora sí que su sonrisa es más grande.

Piden comida, no mucho, sushi con algunos dumplings, lo suficiente para mantener el estómago ocupado. Ven una película, aunque sinceramente no le prestan atención, se rían por algunos comentarios, fue un desastre divertido.

Luego sin más toca hacer las galletas. Taehyung le iba pasando los ingredientes mientras Jungkook lo mezcla.

—Ahora las chispas de chocolate, ¿cierto? —depende de las indicaciones de Taehyung.

Mira el paquete plástico donde están las chispas. Taehyung asiente con su cabeza, se encarga de abrir el paquete y poner las chispas sobre la mezcla, pero cada que echaba una, se comía otra.

—¡Oye! —Jungkook eleva su voz y él apunto de llevarse una a la boca se detiene y la mira expectativo —. ¿Quieres parar? Son para las galletas —mira la chispa de chocolate que tiene él a solo centímetros de su boca.

Y sin más, para provocarlo, solo se la lleva a la boca y se la come, Jungkook suspira tratando de calmarse. Deja todo para ahora rodear la isla y venir a Taehyung, él se levanta del banco junto al paquete de chispas en la mano y se aleja de a pocos. Se está divirtiendo, hasta que su espalda choca contra la enorme ventana que da al patio, está acorralado.

Jungkook y Taehyung puede que sean de la misma altura, tal vez Jungkook un poco más alto por centímetros, por eso es que Taehyung esconde las chispas detrás, en su espalda baja.

Jungkook tratando de obtener las chispas solo se acerca peligrosamente a Taehyung y con una mano trata de alcanzar el paquete.

Aunque Taehyung muy pendiente de que se están viendo a los ojos, muy cerca, tan cerca que... sus respiraciones se combinan como una sola, sienten el cuerpo caliente.

Tenerlo tan cerca de su rostro le está haciendo delirar.

Pero lo quieres, quieres besarlo, hazlo.

El lobo alfa de Taehyung toma parte del cuerpo ahora, en serio lo quiere besar. Acerca su rostro aún más al suyo, Jungkook no retrocede ni le dice que no lo haga, por lo que solo se atreve. Unen sus labios en un beso casto, ambos cierran los ojos y se disfrutan nuevamente.

El colmo de un doctor soltero ➸Taekook/VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora