CAPÍTULO 65: Como antes
Al día siguiente, quedo en verme con Ella en un sitio que nos quería enseñar. Un sitio de fiestas más, pero como tenía primero que organizar no sé que cosa del espectáculo que tenía con la compañía en la que Amelia también trabajaba; quedamos en vernos mejor en la noche.
Asique, teníamos hasta la tarde noche libre.
Por lo que hacemos algún plan, que resulta cada uno haciendo algo por libre aquel día. María e Ignacio querían ir a la playa, por lo que se van a solas un poco; Gonzalo se había emborrachado tanto en la fiesta, que solo quería descansar, lo dejamos. Mientras que yo, cansada de tanta fiesta, prefiero el turismo. Marina me acompaña y juntas, buscamos algunos de los sitios más turísticos que podemos visitar. Aunque Marina, teniendo un grado en Filología Griega o como fuera, terminamos buscando ruinas griegas. Aunque, dejad que diga que hacer algo así con alguien que ya sabe del tema, te ahorra mucho dinero en guías turísticos y demás.
Estaríamos fuera todo el día, asique, levantándonos temprano, a eso de las diez, ya nos encontramos de camino hacia las ruinas griegas de la isla:
-Gracias por venir conmigo a hacer algo de turismo...- le agradezco a Marina cuando estamos de camino al primer sitio que visitar- Con Gonzalo creí que iba a ser todo fiesta y estamos ya a miércoles...- respondo cuando me doy cuenta- Mierda, que pronto se va a pasar todo.
-La vida de cada pobre, lo bueno siempre se termina...- Marina bromea- Pero sí, tía. Me gusta eso de estar de fiestas, pero algo para la mente siempre viene bien... Además de meterle alcohol- me río.
-¿A dónde vamos exactamente?
Marina, que se había preparado impresionantemente para todo aquello, saca un mapa de su bolsillo y empieza a señalarme el itinerario que había creado para que pudiéramos ver de todo:
-El primero es una especie de asentamiento de la época de lucha entre la isla de Delos y Mykonos- responde señalando un lugar no muy lejos de allí- Después hay un anfiteatro griego y un altar de ceremonias que se conserva muy bien...
No es que me interesara demasiado esas cosas. Hasta un punto, me llamaba la curiosidad de la vida anterior. La arquitecturas, los dioses y demás; sin embargo, ver como Marina se llenaba de motivación con aquello, la verdad es hacía que mereciera la pena.
El primer sitio es impresionante. Incluso después de más de dos mil años de antigüedad, se mantenía mucho de sus originales pilares y demás. La verdad es que, hasta viéndolos, pienso en que podríamos haber ido a Atenas mejor.
-Esto es impresionante- le digo a Marina una vez allí.
-¿Te gusta?
-Me encanta. La forma en la que está hecho, como se ha mantenido...- respondo, mirándola- Me siento como Helena de Troya...
Marina se ríe:
-Igualita, vamos...
-¿Qué?
-Nada...- bromea riéndose cuando veo que su gesto cambia- Ups...
-¿Qué?- le pregunto.
Aunque es mirarla, seguir la dirección de su mirada, que enseguida sé el por qué de ese "ups": Amelia que, al parecer, estaba también haciendo algo de turismo en la ciudad con su cámara, al verla echar fotos con ellas.
No me podía librar de ella ni allí, ¿qué coño pasaba? ¿Es que tenía que estar siempre encontrándomela?
-¿Nos vamos hacia el anfiteatro?
Es escuchar la sugerencia de Marina que asiento rápidamente:
-Vámonos antes de que nos vea...
Aunque como si fuera una especie de películas de esas malas que ves en la tarde simplemente porque estás aburrido y eres muy perezoso para moverte del sitio, la ves; terminamos chocando con Amelia.
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Donde te lleve el corazón - A Luimelia Fanfic (COMPLETA)
Fanfiction¿Cómo parar lo imparable? ¿Cómo olvidar lo inolvidable? ¿Cómo salvarse de ese hijo rojo que te lleva a tu alma gemela? Simplemente, no puedes y yo lo aprendí de la forma que menos me lo hubiera imaginado. Se dice que el amor es duro, el amor es trág...