Supernatural

Capítulo setenta y seis

Dean salió de la habitación buscando con la mirada a su hermano por la zona, y lo encontró algo alejado, pateando alguna piedra que había en el camino, con las manos en los bolsillos y la cabeza gacha. No pudo evitar sonreír recordando a un Sam de unos 12 o 13 años cuando se quedaba esperando a la salida del instituto en la puerta a que él llegara de estar con alguna chica en los baños para marcharse al motel donde se estuviesen hospedando.

El chico había crecido, eso no lo podía negar, Sam era mas de dos veces aquel chaval escuálido que era en el instituto, pero para él seguía siendo su hermano pequeño, seguía siendo un crio al que proteger. Sabía que Sam odiaba que le tratase así, pero no podía evitarlo.

Con decisión se dirigió a su hermano que nada más verlo a lo lejos comenzó a disculparse por haberle contado todo a la chica.

-Dean lo siento hermano, pero Bella no estaba bien tenía que contárselo y...

Pero fue interrumpido por un fuerte abrazo de su hermano, cosa que le descolocó. Se supone que Dean debía estar furioso, le había prometido que no le contaría nada a Bella y había roto esa promesa, ¿por que le abrazaba ahora?

Y de no ser por lo que había dicho Bella, le habría esperado una buena regañina por parte de su hermano, pero las palabras de la chica diciéndole que su hermano le consideraba su héroe aún retumbaban en la cabeza de Dean haciendo que quisiese aún más a ese gigante con patas que era su hermano. No podía enfadarse con él, no cuando Bella le había dicho eso. El amor que sentía por aquel niñato sabiondo que era su hermano no podía ser mayor. Sam le consideraba su héroe, no podía enfadarse con él.

Sam confundido y algo asustado le devolvió el abrazo a su hermano.

-¿Estas bien? -preguntó el menor una vez se hubieron separado.

-Perfectamente, vamos dentro.

-¿No vas a regañarme por haberle contado a Bella lo que pasó? -volvió a preguntar Sam sin comprender que estaba pasando allí.

-Tenías razón, debí habérselo dicho mucho antes -dijo Dean encaminándose hacía la puerta de la habitación del motel donde Bella los esperaba, seguido de Sam quien aún estaba algo confuso pero no iba a tentar más a la suerte.

-Pero la próxima vez, hazme caso -dijo Dean volviéndose a su hermano antes de abrir la puerta.

-Demasiado estabas tardando, capullo -dijo Sam entre risas.

-Puta -contestó Dean con una sonrisa antes de entrar a la habitación.

...

Habían pasado un par de días desde que Bella descubrió la verdad de lo que pasó cuando estaba hechizada. Habían decidido quedarse un par de días más. Esta era la primera vez en mucho tiempo en que los chicos se tomaban lo que se podría considerar unas largas vacaciones.
No llevaban más de una semana sin trabajar, pero pocas veces habían estado tanto tiempo sin cazar nada.

Sam rebuscaba de vez en cuando algún suceso que pudiese llamar su atención, pero de momento no había aparecido nada que pudiese significar un trabajo para ellos, y estaban disfrutando de aquel descanso que realmente merecían.

Bella y Dean se encontraban tirados en la cama haciéndose arrumacos sin importarles demasiado la presencia del menor de los Winchester sentado en la mesa revisando noticias en su portátil, y a Sam tampoco es que le importase demasiado, estaba ya acostumbrado a las muestras de amor de la pareja en su presencia, mientras mantuviesen la ropa puesta él no tenía problema.