Supernatural

Capítulo cincuenta y tres

Sam iba callado, y ni Bella ni Dean se atrevian a decir nada, sabían que el dejar a Linda era doloroso para el chico, y no querían molestarle con preguntas. Era mejor dejarle un tiempo para él. Sam por su parte, ya estaba buscando el siguiente caso, necesitaba distraerse, no pensar en Linda y la caza sería su mejor distracción.

-Chicos, tenemos que tomar rumbo a Nevada -habló Sam después de un par de horas de viaje.

-Las vegas allá vamos -gritó Dean animado.

-No vamos a las vegas, he descubierto un caso en Carson City, parece cosa de un fantasma.

-Carson City allá vamos -volvió a gritar Dean animado pues daba igual donde quisiese ir Sam, si quería ir a la puta antartida irian solo para ver de nuevo la sonrisa en la cara de su hermano, ahora mismo, Sam mandaba, y si lo que Sam necesitaba era cargarse un estúpido fantasma en Carson City es lo que harían.

...

Después de 6 horas de viaje y con la noche sobre sus cabezas, Dean decidió que debían parar a dormir un poco y aunque Sam se había ofrecido a conducir, el chico estaba igual de cansado que él, el problema era que la próxima ciudad estaba a un par de horas de allí, se encontraban en medio de un espeso bosque con una pequeña carretera que lo cruzaba y Dean no aguantaría dos horas más conduciendo, por lo que esa noche tocaba pasarla en el impala.

En cuanto estacionaron el impala en el arcén de un pequeño camino entre los árboles y los chicos se hubieron acoplado, Sam en los asientos traseros y Dean y Bella en los delanteros, el menor de los Winchester calló dormido a los pocos minutos.

-Mirale, y quería conducir -se quejó Dean terminando su sándwich desde el asiento del copiloto, donde estaba recostado contra la puerta, usando la nevera a modo de mesa, Bella se encontraba en el asiento del conductor, entretenida con el volante de este.

-Está agotado, lo de Linda ha sido un gran palo para él.

-Si... incluso llegué a pensar que saldría bien.

-Y yo... -dijo Bella suspirando.

-Por cierto, me pones mucho al volante -dijo Dean haciendo a Bella sonrojarse.

-Podrías enseñarme a conducir -dijo la chica.

-Claro, en cuanto acabemos este caso -dijo el chico feliz, pues aquello era algo que quería hacer desde hacía tiempo.

-¿Lo dices en serio? ¿Me vas a dejar conducir el impala?

-Nadie ama este coche tanto como yo salvo tu, sé que estará en buenas manos.

Bella no podía estar más feliz, deseaba conducir ese coche desde que le vio, y Dean no se equivocaba, le adoraba.

Pero algo seguía comiéndole la cabeza a Bella, la decisión de Sam de dejar a Linda por miedo a que la pasara algo, aunque luego ella decidió no acompañarlos, pero aquella charla con Sam no dejaba de dar vueltas en su cabeza, tenía miedo que Dean decidiese hacer lo mismo o incluso que se aburriese de ella. Necesitaba cambiar, necesitaba ser fuerte y realmente quería serlo, estaba cansada de que siempre los demás tuviesen que salvarla, ella quería ser su propia salvadora, y que mejor que convertirse en cazadora. Así que después de mucho pensar, decidió sacar el tema, tenía que hablarlo con Dean.

-Oye, y lo de ese fantasma, ¿que sabemos?

-Poca cosa, hasta que no lleguemos allí no lo sabremos.

-Pero ¿como sabéis que es un fantasma?

-En este caso, por que Sam me lo ha dicho, sabes, en otra ocasión investigaría un poco más, pero Sam quiere ir allí y él cree que es nuestro tipo de caso, así que si es lo que quiere, iremos, ahora mismo pienso acceder a todas sus peticiones, el chico no lo está pasando muy bien.