El domingo comenzó con total normalidad para Alissa, pero sabía que no acabaría igual. Tenía en las notas de su celular anotado el horario y la dirección donde se llevaría a cabo la reunión, lo cual le sorprendió que no sea en la agencia. Decidió salir con más tiempo de lo normal para pasar por la ubicación, tomaría el autobús y luego caminaría hasta el café, a pesar del fresco que hacía, no tendría problemas en dar una caminata a esas horas tempranas.
Se echó su cartera al hombro y marchó.
Al bajar del autobús tuvo que caminar sólo cuatro calles para quedar frente a la dirección que le habían indicado y casi se desmalla del sobresalto cuando descubrió que coincidía con nada más y nada menos que el Principal Tower, inaugurado el año anterior. Ese lujoso edificio de cincuenta pisos tenía una fachada acristalada y elementos metálicos en los balcones, el sólo estar parada en la vereda de frente le generaba cierta incomodidad; no quería ni imaginarse entrando en él. ¿Viviría allí, acaso? De ser así era mucho más adinerado de lo que ella había imaginado, aunque también cabía la duda en que sólo se haya puesto ese lugar como punto de encuentro porque utilizarían el restorán o bien podía ser que alguno de los abogados tuviera su oficina allí. Lo único que ahora se le había puesto en la cabeza era el pensamiento de que no podía aparecer sin arreglarse esa noche, y tan sólo le quedaban once horas de las cuales siete se las pasaría trabajando. "Genial, necesito un milagro" pensó mirando su reloj: ocho y dieciocho. Quizás podría pasar por otro lugar antes de entrar a trabajar, sin pensarlo mucho, emprendió camino nuevamente buscando su celular en la cartera. Encontró el número de Susan y le marcó, pero no le respondió lo que le hizo pensar que ya debía de estar en la agencia trabajando o camino a ella y que por eso no le respondería.
Cuando llego a la KKT dudo en entrar y permaneció fuera del edificio unos diez minutos pensándolo bien. Estaban por dar las nueve menos veinte, no podia tardarse más allí sin hacer nada y rogando no perjudicar a Susan, entró para ir hasta la recepción donde estaban las misma chicas de siempre. Las recepcionistas la recordaban perfectamente, todavía se preguntaban entre las tres qué podría hacer esa chica por allí si no era modelo ni editora, ni mensajera ni asistente pero no tenían forma de averiguarlo, ni siquiera Jenna, que se hablaba mucho con Shawty había podido saber algo al respecto.-Emm... Hola, buenos días - comenzó diciendo Ali colocando sus manos sobre el mostrador- No tengo cita ni nada, sólo quería saber si podría hablar con Susan... Bueno, no sé su apellido pero es la asistente de Verónica Chester.
-Lo siento, pero no podemos interrumpirla en horario laboral a menos que tenga cita.
-Pero no tomaría más de cinco segundos, de verdad. Tengo su número pero no me responde, pensé que quizás ya había llegado aquí.
-Sin cita no puede ingresar.
-Mire, no quiero ingresar. Sólo le estoy pidiendo que por favor, le avise que estoy aquí y si ella no puede verme dos segundo, se lo dirá y me voy.
La recepcionista miró por un minuto el rostro suplicante de Ali, pensando en qué hacer al respecto y finalmente asintió a la vez que tomaba el auricular del teléfono para marcar el número de interno a la oficina de Verónica Chester. Susan atendió como siempre al primer sonar.
-Tengo aquí a una joven que la busca a usted Susan, la señorita...
-Alissa Wallows - le susurró Ali con una sonrisa en la cara.
-La señorita Alissa Wallows quiere saber si podría hablar con usted un segundo.
-¿Alissa? ¡Oh, si si por supuesto! - dijo Susan revisando su reloj, siendo domingo era muy poco probable de que apareciera Verónica tan temprano. Si lo hacía, claro, llegaría por allí a eso de las doce del mediodía para evitar el almuerzo en su club con las demás socias o directamente de quedaría descansando en su hogar. - Dígale que suba hasta el noveno.
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SIN NOMBRES (La acompañante) +18
RomansaUna posibilidad única para la persona más importante de su vida, una agencia con algunos secretos bien guardados y un hombre dispuesto a proteger su privacidad al máximo. Alissa decide jugar duro siendo otra persona por completo para así conseguir l...