Capítulo 14

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En cuanto Shinobu leyó tu mensaje, sonrió. Todo lo que había hecho de alguna manera funcionó, incluso se arriesgó, aún sabiendo que sería como un juego de azar.

Regresando al pasado, Shinobu se encuentra caminando por el pasillo, está en busca de su hermana; puesto a que debe de preguntarle algo y entregar los trabajos de sus compañeros. Sin embargo por más que caminaba, no encontraba a su hermana mayor, terminó topándose con Rengoku dando clases, iba a irse; pero un alumno le hizo una pregunta, haciendo que la joven tuviera curiosidad por la respuesta de el mayor. Se paró y recargó en la pared para poder escuchar mejor, no quería que la descubrieran, y para que tampoco cuestionaran porque está parada; tomó los trabajos y los miró, sin poner atención a las letras, sólo se está concentrando en escuchar.

—¿Cómo podemos saber si alguien nos gusta? —preguntó un chico.

—Es una pregunta muy buena —respondió el rubio. —Quizás es probable que quieras apoyar a esa persona en todo, y te sientas extraño a su lado.

—¿Eso aplicaría cuando apenas nos estamos conociendo? Me refiero a... —ahora fue una chica. —Si dejamos de ser amigos y comenzamos a sentir eso, ¿podemos confundirlo con esa comodidad que nos brinda la amistad?

—Tienen dudas muy curiosas. En realidad depende de la persona y la situación, sin embargo, puedo asegurar que se sentirán diferente a su lado, y su alguien más les pone atención a ustedes podrán notarlo. Depende de que tan grandes sean sus sentimientos.

La siguiente pregunta fue suficiente para que la expresión de Shinobu cambiara a una sonrisita.

—¿A usted le gusta alguien? —preguntó alguien más.

Hubo un pequeño lapso de silencio que no decía mucho para ellos, pero para Shinobu fue una respuesta totalmente diferente a la que Kyojuro dio.

—No es así —respondió.

Shinobu volvió a caminar; "ara, ara, sensei..." pensó volviendo a lo suyo.

Tardó en encontrar a su hermana, miró el reloj en su muñeca, y se dio cuenta que las clases terminaron, en nada tocarían la chicharra para avisar. Ella comenzó a caminar devuelta al salón para poder recoger sus cosas, te encontró guardando sus cosas; le causó mucha ternura, te sonrió y fue entonces que te diste cuenta de que ella se encuentra contigo, te asustaste porque en verdad estabas muy concentrada en lo que hacías.

—Muchas gracias, _______-chan —dijo mientras tomaba su mochila.

—¡No es nada! —respondiste. —Tengo que quedarme para la ayuda que me dará Rengoku.

Shinobu recordó sus palabras.

—¿Crees que pueda quedarme contigo?, quiero que vayamos a un lugar después de clases, también deseo ver que tan buenos son mis conocimientos. ~

Las dos rieron.

—¡Por supuesto! Al sensei le encantará, entonces vamos.

Shinobu asintió y caminó siguiéndote.

No hace falta aclarar de las cosas que se dio cuenta ese día, es más que obvio. Desde ese día intentó hacer cualquier tipo de cosas para juntarlos, no como pareja; sino para que convivieran y así ir viendo como se comportaban. No basta con decir que no tuvo que hacer casi nada, Kyojuro hizo el trabajo solo y tú le seguiste el juego como tonta. Shinobu ahora puede estar tranquila y segura de lo que sienten; en realidad no tenía tanta esperanza, Rengoku es alguien que sigue sus ideales y las reglas, así que le sorprendió mucho cuando se dio cuenta de como te veía.

En cuanto a la razón por la cual le gustas, las desconoce; no conoce cual es su tipo, pero nunca antes le había conocido pareja o Kanae nunca le contó nada sobre eso, por ende; nunca pensó que cuando llegara a suceder fuera con una "alumna".

Profesor |Kyojuro Rengoku x lectora|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora