Hola causitas! Perdonen de nuevo por haber tardado tanto en actualizar. Estas dos semanas que se vienen justo estoy entrando a exámenes finales, así que he estado un poco ocupada jijiji. Pero bueno, como siempre, he regresado con este capítulo que espero les guste mucho!
Ya saben que las quiero un montononon, y nos vemos en la próxima actualización <3<3
Actualización: jajajaja me acabo de dar cuenta de que no le había puesto título, lo siento mucho!
º-º-º-º-º-º-º-º-º-º
[Nombre] y Francis desayunaron entre palabras y sonrisas, algunas amistosas, otras un tanto coquetas. Lavaron lo poco que utilizaron; la muchacha sorprendiéndose por la presencia de agua en la casa, pero la ausencia de luz en esta. Y una vez estuvieron ambos alimentados, salieron de la cocina convirtiéndose en el centro de atención de todos los presentes ahí.
Ya el resto de supervivientes se habían despertado, y se encontraban reunidos entre la mesa del comedor y los sillones de la sala conversando el itinerario del día.
—Buenos días— saludó educadamente el japonés haciendo una muy leve reverencia ante el francés y la [nacionalidad].
Ella respondió alegre haciendo un gesto con la mano.
—¿Qué sucede? — preguntó Francis un poco sorprendido por la presencia de absolutamente todos ahí. Y aunque le gustase ser el centro de atención a veces, ahora se sentía un poco intimidado.
—¿Cómo que qué sucede? Ya nos vamos— respondió Alfred haciendo alusión a la conversación que habían tenido en la cocina minutos antes —Ve a preparar tus cosas, salimos en cinco minutos— ordenó cambiando su vista de su familiar a la muchacha. Inconscientemente sus labios se curvaron en una sonrisa al verla.
—¿Ambos grupos? — volvió a hablar el francés refiriéndose a, uno, aquellos que iban en busca de las motocicletas y, dos, quienes buscarían por los alrededores de la casa cosas que pudiesen llevarse que fuesen de utilidad. Y una vez Francis vio como el estadounidense asentía dándole la razón, el de barba se adentró a las habitaciones, probablemente en busca de sus armas.
—Lovino, Iván, Alfred— el suizo llamó a los tres hombres, y ellos lo miraron —Es hora de que nosotros nos vayamos— anunció. Los llamados asintieron y siguieron a Vash hasta marcharse por la puerta del lugar.
[Nombre] los miró desaparecer por la entrada en silencio. Asi que así era como se veía el militar dando órdenes. No lo había pensado antes, pero ahora que lo había visto, Vash podría convertirse en un muy buen líder. Quiero decir, antes, con Ludwig, era él quien anunciaba la toma de decisiones, pero ahora, brillando tan solo él en todo su esplendor, Vash como militar sabía mucho más de organización en catástrofes que cualquiera de los otros presentes. Y a pesar de que la muchachita de shorts negros temió que eso lo fuese a apartar poco a poco de ella, de todas formas no pudo evitar sentirse orgullosa y protegida por seguir a su lado.
Una vez el italiano, el ruso, el estadounidense y el suizo se hubiesen marchado, los demás presentes se miraron entre ellos. A [Nombre] le hubiese gustado decirle "cuídate" a Lovino, pero supuso que había pensado en ello tarde.
—Creo que nosotros también deberíamos marcharnos ya— habló el albino viendo cómo, a la sala, volvía a ingresar Francis con una mochila en la espalda.
—Estoy de acuerdo. Aprovechemos todo lo que podamos del día— añadió el canadiense intercambiando su mirada entre el francés y la bielorrusa.
Los cuatro asintieron y, así, también sin decir mucho más, se marcharon. Primero salieron Gilbert y Francis conversando, siguiéndolos de cerca, bastante serio, se marchó Matthew. Y unos pasos detrás de ellos, dedicándole una última mirada a la [nacionalidad] salió Natalya. Pero esta no atravesó la puerta de salida sin antes haber agitado un walkie talkie en una de sus manos. Como indicándole a la chica recién recuperada de la fiebre que lo llevaría con ella. Y [Nombre] asintió con una pequeña sonrisa en señal de entender.
ESTÁS LEYENDO
Infectados - Hetalia x lectora
FanfictionY de pronto los muertos comenzaron a caminar, dejando a su paso muerte y desgracias. [Nombre] logra escapar del desastre pero, ¿logrará sobrevivir ante tanto caos? Definitivamente, sola no lo podrá hacer. Y así, nuestra protagonista conocerá a much...