Capítulo 42

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Logro llegar a casa, no sé ni como pero llego, vanessa se emborracho muy rápido a penas son las 10 de la noche, no llegue tan tarde, entro a mi habitación en total silencio me quito la ropa y me tiro a la cama a llorar, para sacar todo, los ataques de ansiedad llegan y con ello mis manos se descontrolan, han quedado algúnos morados y aruñones. Me levanto para ir al instituto, si me quedo en casa será peor. Creo que llegó muy temprano, y casi no hay muchos. Subo las escaleras y vuelvo a tropezar y vuelvo a maldecir.

W: de nuevo maldiciendo adelayn.

- ni me hables, ella me mira confundida, y parece que por fin entiende algo.

W: yo lo puedo explicar, ya te enteraste verdad? Dice con evidentes nervios.

-me mentiste.

W: hablemos por favor, escucha mi versión. Dice con tono casi suplicante.

Ella se acerco, y trato de tocarme yo pongo mi mano en señal para que pare. Yo sigo caminando y ella viene detrás de mi, los pasillos están solo, vine muy temprano, su sonido molesto me persigue, paro en seco y me devuelvo la tomo del brazo y la dirijo a su oficina. Ella se deja llevar con facilidad, llegamos a la puerta y ella la abre, la dejo que pase primero yo cierro la puerta y doy seguro.

Me quedo de pie.
- empieza.
W: por dónde quieres que comience?
- por todo, desde el maldito inicio.

W: que quieres que te diga, cuéntame que te dijeron.

-vanessa me contó que yo fui una maldita apuesta entre tú y zulma,  y que aparte fueron amantes.

W: todo es cierto.
-por qué me mentiste? Por qué¡¡
Venable me dijiste que no era un juguete para ti, me hiciste creer que te importaba, digo con mis lágrimas que queman mi rostro.

W: ¡yo no planee esto!!

- que no planeaste? Jugar conmigo, porque a mi parecer todo fui minuciosamente planeado.

W: ¡me enamore! Mierda, grita mientras llora de una manera muy silenciosa. Solo se ven sus lágrimas salir.

- ya no se si creerte, mis ataques de ansiedad empiezan a hacer de las suyas.

Mina se acerca  a mí y me hace sentar.
W: calmate primero por favor.
-cómo queres que este, si la mujer a la que yo amo me mintió.

W: no tenía por qué darte explicaciónes.

- claro de debían darme explicaciones, yo era el blanco de su maldito plan.

W: lo que debería contar ahora es que te amo, pero esto no puede ser...

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