Carter retira dos botellas negras escondidas entre su abdomen y pantalón, bajo la bata que aún lleva es imposible verlo.
Me enseña uno.
—Aquí está tu leche. —Se burla, Carter abre las botellas con la muela, me entrega una y chocamos. —Hasta el fondo.
—Espera... Estoy con medicamento, ¿No habrá un efecto no deseado?
—Las que tomas solo te darán efectos de una borrachera, náuseas y dolor de cabeza, tienes suerte de que la serpiente no era venenosa, va a curar rápido.
—¿Carter?
—¿Mhm?
—¿Sabes algo del piloto? ¿Donde lo tienen?
—Según el Coronel, sigue en la FEME, aún lo interrogan y no, no está herido, tranquila. ¿Es tú novio?
—¿Qué? No, es el novio de mi amiga.
—¿Y qué hacías con él huyendo? —Abre sus ojos, se acerca apresurado con su silla y me observa en espera de una respuesta. —Suelta el chisme, ¿Te gusta el novio de tu amiga? ¿Te fugaste con él?
—¿Eh? Claro que no, se supone que estaba muerto, y ella piensa eso... Nada más, no llevamos una relación, es como mi hermano.
—¿Y está bueno?
—No sé, no me he fijado en eso, pero es lindo y agradable, lo juro. —Bebo un trago de la botella.
El acento británico de Carter resalta con él, es alguien muy atractivo.
—Ay chica, tu vida es demasiado entretenida, ahora estás bajo la mira del Coronel Bogdanov, tal vez no sea mala idea, es decir... No está viejo, pero asegúrate de qué él se cuide.
—Cuéntame de ellos, ¿Que sabes?
—El Coronel es nieto del general, tiene una esposa en Escocia junto a una hija de cinco años, Rhyss fue hecho con mucho amor, tanto que se les acabó cuando nació, el Coronel lo tuvo a los 18 años, ahora él tiene 20 y tiene dos años siendo soldado, pero su abuelo lo nombró Capitán al igual que su padre por el apellido, suele tratarlo mal ya qué la personalidad del Coronel es humillar y denigrar a los demás por su rango.
—Entonces, ¿El Coronel tiene 38 años?
—El siguiente mes los cumple, pero escucha, ¿Recuerdas la mujer que te conté? Capitán intentó ayudarla y el Coronel lo torturó por no seguir sus órdenes; El capitán se negó a mantener relaciones sexuales junto a todo el par de sucios que la violaron, de hecho intentó varias veces que ella escape.
—¿Entonces su hijo lo odia?
—Algo así, pero le mantiene respeto por el trabajo. —Se encoje de hombros, sigue comiendo su pastel, hasta que las puertas se abren.
—Tiene que regresar a su celda, órdenes del Coronel Bogdanov. —Otros soldados entran, Carter hace una mueca de tristeza, los deja entrar.
Me levanto yo misma porque no necesito que lo hagan por mi.
—Puedo sola, gracias. —Murmuro entre dientes, ambos se ponen a cada lado mío, casi temblando me llevan.
Tengo entendido que los soldados son el rango más bajo aquí junto a los reclutas que recién inician con sus entrenamientos.
—Por seguridad debemos ponerle las esposas.
—Si quisiera ser peligrosas ahora, ya estarían tendidos en el suelo desangrándose. ¿De acuerdo?
Mis palabras parecen hacerlos temer, niego con la cabeza, sigo caminando en dirección a la segunda planta.
—¡Capitán! —Uno de ellos casi brinca a mi lado, no me giro, subo cojeando con cuidado de no provocar el dolor en mi pierna. —Estamos llevando a la recluta a la celda como ordenó el Coronel.

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RHYSS. [AKDR #4]. ©
Mystery / ThrillerSage se ve forzada a convivir varios meses con el desquiciado Coronel, este se queda encantado con ella al ser la única mujer entre ellos y la encierra en su batallón militar aislado de todo. Dos meses después, cuando por fin logra escapar, envenena...