—Tienes que irte.
—Primero escúchame, soy incapaz de traicionarte..
—¡Me demostraste con hechos que eres muy capaz! —lo empujo y solo retrocede negando. —¡No puedo confiar en ti, si me ocultas cosas importantes!
Antes de que las lágrimas se escapen logro sacarlo, cierro la puerta con fuerza y apoyo mis palmas en esta.
Evoco los momentos y las palabras que me hicieron confiar en Brandon. Cualquiera que puede mentirme puede traicionarme y no pienso repetir el pasado.
Me urge que acabe el tiempo de riesgo en mi embarazo, si no hago las cosas por mi misma todo se irá por la borda.
La puerta se abre cautelosamente mostrando a Carmen, la enfermera a cargo del cuidado de mi embarazo. Trae gelatina como de costumbre para estas horas.
—¿Está todo en orden? —cierra la puerta detrás de ella y se acerca. —Vi al padre de los bebés irse.
—Tiene asuntos de trabajo. —murmuro recibiendo la gelatina, ella se sienta en la silla a lado de la camilla y me muestra un cuadernillo con muchos nombres.
—¿Te parece buscar nombres para tus bebes? Te ves alterada y eso no es bueno.
—¿Escribiste todos esos nombres? —tomo el cuadernillo con una enorme sonrisa.
—Si, solo tener que ocuparme de su cuidado tengo más tiempo libre y puedo hacer estas cosas.
Hay dos filas con nombres de niños y niñas. Leo los primeros nombres.
Helena | Mike.
—Son los más originales que encontré en internet. —deja ir una risa nerviosa, continuo leyendo los otros nombres.
—Hay algunos que son de mi interés pero preferiría pensarlo cuando sepa el sexo de los tres.
Nos quedamos hablando un largo rato como de costumbre, me comenta sobre los otros embarazos que ha presenciado como enfermera.
Según Carmen, a los 4 meses ya puedo saber que sexo son los trillizos.
No dejo de pensar y me siento culpable, siento que hago no hice bien como para tener que sospechar de todos.
Ella me explica cómo son los partos múltiples, es casi seguro que tenga una cesárea y pueden nacer antes de los 9 meses por ser embarazo múltiple.
Mi único miedo debería ser la cesárea, que son varios cortes para llegar a los bebés pero los miedos que tengo son que no llegue a ese momento.
Evito los comentarios o preguntas acerca de mis ojos, aunque es lo que más quiere preguntarme. Me termino la gelatina en cuanto me explica cómo son los cuidados a los bebés recién nacidos.
Llega la noche y me impaciento en la cama, salgo de esta y me poso frente al ventanal, aparto con los dedos la cortina y observo la ciudad de noche, todo tranquilo.
Durante la noche el sueño no viene a mi, pienso y pienso sin descanso, no estoy con mi equipo pero eso no quiere decir que no pueda armas estrategias aquí.
Al día siguiente desayuno junto a Carmen mi enfermera, me cuenta sobre los tipos de pañales y las posibles alergias en los bebés.
Durante el día y la tarde continuo como todos los días desde que estoy aquí, aprendiendo más sobre ser madre. Para la noche Carmen me trae enormes hojas blancas para elaborar mis planes cuando tenga el ejército completo a mi disposición.
Analizo los puntos importantes, Brandon es inteligente y no sé aún donde pueda estar, sin embargo, si me está buscando tengo eso a mí favor. Debo juntar primero un gran ejército con la ayuda de los chicos, con Niel vamos a conseguir mercenarios de la OMC y crear lo que él sabe, con sus conocimientos podemos crear balas envenenadas para los enemigos.

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RHYSS. [AKDR #4]. ©
Mystery / ThrillerSage se ve forzada a convivir varios meses con el desquiciado Coronel, este se queda encantado con ella al ser la única mujer entre ellos y la encierra en su batallón militar aislado de todo. Dos meses después, cuando por fin logra escapar, envenena...