El Eclipse [A League Of Legends History]

Problemas familiares.

(Capitulo corregido)

Fiora nunca había sido tan amable con alguien.

Bueno, se la pasaba menospreciando a los demás, ya sea por su inteligencia o habilidad al momento de la batalla, así que técnicamente fue muy amable al momento de hablar con Damian.

Ella entrenó muy arduamente para ganarse su título, y pese a ser una noble, nada se le fue regalado como a muchos otros, eso no era honorable en su opinión.

Cuando el mismo rey solicitó su presencia y le ordenó encargarse del entrenamiento de alguien más, estuvo a nada de negarse.

Pero es el rey mismo él le dio la orden, así que desobedecer no era una opción.

Cuando vio por primera vez a aquel muchacho, se interesó un poco, tal vez sea por su aspecto, debe admitir que aquel color de cabello era bastante llamativo, además de raro en lugares que no sean el Freljord, y su físico era también muy bueno, pero esas no eran razones válidas para aceptar entrenarlo (aunque no importaba mucho ya que estaba en la obligación de hacerlo).

Cuando lo vio hacer la prueba, fue cuando su opinión cambió, la agilidad, velocidad y la gran fuerza que demostró tener era algo que no había visto nunca, nisiquiera habiendo entrenado con Garen, era un nivel distinto, esa misma prueba fue echa por ella, y se le dificultó bastante, de echo, al principio no entendía porque el rey había ordenado poner un muro enorme antes de la meta, eso era nuevo, el chico de verdad tenía que rodear o saltar todo eso?

Sus espectativas fueron completamente superadas al momento de ver aquel muro caerse a pedazos, la fuerza del puñetazo provocó una ráfaga de aire que llegó hasta las gradas, vio como aquellos escombros pudieron matar a los soldados de no haberse movido a tiempo, y todo lo había echo en solo 5 minutos, nadie, nisiquiera Garen había podido hacerlo en ese tiempo, el mejor en hacerlo desde siempre fue el anterior mencionado haciéndolo en 6 minutos, tal vez un poco más.

Finalmente él había terminado su demostración, estaba gratamente sorprendida por el desempeño de aquel hombre, pero no podía darse el lujo de mostrar su sorpresa, él se acercó a donde estaban junto con el rey, y no se inclino...

Se cruzó de brazos mirando a lord Jarvan con espectación, casi como si le estuviera diciendo con la mirada "que sigue?"

La verdad, era la primera vez que veía una falta de respeto como esa, pero no le importó, ella sabía por su apariencia física que él no era Demaciano, así que desconocer el trato hacía un rey era técnicamente normal, pero igualmente esperaba que almenos demostrara algo de clase, eran prejuicios que siendo una noble no pudó evitar adoptar, todo siempre tiene que llevar elegancia y clase, incluso en la batalla.

El rey le llamó a ella para presentarme al muchacho como la que sería la encargada de entrenarlo y... Mostrarle Demacia?

De eso no le había hablado, pero no podía decir nada, son órdenes.

Ella pasó y se presentó como lo hace con todos a los que ha conocido, pero por una razón no lo despreció tanto como a los demás, eso porque el se había ganado el reconocimiento de su lado guerrero, la fuerza y la habilidad del chico eran innegables, pero aún faltaba ver cómo se comportaba, como era su personalidad y pensamientos, si de verdad era un guerrero echo y derecho.

Al siguiente día las sorpresas no terminaban, el rey la mandó a llamar junto a todos los consejales y nobles importantes para una reunión, no se les informó la razón de tal cosa, pero nadie cuestionó, solo fueron.

Damian fue oficialmente reconocido con el estatus de noble, cosa la cual sorprendió a todos en la sala y no entendieron al principio el porque el rey haría algo así.