Una luz de esperanza

Capítulo 28

Estábamos todos en la puerta de la ciudad esperando al viejo menos viejo.

Ino y Saku hablaban, Naruto miraba de forma rara a Shika mientras esté se apoyaba en mí para dormir, Neji retó a Lee a que no podía saltar lo mismo que la puerta (probablemente para que no lo moleste), Chōji comía papas mientras veía a Ten Ten dibujar en la tierra con un Kunai.

Somos bastantes ahora que lo pienso...

-¿Tiene que estar ahí? -cuestionó Naruto.

Yo asentí, moverlo al dormir solo hará que se despierte.

Naru actúa muy raro cuando se trata de Shikamaru; ayer lo evitaba al caminar, si salía en la conversación cambiaba el tema y no quiso que nos acompañara en nuestra comida antes de tener que irme, eso sin mencionar cosas como gritar o molestar conforme está dormido.

No se caen mal, no es lo mismo que con Sasuke, parecen llevarse bien, incluso siendo opuestos casi en su totalidad, hasta sus cabelleras, ojos y ropa sin de colores muy contrastantes.

¿Podría ser... Que le gusta? Eso podría explicar muchas cosas, probablemente está celoso de que esté acostado encima mío y se sienta avergonzado de expresarlo cuando lo menciono, al igual que Saku cuando hablábamos del tema que debía declararse.

No te preocupes Naru, te voy a ayudar.

Le hice un gesto para que se acercara, me miró confundido, pero lo hizo con su cara cambiando de tono. Dí en el clavo, está nervioso por estar con Shikamaru.

-¿Te puedes poner a mi lado? -susurré en su oreja para evitar que el de pelo oscuro se despierte.

El de pelo brillante se posicionó tal cual le pedí.

Con la tierra lo movía lentamente mientras me paraba dejando la cabeza de Shika en su hombro. Un placer ayudarte Naru.

Me miró con cara de confusión, yo le levanté el pulgar y me fuí a ver a los demás.

¿Cuánto se puede tardar Jiraiya?

-Ya llegué -hablando del rey.

Lo lamento por Shika y Naru, pero tuvimos que empezar el viaje.

Luego de un tiempo caminando comencé a compadecer a Naru, Jiraiya hablaba de cualquier estupidez, cualquiera que tuviera que ver con mujeres.

Tratando de evitarlo me fuí más adelante con Lee y Neji.

-Hola chicos -les saludé  -¿De qué hablan? Por favor, cualquier cosa menos lo mismo que Jiraiya.

-Estoy muy emocionado por ir a Suna, jamás estuve ahí. También quiero aprovechar para agradecerle a Gaara por ir a ayudarme, también te quiero agradecer a tí -me abrazó.

-No fue nada, aunque al final el sujeto se venció solo de cierta manera -comenté.

-¿Te han dicho que eres peculiar? -¿Qué? -tu flujo de chakra es diferente, tus puntos no están alineados correctamente y en tú cabeza circula más de lo que debería.

-No sé si eso es bueno o malo -le respondí sinceramente.

-Si quieres podrías ir a mi casa luego de la misión, mi tío tiene muchos pergaminos sobre el tema -ofreció.

-Está bien -acepté, o leo pergaminos con Neji o lo tendré que hacer con tía Nade, quiere que lea cada vez más rápido.

-¡Luego podríamos dar 1500 vueltas! -gritó emocionado Lee.

-Acepto -declaré.

-¿Y tú sombrero? -cuestionó el de ojos claros.

-Está en mi mochila, lo usaré cuando veamos a Gaara, pero es más cómodo no traerlo puesto si en el camino debemos pelear, también atrae menos la atención -le expliqué.

Seguimos hablando de cosas triviales hasta que llegamos a Suna.

En la puerta nos esperaba el Kazekage junto a Kankuro.

Gaara me tomó de la mano y comenzó a guiarme, parecía preocupado.

-No son los secuaces, son como tú -fue lo único que dijo.

Espera, ¿La aldea cerca de Suna está causando problemas?

-¡Tn! -escuché gritar a una voz familiar.

La arena se compactó atrapando el pie de Gaara.

Iba a liberarlo, pero alguien me rodeó los brazos por la espalda.

-¡Tn! Hace mucho que no te veo -esta es la voz de Hirashi, solo estuve un rato con él, pero es una voz muy distintiva.

Hirashi es con quién estuve mientras mamá hablaba con su hermano.

-También me alegra verte Hira, pero ¿Podrías soltarme? -aceptó y me bajó.

Liberé al Kazekage.

-¿Qué haces? -le pregunté.

-Eso mismo debería preguntarte a tí -reclamó -¿También eres miembro del Equilibrio Espiritual?

-¡Sí! -respondí rápidamente.

-Bien, entonces sabes que debemos llevarnos a el líder de la aldea para saber dónde ocultan a la serpiente -explicó.

-¿Orochimaru? -cuestionó el Kazekage.

-¡Lo sabe! -exclamó Hirashi antes de volver a atraparlo.

-No lo ocultan, sabe quién es porque también le buscan aquí -traté de razonar.

-¿También es enemigo de aquí? -cuestionó.

-Sí, también trajeron a un grupo de otra tierra para poder encontrarlo -eso no es mentira.

-Genial, podemos trabajar juntos, pero luego tendremos que eliminar a los testigos -declaró sonriente.

-¿Qué? -exclamamos con Gaara.

-Es el procedimiento rutinario, ¿No te hicieron una prueba de eso? Mantener a los humanos y elementales separados cierra la oportunidad de relacionarse y hay un menor riesgo de algún conflicto -explicó de manera simple.

-Cierto, es mi primera vez en campo, a veces se me olvida -le mentí.

-Bien, nos llevaremos a este y a los demás que van a aportar en la búsqueda de la serpiente, al tenerlos en la aldea será más fácil después -llevó al Kague bajo tierra.

-Genial, el resto está en la entrada de la ciudad -cuando tengamos a Orochimaru voy a llevarme a todos rápidamente.

-Okay. Aún no me puedo creer que tía Mika lo lograra -¿Qué? -tus ojos son más brillantes que la última vez y me han seguido cuando me muevo o hablo -me abrazó -¡Recuperaste tu vista!

Cuando soltó el agarre fue por los demás y todos nos dirigimos hacia la ciudad elemental de arena, la cual se llama Kristal ret al parecer.

Al llegar entendí porqué, era bajo tierra y los edificios eran de cuarzo transparente o también conocido como cristal de roca.

-Es muy lindo, ¿Verdad? -me habló Hirashi -voy a dejar a los humanos a la sede, luego puedo mostrarte la ciudad e ir a casa, está claro que te quedarás conmigo.

-Nadie les va a hacer nada a los humanos, ¿Verdad?

-Claro que no, los necesitamos después de todo, aún no sabemos cómo luce la serpiente.