Una luz de esperanza

Temporada 2 capítulo 16

Entramos por una puerta, pero no sé a donde se dirige.

-Hola jefe, ¿Quién es él? -escuché una voz.

-¿Muy aburrido el día? -devolvió con otra pregunta -es Bion, no pudo tener su tatuaje en su aldea y faltan meses antes que vaya otra vez -escuché el sonido de unas llaves o algo así -solo vine a buscar esto, mientras esté en la ciudad me toca hacerme cargo de él.

-¿Te doy un consejo? -asentí nervioso -no te unas al equilibrio espiritual.

-Ya hablamos de esto, si alguien se entera que asustas a los nuevos te van a sancionar -reclamó mi guía.

-Pero es verdad, tanto usted como yo entramos buscando hacer nuestro ciudad un lugar mejor y solo me dejan en las cámaras para castigar a cualquiera que a ellos no les caiga bien -se volvió a quejar.

Es bueno saber que hay personas que no están conformes con este sistema, podría ser de ayuda.

-Lo sé, pero igual no lo puedes andar diciendo así porque sí -volvío a retarle Ninan -¿O quieres que nos castiguen como a los tierra?

-Paso -aseguró -si quieres tener tu tatuaje, hazlo. Pero si quieres ayudar a tu ciudad, no puedes teniéndolo puesto.

-Nos vamos antes que alguien te escuche -volvimos a salir.

Caminamos otro rato hasta entrar a otra habitación.

-Es mi oficina, ponte cómodo -indicó.

¿Cómo quiere que me ponga cómodo si apenas puedo caminar sin chocar?

-Hay un sillón tres pasos hacia atrás, dos a la derecha -avisó.

Le hice caso, pero casi me caigo arriba de este por no prestar suficiente atención.

-Bien, acá está el informe -se escuchó cerrar un cajón -la que te desea la muerte es Miriam Bootsig, ciudad del aire, controla dos elementos, portavoz de la pareja fundadora, pero no hizo la petición a su nombre -me quedé esperando un rato a qué siguiera -eso es todo.

-¿Pero por qué alguien de la aldea del aire me quiere muerto? No tengo ni la menor idea de quién es -me quejé.

-Escucha, es portavoz, quizás su fanatismo le hizo pedirlo a pesar que a la pareja no le importe mucho -declaró fastidiado.

-Entonces, ¿Por qué no lo pidió en su ciudad? -cuestioné ya molesto por las inconsistencias -¿Por qué tú me puedes decir ahora, pero antes no? ¿Por qué alguien quiere matarme cuando ni siquiera sabía de su existencia? -me paré ya desesperado.

-Silencio -declaró imponente -afuera hay toda una organización entrenada para matar, ten el mínimo de compostura como para no estallar un ataque por tus gritos -contó sin alzar la voz, pero muy duro en sus palabras -bien, no te podía decir porque sabía que querrías venir, pude ver tus estrategias y planes, era bastante obvio. Pero ahora te lo estoy diciendo para que te largues de esta ciudad y no me metas a mí o a mi familia más en problemas.

-Lo lamento -me disculpé avergonzado -es solo que... No tiene sentido.

-Lo sé, pero entre mayor es el rango, menos tienen sentido sus acciones. Piensa que yo te dejé vivo cuando pude matarte y dejar mi historial sin errores -suspiró.

-¡¿Está aquí?! -se escuchó la puerta abrirse de golpe por una de las voces de antes.

-Jefe, exigimos una explicación -se acercó otra voz cerrando la puerta.

-Esta no es la sala de tatuajes -interrumpió la tercera.

-Bien, todos en el sofá, calmados -dictó y pude sentir como se sentaban al otro extremo de este -les presento a Tn. Primero les digo que no lo maté porque tiene muchas personas y niños a su cargo y estos dependen de él. Les ha ayudado mucho y ha mejorado las vidas de su aldea.

-Su debilidad -se río la chica.

-¡¿Ellos querían matar a alguien que realmente está haciendo un cambio positivo?! -se quejó una de las voces masculinas.

-Termina de escuchar al jefe -se quejó otro.

-Gracias Zero -bien, debo recordar la voz con el nombre, al parecer conviviremos más de lo esperado -lo segundo es que él ya se iba, solo quería saber quién lo quería muerto.

-Exacto -dije algo molesto -quiero saber de quién se trata y su nombre apenas es algo ¿Cómo sabré si es ella o no?

-Tiene un punto -señaló la voz masculina cuyo nombre no sé -si quieres puedo buscar grabaciones de cuando dejó el encargo, pero no creo que te sirvan mucho.

-No te preocupes, tengo un amigo que me puede ayudar con eso, gracias -sonreí.

-Está bien, te llevarás la cinta -aceptó -y lo último... -retomó el tema -¿Qué hacían todos detrás de la puerta.

-Bueno... Cuando Vija notó que no fue al sitio de tatuajes, sino que a su oficina pensamos que era su amante de otra ciudad -declaró la chica desconcetándome.

-Yo siempre supe que no -aclaró Zero -eran ellos quienes pensaron que sí.

-Alguien de otra ciudad va a mi oficina después que les dije que estaría a mi cargo ¿Y lo primero que piensan es que es mi amante? -sonaba bastante sorprendido.

-En nuestra defensa, y con todo respeto, usted es alguien físicamente agradable, amable, cariñoso, respetuoso, esforzando, protector y en sí la mejor persona en la que podemos pensar -vaya, ojalá alguien pudiera decir eso de mí -como nunca ha contado o ha traído alguna pareja, sinceramente pensamos que era algún romance entre ciudades, pero como ya no se permiten hace unos años...

-Son muy amables, pero sinceramente creo que exageran es su percepción de mí -rió nervioso -Vija, dale a nuestro invitado la cinta para que él y su amigo se puedan ir -ordenó.

-Bien, voy por ella -se escuchó la puerta abrirse y cerrarse.

-¿Cómo son los humanos? -preguntó Zero.

-Son bastante más emocionales -sonó algo decepcionado -pero eso los hace más apasionados y divertidos. Tratan de hacer lo que creen correcto a pesar de que no tengan ninguna posibilidad de lograrlo. Son preocupados por sus compañeros y pueden cambiar gracias a su esfuerzo -conté -siempre hay personas malas, pero eso pasa también entre elementales y no son la mayoría.

-Ahora entiendo porqué el jefe quiso ayudarlos manteniéndote con vida -se rió.

¡Hola!

Espero que se encuentren lo mejor posible y que les hayan gustado los capítulos.

Un pequeño dato curioso de esta historia: Pensé que serían 20 capítulos al inicio con todo lo que está pasando y resultó que escribí 20 antes de publicarla.

¡Nos leemos luego!