All along | Tokyo Revengers (OC x Mikey + Baji + Chifuyu + Koko )

3 | Yoroshiku onegai shimasu

Mitchin y yo llevamos discutiendo un buen rato.

—¿Por qué no puedo ir?

—Ya te lo dije, es peligroso.

—Mikey-kun dijo que...

—Mikey podrá ser el comandante de ToMan, pero tú no eres parte de ella, eres mi nee-chan. No voy a dejar que te pase algo.

—Chi...

—Chifuyu no irá con nosotros —vuelve a interrumpirme—. Solo seremos los de la segunda división. Así que, por favor, Nee-chan, sal al karaoke o algo como las chicas normales.

—No soy una chica normal, Mitchin.

—Deberías intentar serlo.

—El día que dejes de seguir a Draken —digo, cruzándome de brazos. Ambos sabemos que eso nunca va a pasar.

Siempre es lo mismo. Aun cuando estoy aprendiendo a defenderme, a pesar de que Mikey y los demás me aseguraron que podía acompañarlos cuando sea, Mitchin sigue sin querer que vaya cada vez. Sé que le preocupo, pero siento que me cuida más que a Luna y Mana y viniendo de mi hermanito, es un poco molesto.

—Ve al karaoke, Nee-chan —repite—, consigue amistades que no estén entre las mías.

—Baka. —Sonríe.

—Daisuki —dice—. Por eso lo hago.

—Lo sé... ¿Mitchin?

—¿Mm?

—Regresa a salvo.

Él me promete que lo hará depositando un beso en mi coronilla, luego me quedo sola en casa. Luna y Mana están en una pijamada así que no volverán hoy, tampoco Kaa-san. No quiero estar sola aquí por lo que tomo mis cosas y salgo en dirección al condenado karaoke. A mitad del camino ya, muy oportunamente me encuentro con la hermana de mi mejor amigo.

—¡Oiii, Emma! ~ —saludo, moviendo mi brazo ceremoniosamente de un lado a otro.

—¿Ah? ¿Nee-chan? —La envuelvo en un abrazo.

—¿Quieres ir conmigo al karaoke? Mitchin no quiso llevarme con él. —No dice que sí, pero tampoco dice que no. Entrelazo nuestros brazos y sigo caminando—. Sigue diciéndome que es peligroso y debería dejar de ir con ellos incluso cuando ya demostré que puedo defenderme al menos un poco. Parece mi nii-chan, en vez de que sea al revés.

—Entiendo. Ayer Mikey volvió a decirme que no debo entrometerme con ToMan solo por pasar tiempo con Draken. —Río.

—Emma-chan está muy enamorada~.

Nuestra dinámica prosigue así durante todo el tiempo que permanecemos juntas. Yo saco un tema al azar, platicamos un poco y casi siempre discernimos en algo. Supongo que es normal dado a nuestra diferencia de edad que es de tres años. De no ser por nuestros hermanos, quizá nunca coincidiríamos del todo. Mas henos aquí, con ella siendo la única chica que tengo de amiga.

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Pasamos en el karaoke un buen rato antes de salir, ya con la garganta totalmente cansada, pero contentas. Emma está contándome una anécdota con Draken cuando escucho algo que llama mi atención: Estoy segura que hay alguien intimidando a un menor, de nuevo, doblando la esquina frente a nosotras.

Odio a los tontos que intimidan a sus subordinados. No tienen el valor suficiente para meterse con alguien de su tamaño.

—¿Escuchaste eso? —Le pregunto a la chica. Ella se detiene y se concentra. Hay un muchachito y al menos tres tipos más.