All along | Tokyo Revengers (OC x Mikey + Baji + Chifuyu + Koko )

8 | Festival

Mi peinado está deshecho, mi nueva yukata empapada y mis pies llenos de lodo. Debí cambiarme por el uniforme de ToMan, pero estaba tan ansiosa que ni siquiera lo pensé en el momento. Lo único que quería era ir y ayudar en lo que pudiera. Chifuyu no quería llevarme con él, pero al final lo convencí argumentando que era lo menos que podía hacer después de dejarme plantada. Ahora, mientras nos acercamos a nuestro destino, mi corazón late demasiado rápido.

Toda la fuerza ToMan viene con nosotros. A pesar de haber tenido un conflicto interno recientemente, la pandilla se ha vuelto a unir para pelear contra Moebius esta noche. Sé que no necesitarán mi ayuda para terminar con ellos, mi objetivo es otro. Solo quiero sacar a Draken de ahí antes de que ocurra algo peor.

Hablé con Emma hace unos minutos. En su voz se escuchaba el miedo que tenía por él. No me imagino lo que debió sentir al ver cómo lo atacaron por sorpresa. Y la impotencia al saber que no pudo ayudarlo. Espero que yo pueda hacerlo. Incluso sabiendo que ya no estará solo, tengo un mal presentimiento. Llámenme loca por tomármelo tan en serio, pero realmente no puedo evitarlo.

Al llegar, veo un centenar de oponentes. Peyan está con ellos, cosa que me inquieta más. Aun cuando Chifuyu me contó todo, hay algo que no encaja. Ni en mil años puedo imaginarme a Peh tramando algo tan bajo como lo que intentaban. Y al ver a Draken sangrando me doy cuenta de que no se retractó.

—¿Qué esperas? —le digo a Chifuyu, ya que no parece querer bajarse de la moto y tampoco puedo hacerlo yo.

—Rina-san, si Mikey-kun se entera de que te traje... Que sé que estás aquí y no estoy contigo...

—¡Eso no tiene importancia ahora! —expreso—. ¿Crees que Mikey esté pensando en eso cuando uno de los nuestros conspiró para atacar a su mano derecha? Olvídate de tonterías y ve a patear el culo de esos imbéciles. —Se queda mirándome—. ¡Ahora!

Por fin reacciona, mas no siguiendo mis órdenes. No, hace otra cosa completamente fuera de lugar para la situación: Me besa. Jala de mi cuello para juntar nuestros labios con fuerza. La sorpresa me hace abrir los ojos, por lo que puedo ver los suyos bien cerrados con las gotas de lluvia juntándose entre sus pestañas. Al soltarme, me mira y solo dice:

—Mantente a salvo.

Se va después de eso, dejándome atónita e inmóvil por un rato más largo de lo que es bueno. Mis labios aún sienten los suyos, mi cuello la fría temperatura de sus dedos después de andar tanto tiempo en la lluvia. Mi mente elimina todo lo demás para quedarse solo con eso.

Fue mi primer beso.

Lo que me hace regresar a la realidad es el sonido de la pelea comenzando. Me distraje demasiado. No sé dónde está Draken y ver tanta gente no me permite encontrarlo rápidamente, mucho menos desde mi posición. Bajo por fin de la moto y me acerco rodeando todo el tumulto. Necesito encontrar un lugar que me permita ver dónde está, cosa que no es fácil cuando soy tan bajita. Ni siquiera los centímetros extra que las getas me regalan me alcanzan. Hay demasiadas personas y la lluvia hace todo peor.

En algún lugar, escucho a Mikey gritarle a Peyan. Localizar su dirección es fácil gracias a eso, pero no puedo verlo. Una enana no puede ver a otro enano en medio de tantos gigantes. Vuelvo a mi tarea. Busco lo mejor que puedo, reacomodando mi posición cada que veo que la actual deja de servirme. Siento que es como encontrar una aguja en un pajar. Estoy tardando, tal vez demasiado. Mi corazón comienza a palpitar a un ritmo acelerado. Comienzo a desesperarme, mi respiración se agita. Puede que algo malo esté pasando justo en estos momentos y yo sigo sin encontrar a Draken.

¿Dónde? ¿Dónde? ¿¡Dónde mierda puede estar?!

Escucho a Takemitchi gritar. Grita el nombre su nombre De una forma tan desgarradora que probablemente lo escucharan más allá de este lugar. Lo busco rápidamente. Está más lejos de lo que he abarcado. Me acerco corriendo para ver con mis propios ojos lo que comienza a informarle a Mikey: Draken fue apuñalado. Está en el piso. Un charco de sangre alrededor.