All along | Tokyo Revengers (OC x Mikey + Baji + Chifuyu + Koko )

45 | Soledad

Narradora omnipresente

El chico avanza hasta el centro del lugar llamando la atención de los presentes poco a poco. Manjiro Sano está aquí con la cabeza en alto.

—¡¿Me están jodiendo?! ¿Cómo es que no está en el hospital? —dice Koko—. En estos momentos en que su hermanita... en que Rii-chan... ¿No debería estar desesperado? ¡No hay manera de que quiera estar aquí! —Ni siquiera él querría; y quien fue atacado por dos frentes ahora se presenta.

Mikey llega hasta donde Kisaki e Izana, pero no se detiene. Continúa caminando, pidiendo que lo dejen hablar con Takemitchi por un momento. Él lo mira, sus ojos queriendo llorar al darse cuenta que de verdad vino.

—Arigato, Takemitchi —le dice, abrazándolo.

—Mikey-kun... —Sus lágrimas empiezan a derramarse—. Demo ¿doushite...? No estabas exactamente en un buen estado mental para venir aquí. —Otro par de motos se escucha. Ambos voltean para ver a los recién llegados—. ¿¡Draken-kun?! ¡¿Baji-kun!? ¿¡Por qué todos están aquí?! —La respuesta le llega de sorpresa al ver que el primero trae consigo a Hina.

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Tiempo antes en el hospital, Hina seguía pensando en Takemitchi y lo que dijo. Quería ayudarlo de alguna forma y no encontró otra además de acercarse a los chicos, pidiendo hablar con Mikey un minuto. Él, por supuesto, seguía ensimismado sin responder a nada ni nadie, pero ella se armó de valor y habló de todas formas.

—Takemichi-kun... Él pensó que podía salvar a Emma-chan y Rina-chan. —Baji al escucharla, levantó la cabeza. Molesto, Draken se dirigió a ella.

—¡Oi! ¡No menciones ese puto tema ahora! —le gritó—. ¿¡Qué pasa contigo?! —Su tono la hizo temblar—. ¿Esto es gracioso? Takemitchi y ahora Hina-chan también... ¿Qué estás diciendo en un momento como este? —farfulla entre dientes—. Ya... Cállate, por favor. —Ella hizo lo contrario.

—No son solo ellas dos. Hay demasiadas personas que Takemichi-kun dice que tiene que salvar.

—¿¡Entonces?! ¡¿De qué...?!

—Yo morí —soltó ella, desencajando tanto a quien hablaba como al que miraba—. Moriré en doce años. —Con esto, incluso Mikey comenzó a volver a la realidad—. Takemichi-kun vino aquí del futuro para evitar que eso pasara. Suena como una mentira, lo sé. Demo, es verdad. Rina-chan podría confirmarlo si despertara... Takemichi-kun está desesperado. Él conoce todos sus futuros. Quiere ayudar a todos—. La verdad golpeó a Mikey de repente, haciéndolo recordar todos esos momentos en que Takemitchi lucía desesperado porque las cosas no continuaran de la forma en que lo estaban haciendo. El cambio súbito que hubo en Rina cuando dejó de hacerle caso y comenzó a meterse en las peleas que le prohibía enfrentar. Todas esas cosas sin sentido que se ponían de acuerdo para hacer. Sus esfuerzos y sus lágrimas, todo tenía respuesta ahora—. Pero yo no soy como Rina-chan. Yo no puedo... hacer nada para ayudarlo —terminó Hina, llorando mucho.

Así fue como Mikey levantó la cabeza y decidió venir. Sus dos mejores amigos siguiéndole el paso. Ahora, delante de Takemitchi, Hina vuelve a tener lágrimas en los ojos.

—Gomenne, Takemichi-kun —le dice—. Yo también vine.

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Takemitchi reacciona escandalosamente cuando escucha lo que Hina hizo.

—Gomen. Solo se me salió —dice ella nerviosamente.