Capítulo 94

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NOVENTA Y CUATRO

NOVENTA Y CUATRO

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Narra Hannah.

Una noche, después de los entrenamientos. Todos se encaminaron a sus casas agotados. Hermione y Ron se fueron mientras discutían sobro la clase encantamientos, mientras que Harry  y yo guardábamos las cosas.

-Para la próxima clase quiero que estés más temprano, así podremos planear el próximo hechizo- dijo Harry guardando los cojines.

- ¿Estás seguro de que quieres ayuda? - miré a Harry - Eres bueno con los hechizos.

- Si, pero... tu tienes más elegancia al hacer los movimientos.

-Y tu eres muy ordinario con... - auch - me quejé al sentir un almohadazo en mi espalda - ¡Oye! -Le lancé otro cojín el cual le cayó en toda la cara haciendo que sus se cayeran.

Harry tomó su varita y con lo poco que podía ver a punto a hacia a mi.

-¡Rictusempra! - pronunció Harry en alto 

-¡Noooo! -grite, comenzando correr, tratando de esquivar el hechizo. El chorro de luz que salió de la varita de Harry chocó contra el espejo, quebrándolo -. No me sorprende. Siempre rompiendo cosas - dije sarcástica. 

 -Yo no fui quien rompió el carro de madera de nuestro primo lanzándolo por las escaleras... - dijo Harry lanzándome un cojín.

-Apuntaba... a su cara -  le tiré un cojín que cayó en su frente - Pero no le di.

-Como cuando le pusiste trampas para ratones en el piso de su habitación...

-... y le apretaron los dedos de los pies por treinta minutos...

Narrador.

El martes, Hannah, Harry, Ron y Hermione, muy atribulados, se encaminaron hacia la cabaña de Hagrid a la hora de Cuidado de Criaturas Mágicas, bien abrigados para protegerse del frío. Hannah estaba preocupada no sólo por lo que a Hagrid se le habría ocurrido enseñarles, sino también por cómo se comportaría el resto de la clase, y en particular Draco y sus amigotes, si los observaba la profesora Umbridge.

-¡Hoy vamos a trabajar aquí! -anunció alegremente a los alumnos que se le acercaban, señalando con la cabeza los oscuros árboles que tenía a su espalda-. ¡Estaremos un poco más resguardados! Además, ellos prefieren la oscuridad.

-¿Quién prefiere la oscuridad? -preguntó Malfoy ásperamente a Crabbe y a Goyle con un deje de pánico en la voz-. ¿Quién ha dicho que prefiere la oscuridad? ¿Vosotros lo habéis oído?

Hannah recordó la única ocasión en que Malfoy había entrado en el bosque; aquella vez tampoco demostró mucha valentía. Sonrió; después del partido de quidditch, a Hannah le parecía magnífica cualquier cosa que produjera malestar a Malfoy.

Mi patronus ¿Una Potter? Parte I -Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora