Lo bonito de tus ojos (Segunda temporada) [YOONMIN]

Capítulo 45

Una vez que aquel avión llego a Seul Jimin sintió de nuevo el vacío del desosiego instaurándosele en el pecho, habían sido buenos días fuera de esas tierra y alejado del martirio que Youngsoo y Daegu le habían generado toda su vida, pero lo comprendía, no podía simplemente desaparecer y aunque se sentía muy valiente en ese momento, seguía siendo un pequeño aterrado en el interior.

— ¿Por qué es de noche, pero no tengo sueño?—. La pequeña Yeji había estado hablando en todo momento mientras simplemente intentaban bajar del avión, Jimin había estado muy inmerso en sus pensamientos como para notarlo hasta que la realidad le atrapo y le trajo de vuelta.

— Comeremos algo e iremos a la cama—. Yoongi, quien llevaba a la niña en brazos hablo y Jimin solo sonrió un poco.

En el pasado no había tenido tales deseos de tener una familia, su mente no funcionaba adecuadamente, pues su lobo era el único con capacidad racional madura, pero muy aterrado y asustado como para buscar un alfa que le había rechazado, pero ahora, con los años encima y lo difícil de mantener la relación y no por falta de afecto, o problemas entre ambos, estaba muy empeñado en lograr la tan anhelada felicidad que se empeñaban por quitarle.

— Luces aterrado—. Bien, Yoongi y Yeji se había adelantado tan solo un poco a causa de que Jimin había reducido la velocidad de sus pasos, por lo mismo Jungkook le alcanzo.

— No lo sé, siento que ese hombre puede aparecer aquí—. Dijo Jimin y Jungkook solo le miro con un poco de pesar.

En el pasado y a pesar de que el tiempo que compartieron Cheol, Jimin y Jungkook había sido tan poco ya que uno de los mayores falto en algún punto, Jungkook podía recordar claramente como Cheol mencionaba que Jimin era muy perspicaz, que su lobo y su mismo ser parecían tener ese instinto de que algo malo pasaría y ese algo sucedía siempre.

No, Youngsoo no iba hacer nada en ese aeropuerto a pesar de que si estaba allí y es que bueno, tenía una cita por cumplir, una con el más joven de los Park.

Cuando terminaron todo y pudieron dejar el aeropuerto el viaje fue corto, incluso Jungkook desapareció más tiempo en el baño que lo que tardo el auto en llegar a la gran mansión alfa, en donde era evidente que había un tipo de celebración y si, a excepción de Jungkook nadie lo sabía.

— ¿Qué es todo esto?—. Pregunto Jimin al observa lujosos autos estacionados y gente con prendas elegantes pero un tanto casuales en el jardín.

— Se me olvido decir que nuestro tío Chansoo dijo que quería hacernos una fiesta, muy ridículo—. Comento Jungkook. — Me esconderé en mi habitación, vamos Yugyeom—. Dijo para tomar la muñeca de su ahora esposo y realmente ir hacer lo dicho.

— ¿Podemos también?—. Pregunto Jimin a Yoongi.

— Igual no va a funcionar, les irán a buscar, eso harán con su hermano—. Minki hablo teniendo total verdad en sus palabras, porque si, fue lo que sucedió y unos 10 minutos después todos estaban en el gran jardín en compañía de Chansoo, sonriendo y hablando con personas a quien Jimin poco le interesaba.

No es que fuese molesto a Jimin el actuar de su tío, Chansoo lucía muy feliz de que estuviesen de regreso aunque no habían sido muchos días fuera, pero a decir verdad incluso para el pueblo era tan difícil comprender como Chansoo, un líder duro y serio podía mostrarse muy afectivo con sus sobrinos, aun así les gustaba esa parte del hombre, pues mostraba un lado paternal que el pueblo ya estaba resignado a no tener de su líder, pues a su edad nunca había tenido algún tipo de relación con compromiso de peso que les asegurara un futuro alfa gobernante.

— Ven si quieres te ayudo con Yeji—. Le dicho Chansoo y es que Jimin la tenía en brazos, era una niña grande, si y esta lo sabía, pero había nacido con el don de decir.