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Hinata sonrió ladinamente.

-Es probable que el príncipe heredero escoja a la santa como su esposa. Y, siendo así, mi padre no debería excederse.

-Su majestad la emperatriz no te dejará ir fácilmente, además, las familias que apoyan al clero así como a la emperatriz insistirán en convertirte en concubina.

La chica frunció el ceño.

-Si el príncipe heredero se niega, al igual que yo, no importa cuántas insistencia den las facciones, no pueden hacer eso a menos que una de ambas partes conscienta el compromiso.

-La emperatriz encontrará la manera de obligarlo.

-Padre, ¿Por qué acepto este compromiso en primer lugar?

Hiashi suspiró, nunca habría creído que tendría que dar respuesta a ese cuestionamiento.

-Hay muchos factores que me llevaron a dar tu mano al príncipe heredero.

Silencio.

-Supongo que has escuchado los rumores sobre el quiebre de lazos entre la realeza y fuerza militar.

-Es solo un rumor, padre.

-Es así, sin embargo, debido a la fuerza de los Uchiha, los civiles asustados comenzaron a crear rumores sobre un golpe de estado, y el miedo se esparció con el pasar del tiempo, hasta que eventualmente los Uchiha comenzaron a ser agredidos. Y, una vez que la ira de los Uchiha no se pudo contener, los rumores se hicieron realidad dejando a Folim en cenizas.

-Lo sé, fue así que Folium se dividió en dos imperios; Ignis, el cual fue ya un imperio, y Tonitrua, el cual se volvió un imperio gracias a los numerosos Uchiha.

-Durante la guerra, los Hyuga tuvimos un rol muy importante gracias a los cristales luz de luna y al marqués a cargo, sin embargo, cuando está termino, la realeza comenzó a vigilar a la familia Hyuga, acción que empeoró cuando la casa Wistash intentó comercializar con dichos objetos. Esto quebró la confianza entre ambos bandos.

¿El marqués de Wistash? Ese nombre, estaba segura de haberlo oído de algún lado.

-Asi que el emperador planeo la unión de ambas familias para contener los rumores sobre una segunda guerra interna, está vez, teniendo a nuestro clan como protagonistas; Su majestad tenía miedo de repetir la historia, así decidió darte un lugar en la realeza. Y yo, quien pude negarme a dicha petición, ciegamente acepte creyendo que la corona defendería tu dignidad.

-No es culpa de mi padre lo que la opinión pública causa en los jefes militares y miembros de la realeza.

-Eso lo sé. Sin embargo, al convertirte en concubina, es decir... -Se corrigió- en reina inferior, asegura a la princesa Hyuga conteniendo los rumores y, al mismo tiempo, mantiene el Tensseiga bajo control, si lo piensas bien, es la coartada perfecta.

-Si este matrimonio tiene tanto beneficio... ¿Por qué el emperador acepto la oposición?

Hiashi negó con la cabeza

-No lo sé. Sólo el dios Lux sabe lo que su majestad piensa.

-Padre, ¿Deberíamos prepararnos para la opinión del consejo?

-Si, la sala será estruendosa. -El Hyuga ofreció el brazo a su hija, la cual lo tomo delicadamente y juntos caminaron hacia el lugar donde el rey y la reina se encaminaban.

El guardia de la sala principal se inclino y seguido de ello cerró las grandes puertas. Hinata miro a los lados buscando inútilmente a su escolta, el cual parecía haber vuelto a casa de mal humor.

ɢᴜᴇʀʀᴀ ᴅᴇ ғᴀᴄᴄɪᴏɴᴇs [SasuHina]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora