Capítulo XI
Raro
—¿No te parece extraña la forma en la que mi mamá salió a medianoche con Moon y me dejó a dormir aquí contigo?
—Ella te dijo que era una emergencia, ¿No? —Le recordó Taehyung volviendo a lanzarle la pelota—. Que Moon se había presentado y necesita llevarla con un Alfa y ya que nuestros padres no están en casa, tu madre pensó que buscar a un familiar sería mejor que llevarla con el gran consejo.
—Pues sí, pero eso es aún más extraño, dijo que la iba a llevar con la tía Bulyoung ya que ella era Alfa. ¡Y Nosotros no hablamos con la tía Bul porque está loca! Así que no entiendo porque mamá fue con ella. —Jungkook hizo una mueca al recordar a su molesta tía y agitó su cabeza mientras le aventaba la pelota a su amigo con más fuerza.
Taehyung logró atraparla con dificultad y se quedó mirando apenado al menor. Él entendía muy bien la intranquilidad que sentía Jungkook por los acontecimientos de la noche anterior, él mismo se sentía culpable de haber provocado la presentación de Moon pero no podía decírselo.
Jungkook lo mataría por eso.
—Ya que, no pienses más en eso. —Le respondió en voz baja, queriendo cambiar de tema. Hablar de eso solo le causaba ansiedad.
El menor suspiró y siguió jugando en silencio inconforme. Es que por más que intentaba buscar una explicación en su cabeza, no la hallaba. No veía razón lógica del porque su madre había salido repentinamente de la manada con su hermana para ir a ver a una familiar con la que no tenían contacto desde hace años.
¡Y tampoco entendía por qué lo habían dejado a él!
Aunque no le agradara su tía sería capaz de soportarla solo por el bien de Moon.
Observó al pelinegro frente a él y bufó irritado al verlo jugar tan distraído. Por alguna razón todos parecían actuar extraños esa mañana. Primero su madre, luego la señora Kim y ahora Taehyung que tenía cara de no haber dormido bien la noche anterior, y cuando el castaño le preguntó que le ocurría, su amigo solo le dió la vaga excusa de que se había quedado jugando videojuegos toda la noche.
Miente.
Lo sé...
A Jungkook le gustaba la facilidad que tenía Ji para detectar este tipo de cosas. Su lobo era uno muy sabio e intuitivo, todo lo contrario a él que se consideraba un niño muy activo y nada paciente. A pesar de sus diferencias, ellos eran el mejor equipo y por eso no les fue difícil ver através de la mentira de su amigo.
Cuando Taehyung decía mentiras, siempre hacía cierta manía que lo delataba. Al mentir, el pelinegro desviaba la vista por un par de segundos y relamía sus labios al finalizar la mentira. Era muy mínimo, apenas detectable pero imposible que pasara desapercibido por alguien que lo conocía de toda la vida.
—Jungkook. —llamó su atención Taehyung—. ¿Qué crees que sea Moon?
El niño de doce se quedó un momento mirando al cielo y luego negó.
—Oh pues, no lo sé. —El menor respondió sinceramente. —. Mi hermana nunca ha mostrado ningún signo de su jerarquía antes. Tal vez sea Beta—. Se terminó encogiendo de hombros, sin darse cuenta de que su amigo lo miraba espantado.
—¿Be-Beta? —tartamudeó. Taehyung se aclaró la garganta y fingió responder con desinterés—. No creo que Moon sea una Beta, los Betas ya casi no se presentan hoy en día. En nuestra manada casi no los hay.
—¿O Alfa? — Mencionó Jungkook asintiendo, esa idea le agradaba y se adecuaba más al perfil de su hermana—. Moon es una chica alta para su edad y aunque no es muy rápida sí que es fuerte. ¿Recuerdas el moretón en mi ojo que lleve a la escuela hace unas semanas? Me lo hizo ella cuando le escondí una de sus muñecas.

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𝑷𝒔𝒆𝒖𝒅𝒐-𝑨𝒍𝒑𝒉𝒂 | ᴷᵀᴴ
Fiksyen Peminat•[Falso-Alfa]• Las cosas hubieran sido más sencillas para Taehyung sí su pareja destinada fuera una Omega, pero lastimosamente las cosas no fueron así. Al igual que para Moon todo hubiera sido más fácil sí tan solo su pareja destinada la amara y ace...