SOMOS CERCANOS

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ADVERTENCIA

Este capitulo contiene algunas escenas para 18+, así, que si no es de tu agrado, favor de no leer, pero si no, disfruta del siguiente capitulo, favor de dejarme una estrellita si le gusto, no pasen de largo.

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AL DIA SIGUIENTE

El asunto de la noche anterior, ya casi se había olvida... Bueno, Lyam aún estaba molesto y no había dado señales de vida, pero optaron en no ir a buscarlo, tenía que hacerse cargo de sus actos, y una era, que tenia que regresar por voluntad propia y reconocer lo que había hecho.

Mientras tanto entre los clanes, ya empezaba hacer los preparativos para el festival que se iba a realizar dentro de siete días, todos trabajando por igual para que les quedara bien, Lunala no era buena para ese tipo de cosas, pero trataba, y trataban de integrarla para que pudiera divertirse aun sea un poco, pero ella no se encontraba de humor, ya que hace unos días se sentía rara, empezó a notarse algo acalorada y desesperada.

No recuerda haberle pasado nunca, pero habita notado que era una constante los últimos días, y lo sentía más, cuando se encontraba cerca de Gloxinia, uno de los principales síntomas, por así decirlo, era que sentía demasiado fuerte su esencia, hasta sentir el sabor en su boca, haciéndola degustarlo en su paladar, no era que le desagradara o le diera asco, al contrario, era algo que le gustaba, pero se cuestionaba el porque lo sentía, y si lo solo sentía ella.

De vez en cando, miraba disimuladamente a los que interactuaban de cerca con Gloxinia para ver sus reacciones, pero lo hacían como si no estuviera pasando nada.

También empezó a sentir otra factor que no recuerda nunca haberlo sentido jamás, y era cuando Gloxinia se le acercaba o incluso llegaban a tener algún roce no intencional de piel con el, se estremecía y se sentía como papayita tierna, su cuerpo reaccionaba de una manera bastante inusual, al grado de sentir un cosquilleo agradable en su entrepierna haciéndola humedecer sus bragas.

Este incidente había sucedido hace un par de de horas, se encontraban en la parte medio del Gran Árbol Sagrado, donde el pelirrojo le estaba dando algunas técnicas de respiración y relajación para que pudiera utilizarla para cuando se llegara a salir de control y no explotara su poder.

Gloxinia: Tienes que inhalar por la nariz y exhalar por la boca - Indicaba sentados con las piernas cruzadas frente a frente en un grueso y frondoso tronco, la albina trataba de imitar sus movimientos, pero eran demasiados exagerados, movía demasiados los hombros - No, no, no, es más tranquilo, más despacio.

Con sus delgadas manos, toco los brazos desnudos y níveos de la albina, esa simple acción hizo que el cuerpo de Lunala reaccionara tensándose en el momento, sintió que todo su cuerpo se estremecía, empezó a sentir un cosquilleo de excitación, aunque no sabía interpretarlo con tal, sus bragas empezaron a humedecerse rápidamente.

Pozo su vista en el rostro de Gloxinia y este parecía concentrado en algo sin verla, como perturbado, sintió su agarre más fuerte, aun seguía sujetada de el, pudo ver como el trato de pasar saliva por su garganta con dificultad - D-disculpe su majestad - Hablo tratando de que no se le notara los nervios - Le pido permiso de retirarme - Pidió con apuro, el solo se limitó a contestar con la cabeza en aprobación, aun sin verla.

Al retirarse, espero unos momentos, hasta ya no sentir su presencia, para dar un largo y lastimero suspiro - Huf, por poco, lo pudo haber notado - Pensó al mismo tiempo que se tocaba su entrepierna, siendo aquella dura y palpitante tortuosa erección.

Los días en las que se acercaban las fechas de emparejamiento, era bastante difícil para algunos, y por primera vez, Gloxinia pasaba por aquel proceso, y aunque era un caso raro y excepcional, Lunala también lo sentía y afectaba.

TU FRIO CORAZON (TOMO UNO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora