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La noche continuó con normalidad. 

Las baladas llegaron a su fin y comenzó una música más movida. 

María salió a bailar con Carlota. Leo no le despegaba un ojo y permaneció cerca suya siempre. 

Franco y Nicolai se unieron a ellos. 

María daba vueltas riendo con su amiga que ya iba algo pasada de copas. 

Carlota obligó a bailar con ellas a Nicolai, gesto que molestó un poco a Franco porque no estaba seguro de si el vampiro quería realmente. 

Los dos hermanos se quedaron callados y serios, pendientes de sus acompañantes. Se respiraba cierta tensión y rencor entre los dos. Seguían sin hablarse. 

Carlota, María y Nicolai bailaban al son de la música. Carlota como loca, María procurando que no le pasara nada y Nicolai de igual modo pero con las dos. 

Se lo estaban pasando bien. 

- dónde está César - preguntó María. 

- ni idea, me puse a bailar con un chico y se fue enfadado 

- ¿César? 

Ella se encogió de hombros sin dejar de bailar. 

- él sabrá, está un poco... 

- ¿pegado? - respondió por ella el vampiro que echó un ojo a Franco. 

- sí, eso es

Siguieron bailando, María buscó en el ambiente a su padre, lo divisó, pero en ese mismo instante, se le heló la sangre porque al lado de su padre estaba la misma demonio de la otra vez. La que le hechizó. 

La reconoció perfectamente y ahora, ese monstruo estaba al lado de su padre indefenso y a punto de tocarle.

Extendió su brazo boquiabierta con expresión de terror. 

Leo sintió su pánico al momento y en un instante estaba con ella. 

La mano del demonio estaba a punto de tocar al anciano cuando otra la agarró de la muñeca deteniéndola con fuerza. 

Era César con cara de querer matarla. 

- acompáñeme señorita - fingió cortesía para no alarmar a los testigos ni a Nono. - discúlpame un momento Nono - sonrió al anciano - ve con María y los demás. - el anciano le escuchó.

La demonio se resistió, pero entonces César intensificó su agarre y se acercó a su oreja. 

- shiancatero - susurró en su idioma original con voz amenazante y terrorífica. 

La demonio se quedó pálida y cedió. Se fueron a otro sitio.

Leo al tanto de la situación, miró a Franco. 

-  no te separes de ellos en ningún momento, iros a casa - ordenó deprisa y fue con César. Franco asintió

María alcanzó a su padre y lo abrazó asustada. 

- ¿querida? 

- papá... - dijo ella temblorosa. 

 El segundo de los hermanos miró a Nicolai que empezó a ir tras Leo.

- Nicolai... - le llamó Franco. 

- debo ir, me reuniré con vosotros luego - dijo serio y se fue con Leo. 

Franco le miró irse y después reaccionó y escoltó a los humanos. 

- qué ocurre María... - preguntó Carlota extrañada por todo. 

Seres caídos del cielo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora