C72❁

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Han pasado ya catorce días, Jimin. Han capturado a tu padre, el no sabía que tu caso tenía solución, por lo que aportó en todo lo que pudo, aún así no le bajaron la condena, y eso...no te enojes conmigo, pero me hace sentir más calmado.

Jimin, tu padre pidió hablar especialmente conmigo, dijo que lo sabía todo, absolutamente todo, y por ello no me quejé cuando me dió un golpe en la mejía. Me reclamó algo que tú nunca hiciste, y que no pudiste, pero el lo hizo. El guardia se lo llevó y yo me quedé sentado en aquella silla que me habían hecho sentar, por voluntad propia, para hablar con tu padre.

¿Me estarás odiando? Se que no hice bien en irme así como si nada el día después de haberte dejado entregarme todo de tí, dónde te deje conocerme. Pero Jimin, espero que cuando nos volvamos a ver comprendas mi reacción, sé que lo harás, te conozco, me amas, y te amo por eso.

Pero...hay algo que sigue en mi cabeza y no me deja tranquilo.

¿Me estás esperando?

(....)

—Gracias...

—No hay nada que agradecer mi vida —dice acariciando la mejía sucia del menor.— bueno...ya desayunaste. Mamá tiene que ir hacer una llama-

—¿Por qué estamos aquí?

—Jimin, ¿Acaso no te dije que no importa donde nos encontramos? Estás conmigo, eso es suficiente información

—Quiero volver

—¿No te gusta estar conmigo Jimin? —se acercó dando suaves masajes en el cuello del menor.

—Mamá...me estás lastimado

—¡Te hice una pregunta! —apretó fuertemente.

—¡No! ¡Ya no me siento seguro contigo! ¡Quiero volver! —grito apartando con sus manos los brazos de su madre.

—Cariño...¿Por qué? ¿Por qué dices eso? ¿Acaso no sabes todo lo que he hecho por tí? ¿Por nosotros?  —la voz de la señora cambió a un tono más suave.

—Me duele el tobillo, las cadenas me ajustan mucho. No me he bañado en mucho tiempo...por favor, volvamos...

—¡No! ¡Ya no tenemos nada que hacer ahí! ¡Tu padre es un estúpido!

—¿Mi padre? —preguntó sin entender absolutamente nada.

—Jimin...Jimin...Jimin...hijo mío, tu padre es un pedazo de carne que solo tenía que hacer algo bien, pero como siempre, es un fracasado

—¿Mamá, de que hablas? —preguntó con las mejías empapadas de lágrimas.

—No...Jimin...no entiendes...no puedo decírtelo, me odiarias...no puedo dejar que ese sentimiento llegué a tu bello corazón —lo abrazó suavemente por la espalda — prométeme bebé, prométeme que nunca te irás de mi lado, todo lo que he hecho es por tí...

—Mamá...por favor

La señora le dejó un suave beso en la mejía, y sin más, se alejó de aquella habitación oscura, dejando solo a su hijo.

(.....)

—¿Por qué Jimin no ha venido a visitarnos mami? —preguntó la niña en la sala de espera del hospital.

—Mi amor, Jimin ha tenido algunos problemas, aún estás muy chiquita para entenderlo

—Pero...¿Él estará bien? —pregunto suavemente.

La señora apegó el cuerpo de su hija al suyo y acariciándo sus cabellos, les respondió.

—Eso es lo que todos queremo bebé

—¿Y Jungkookie? ¿Él está ayudándolo? No ha estado en casa

—Bueno hija, tu hermano en este momento está muy ocupado ayudando algunas personas que pueden ayudar a Jimin, pero si llega a casa, solo que tuyestas durmiendo. Él antes de irse te deja un besito en la frente

—Oh...entonces espero que ayuden pronto a Jiminie para poder salir juntos después de mí cirugía mami

—Esperemos que si

—¿La señora Jeon? —preguntó un hombre con bata blanca.— adelante por favor

La señora se levantó de su asiento junto a su hija, y ambas se adentran a la habitación banca.

En otro lado.

—¿Qué haces tú a aquí?

Preguntó sin ánimos. Desde hace semanas que se siente así al no saber de su mejor amigo, aveces hasta se pregunta si sigue con vida, lo que le llega a tener insomnio por las noches. Además que el chico delante de su puerta no era lo que necesitaba ahora. Debería preocuparse por su mejor amigo, no por esos estúpidos sentimientos que brotaban cada día más desde aquella noche que despertó abrazado la cintura del castaño. Viendo como toda su espalda estaba con marcas y..

No quería recordarlo, no ahora que lo tenía al frente.

—¿Por qué me tratas así?

Preguntó desesperado el castaño. No era la primera vez que después de esa noche el peli azul desteñido no estaba tratando de esa manera. Aquella vez en la estación de policías cuando se encontraron, quiso acercarse a él pero éste simplemente se alejaba.

Su orgullo le gritaba que no insistiera en acercarse nuevamente hasta que el peli azul desteñido hasta que esté lo hiciera primero. Pero su maldito corazón que últimamente estaba latiendo más que aquella última vez  que se besaron, le decía que siguiera atrás de él.

—¿Cómo que por qué?

Taehyung no lo podía negar, sabía que le debía una explicación a el chico pero ¿Que le diría? "Seok Jin, estaba borracho, si, me acuerdo de todo pero yo te odio, si?". Ese maldito discurso era lo más estúpido que había pasado por su mente,  ¡Ni siquiera tenía alguna razón válida!

Pero se rehusaba a decirle todo lo que sentí ahora, no era el momento, mucho menos cuando vió a ese hombre moreno de dos metros salir de la casa de Jin con una marca en el cuello. Díos quién sabrá quién se la hizo.

—Necesitamos conversar, y sabes que no es de los demás Kim Taehyung, hablo de nosotros

—No hay ningún nosotro-

—Lo hay desde que me rogabas por más en mi habitación

El castaño se alejó bruscamente del rostro de Taehyung y se hizo a un lado para entrar a la casa del menor.El peliazul desteñido no se sentía con ganas de seguir con la conversación, así que antes de que Jin entrara por completo a su casa, lo jalo con todas sus fuerzas.

—Te dij-

Era complicado de explicar cómo era que Taehyung se sentía preocupado, molesto y estresado cuando estaba junto a Jin. Pero cuando sus labios se tocaron por primera vez, lo único que sintió fue alivio.

Como ahora, de todas esas emociones negativas, su cuerpo se relajó fácilmente al sentir los invasores labios del castaño sobre los suyos.

—¿Qué hay de mí? —susurró juntando su cabeza con la del menor.—¿Te estás burlando de mí o es que en verdad no recuerdas nada?

Por supuesto que Taehyung sabía a lo que se refería Jin, peero no sabía cómo afrontar todo ahora.

—Jin..

—Solo dime, ¿Realmente me odias?

Taehyung abrió sus ojos y vió como los de Jin los veía a él. ¿Qué debía hacer?
No tenía sus sentimientos y pensamientos ordenados, y él solo lo hacía decidir tan egoístamente. Pero lo entendía, si el estuviera en los pies del castaño, haría lo mismo, por qué al final, todos necesitamos una respuesta.

O avanzar, o parar.

—Jin...




¡Lamento la demora! He estado entretenidx con lo que es tik tok.
¡Espero les guste el capítulo!

𝕐𝕆𝕌ℝ 𝔼𝕐𝔼𝕊 𝕋𝔼𝕃𝕃 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora