Christine se había ganado una fama en el colegio de Hogwarts la cual no le hacia para nada fácil sus días ahí. Pero siempre contó con el apoyo de sus mejores amigos James, Remus, Peter y Sirius.
El problema empieza cuando los cuatro de ellos empiez...
El día de hoy era el partido de quidditch de Slytherin contra Hufflepuff, y claro que iba a ir a apoyar a Freddie. Me puse su suéter de quidditch y estaba en la primera grada lista para verlo. Aunque aun no empezaba en partido así que, no había mucho gente. Pero los que si estaban, eran sus molestos amigos de su casa. Entre ellos, Severus Snape por supuesto. Quien sigo sin entender como es que es su amigo. Es tan odioso. Justamente en este momento, el no dejaba de voltear a verme.
- ¿tengo un moco o algo? ¿o por qué no puedes apartar tu vista de aquí? - le dije molesta por fin volteando a verlo.
- lo siento, no todos los días tengo tan de cerca a una sangre sucia como tu. - me enojé tanto que me puse de pie y fui directo a el para confrontarlo.
- ¿ah no? siempre estas con Lily Evans. ¿Cómo es eso diferente? - el estaba por decirme algo, pero se arrepiente. - eres hipócrita, eso es lo que eres. Y un clasista el cual no voy a tolerar.
- ¿y que vas a hacer? ¿golpearme? - se ríe. - dudo que un buen hechizo porque ni siquiera eso puedes hacer bien.
- te sorprendería. - saqué mi varita y estaba apunto de hacer algo cuando Sirius me detiene y me toma de los brazos para alejarme de ahí.
- ¿le hiciste algo? - Sirius tenía un temperamento algo pesado cuando se trataba de Severus, y no quería problemas ahora así que me acerqué de nuevo.
- no, no me hizo nada. - le dije tomando de su brazo para calmarlo. - no pasó nada, Sirius.
- ni aunque la defiendas todas las veces del mundo, ella no se va a acostar contigo. - se ríe Severus y es ahí donde Sirius lo golpea.
- a veces los golpes son una mejor respuesta que la magia. ¿Para empezar? dudo mucho que me puedan regañar si no presentaron un hechizo. - Sirius dice con la sonrisa de victoria. - aléjate de nosotros ¿quieres?
- no debiste golpearlo. - le dije mientras lo jalaba lejos de ahí. - nos van a bajar puntos de la casa, sabes lo soplón que es.
- si bueno, el no debió meterse contigo.
- ni siquiera fuiste testigo de que fue lo que me dijo.
- pero puedo imaginármelo. - me dice mientras toma asiento. - hay una palabra en especifico que no te gusta que te digan y es exactamente esa palabra la que el siempre te dice. - sangre sucia.
