Christine se había ganado una fama en el colegio de Hogwarts la cual no le hacia para nada fácil sus días ahí. Pero siempre contó con el apoyo de sus mejores amigos James, Remus, Peter y Sirius.
El problema empieza cuando los cuatro de ellos empiez...
- ¿podemos hablar de lo qué pasó en la clase de pociones? - James me sigue por la biblioteca, a donde ya habíamos quedado de ir para estudiar con Remus y los demás. Así que me fui a buscar de un libro en específico por los pasillos pero James no iba a dejar de seguirme hasta que aceptar hablar con el de eso. - Chrissie Bear, vamos. No puedes estar molesta conmigo.
- James. - me voltee rápido para tomarlo de ambos hombros. - no estoy molesta. Te lo juro que no lo estoy pero si sigues recordándomelo, quizás si me enoje.
- pero no estás del todo feliz.
- bueno no todos los días te das cuenta que tu pareja está terriblemente enamorado de la misma chica por casi seis años.
- no la quiero como te quiero a ti.
- ni siquiera debería molestarme ya que yo tengo sentimientos por tres personas y tú dos. - reí pero el no. - no está mal querer a otra persona. Enojarme contigo por eso esta en contra de todo lo que creo y lo que hago.
- ¿pero?
- pero yo puedo decir fielmente que los quiero por igual. Dudo mucho que en este caso sea igual y de ser así... no me encantaría que ella fuera parte de esta relación.
- ¡ni siquiera lo pensé como una posibilidad! - el me sigue y cuando vamos saliéndose los pasillos, Lily va apenas entrando a uno.
- voy por um... un libro. - dice ella justificando el que venía hacia acá. James no dice nada y no esperaba que lo hiciera, pero antes de que esto fuese más incómodo, me moví se ahí y me fui directo a sentar con Remus. Recargué mi cabeza en su hombro para cubrir mi rostro. Y el tan solo empieza a acariciar de mi cabello.
- ¿que tienes? - el voltea y ve como James saluda a Lily. - oh, bueno linda eso siempre fue una opción inevitable.
- no estoy molesta, solo estoy tratando de entenderlo. - dejé de recargarme y me voltee para empezar a hojear del libro. - ¿qué teníamos de tarea? - pregunté pero el no dejaba de verme. - ¿qué pasa?
- quisiera que te pudieras ver como yo te veo. - sonreí ante ese comentario. - de ser así, estoy seguro de que nunca te sentirías insegura.
- vaya que sabes como hacerme sentir mejor. - reí y el por debajo de la mesa me toma la mano. Claro para que los demás no vean.
- al menos sabes que conmigo jamás tendrás que competir con nadie más porque eres y serás la única mujer para mi. - dice mientras se inclina para besarme y nos vemos interrumpidos ante la mano de James.