Inmarcesible Destino [H.R.M.A. |+21]

CAP 57 "ENTFÜHRUNG"

Renata Roquer: 

Los días pasan y mis dudas crecen al igual que una chispa de esperanza.

Empiezo a morderme las uñas mientras ojeo el papel con la ubicación puesta. Alzo la mirada y me encuentro a Lerka. 

—Fiodora me dio está ubicación.

Meto las manos a mis bolsillos para evitar morderme las uñas.

—¿A cambio de que recibiste esa información?

Niego al instante.

—Solo me lo dio —murmuro —, yo no pedí nada. No sería capaz de dar algo, me odiaría si cometiera un error...

—Odiarte por errar es incorrecto, porque si piensas combatir, tu camino no será del todo limpio y tomarás decisiones torpes —me mira a los ojos mientras sus dedos sostienen mi mentón para mirarla.

De un momento a otro la puerta es derrumbada, escucho a mi alrededor sonidos que se hacen largos y me dejan mareada, elevo mi brazo para colocarlo sobre mi nariz al ver que hay un humo que se esparce y me es inevitable no tener un déjà vu. 

Lerka se apresura en tomar su arma, visualizo la figura de Maksim cerca, este me coge del brazo y empieza a hablarme, pero me es incomprensible entenderlo con claridad.

—¡Renata! —me grita y toca mi mejilla para traerme de vuelta a la realidad, pero su voz suena tan baja a comparación del pitido que me perturba.

Dafne cierra la puerta después de que Vitali ingresa, juntos empujan un mueble.

Visualizo la ventana circular que está en la parte de arriba de la habitación, apunto y Maksim sigue la dirección que le indico.

—¡Ven! —dice en voz alta. Junta sus manos para hacer un tipo de peldaño para subirme de una vez, sin embargo, llevo la mano a mi oído y al visualizar mis dedos veo lo manchado que están con sangre.

Siento el tacto frío de sus manos tocar mi sien. Desvió la mirada hacia Lerka ya que esta cae de rodillas y se toca su cabeza: «La explosión nos ha dejado mal»

—Estoy bien —murmuro mirándolo a la cara.

Subo y golpeo la ventana, logrando abrir en el proceso e impulso mi cuerpo con la ayuda de mis codos para poder llegar arriba. Estiro mi brazo para ayudar a Lerka y juntas ayudamos a todos, incluido mi gato.

Subo el cierre de mi abrigo y dejo a Tom dentro, luego empezamos a correr para sumergirnos en el bosque.

—¡Huyan! —exclama Vitali con Lerka en un solo grito.

Antes de que pueda presentar una negación al respecto, Dafne y Maksim me sujetan de los brazos para tirar de mí.

Siento el cuerpo de Tom deslizarse hasta caer al piso, él se pone a correr y yo me deshago del agarre de ambos y voy detrás: «No puedo dejarlo.»

Me detengo para mirar a Maksim: —En unos minutos estoy con ustedes.

Él parece entrar en conflicto con lo que menciono e intenta decir algo, pero Dafne le dice que confíe en mí.

Voy en busca de mi gato y lo vengo a hallar detrás de un árbol.

—Tom. —Me agacho para cogerlo.

Suelto un quejido al percibir el golpe contra mi espalda, mis codos aterrizan en el suelo y gimo por el escozor que causa ese roce.

Cuando los dedos de alguien se centran en tirar mi cabello, yo cojo un puñado de tierra para tirarlo en el rostro cuando este me voltea, mueve la mano para poder levantar su arma como una opción apurada, sin embargo, le quito la pistola y tiro del gatillo para dispararle.