Seudónimos

CAPÍTULOS XXIII

POV Amaia

De camino en el coche de producción sentía los mismos nervios que el día de Pedralbes, cada vez que me subía a un escenario la adrenalina se apoderaba de mí. Pero no siempre era igual y esa mezcla de nervios, energía y mariposas revoloteando dentro de mi estómago que sentía en ese momento era de las que me hacía tener el vello de punta permanentemente. Tuve que agradecerle a mi padre que me proporcionara su cobijo en ese coche para que ese estado emocional no se viera más alterado y que con su actitud mi madre estuviera completamente neutralizada.

Cuando llegamos a la sala me encontré con fans haciendo ya cola para entrar y eso sí que no me lo esperaba para nada. Le dije a Marta que iba a estar unos minutos haciéndome fotos y firmando a los fans y que alguien pasara al interior de The Cavern Club Freehouse para ver si Alfred había llegado y si necesitaba ayuda.

Cuando entré en la sala mi primer objetivo era buscar a Alfred para organizarme con él y la banda para ver quien empezaba la prueba de sonido. Y como esperaba ya estaba ayudando a Luis y a Mike a tirar cable para la cámara que iba a grabar desde el backstage.

_ ¿Hija, dónde está Alfred? Tengo muchas ganas de conocerle.

_ Pues lo tienes ahí ayudando a sus compañeros. - le dije mirando a mi padre.

Cuando iba a llamarle apareció de la nada Marta con Narcís Rebollo, el presidente de Universal.

_ Amaia, a Narcís le gustaría conocer a Alfred, llevo un rato buscándolo y no lo encuentro. ¿Sabes donde está?

_ Pues sí, ahí lo tenéis ayudando a sus compañeros a que esté todo listo para la grabación. ¡Alfred! - le llamé pero estaba tan concentrado que no me escuchaba y no sé cómo se me ocurrió silbarle, pero el caso es que inmediatamente levantó la mirada del suelo y se encontró con mi mirada y con la de cuatro personas más observándolo.

El pobre se limpió las manos lo más rápido que pudo y se acercó a nosotros un tanto temeroso. Inmediatamente le presenté a Narcís y a mis padres que entendieron que no era el momento para hablar con él y así se lo hicieron saber.

_ Alfred, encantada de conocerte. Hablamos en un rato que ahora creo que tienes una conversación más importante.

_ Hoja Javiera, - le dijo estrechando su mano. Dudo que la conversación que pueda tener con Narcís sea más importante que la que nos debemos. - le contestó mirándome a mí y rozando mi mano.

Mi padre inmediatamente le dio una palmada en la espalda y le dijo que hablara con Narcís que igual le proponía algo bueno para su futuro. Él le estrechó la mano mientras volvía a mirarme, sin duda había entendido lo que mi padre le había querido decir.

POV Alfred

Jamás imaginé que iba a conocer a los padres de Amaia con las manos sucias por estar tirando cable en el backstage para ayudar a mis compañeros y que todo estuviera preparado cuanto antes para ella, para su concierto. Y aunque Amaia me había presentado primero al director de Universal, para mi sus padres eran más importantes. Ellos me invitaron a hablar primero con él y su padre me dio todas las pistas de porqué lo hacían, mi futuro y la llave para mi regreso a España podía estar en sus manos.

_ Hola Alfred, solamente quería decirte que me gustaría hablar contigo y con tu representante después de que termine el concierto.

_ Hoy estará aquí también el presidente de mi discográfica, John Rose, así que no creo qué haya ningún problema en tener una reunión a tres. - su expresión se torció un poco pero debía entender que yo tenía contrato en vigor.

_ Perfecto, hablamos más tarde entonces. - me dijo estrechando nuevamente mi mano.

En cuanto se alejó, miré hacía ambos extremos del pasillo para ver si podía acercarme como deseaba a mi niña. Busqué sus manos, me coloqué en frente a ella, volví a mirar a ambos lados del pasillo y al ver que no había nadie me aproximé a su boca que me recibió gustosa e hizo que el beso que tenía pensado para el momento se transformará en un beso largo y profundo que fue interrumpido por los silbidos, aplausos y gritos de la banda de Amaia.