Tu eres mi destino [Edmund Pevensie]

Capitulo 44: Inefable

En el capítulo anterior:

- Te quiero. - dijo él al separarse y mirar sus ojos.

- Yo también te quiero. - Katherine abrazó a Lucy que también se encontraba allí.

- Demuestra lo que sabes, Lu. No tengas miedo. - dijo ella, la chica asintió, mientras imploraba ayuda a Aslan y Edmund miró preocupado como Katherine se iba a luchar sola contra aquel monstruo.

Katherine se lanzó al agua mientras el Kraken enrollaba el barco en sus tentáculos y, debido a sus poderes, la chica podía caminar sobre el agua e intentó llamar la atención de la criatura.

- ¡Eh, tú, molusco deforme! - llamaba al animal quemando sus tentáculos intentando atraerle. Por fin el pulpo dejó ver su cara saliendo un poco hacia la superficie, mirando a la joven, que intentó no entrar en pánico al ver el horrible rostro que tenía en frente.

- ¡Si, tu! ¡Ven a por mí! - el monstruo emitió una especie de rugido y soltando al barco se dispuso a ir tras la chica que corría sobre el agua.

- ¡Katherine, no! - gritó Caspian al verla sola.

- Tranquilo Caspian ella puede hacerlo. - dijo Edmund, aunque aún asustado.

Caspian iba a preguntarle porque no se lo impidió, pero la serpiente volvió a salir a la superficie impidiendole hablar. Los marineros remaban desde abajo el barco intentando salir de la niebla de la isla, pero no era suficiente, la serpiente se lanzó sobre el barco rompiendo parte de éste y enrollandolo con su alargado cuerpo de la misma forma que lo había hecho el Kraken.

Lucy se llevó a Gael al camarote intentando ponerla a salvo y de paso cogió el arco y las flechas de Susan.

Caspian se puso a manejar el timon y mirando hacia una roca se le ocurrió como vencer a la serpiente.

- ¡Ed! La embestiremos, la aplastaremos contra las rocas.

- Tira a vabor, la mantendré a proa.

Edmund corrió evitando los golpes de la serpiente hasta subir y meterse en la boca de la criatura que tenían como decoración en el barco y con su linterna llamó a la serpiente, empuñando su espada.

- ¡Intenta matarme, vamos! ¡Estoy aquí! - La serpiente atacó hacia donde estaba Edmund.

- ¡Edmund! - gritaban Caspian y Lucy preocupados, por lo que Katherine miró en aquella dirección.

- ¡No! - dijo ella preocupada, provocando que se distrajera, dejando de quemar al pulpo que intentaba atraparla y que consiguió agarrarla con sus tentáculos. Eso la daba igual solo quería mantenerlo lo más alejado posible del barco y comprobar que Edmund estaba bien. Edmund seguía bien, la serpiente rompió la cabeza de donde éste estaba, pero a él no le hizo daño, así que miró en su dirección y la tranquilizó y ella ya podía luchar.

El Kraken estaba apunto de tragarse a Katherine.

- Pulpo idiota. - dijo ella apuntando hacia su boca abierta para lanzarle una llamarada de fuego.

El Kraken adolorido tiró a la chica al agua, mientras se volvía a sumergir para intentar apagar el fuego. Eso no era suficiente para acabar con el, no de momento. Mientras tanto observó como Lucy disparó una flecha perfecta hacia la serpiente y la empujaron contra la roca, aunque el choque provocó que Edmund cayera hacia la cubierta, pero estaba bien.

No fue mucho su momento de descanso, el Kraken salió más enfadado que nunca y nuestra protagonista se vio un poco acorralada al no tener tantos brazos como su oponente. En ese momento el fuego era su mejor aliado, disparaba con mucha fuerza y potencia hacia los tentáculos y les lograba hacer quemaduras cada vez más profundas, pero aún así se llevó también varios golpes por los tentáculos, y uno de ellos fue tan fuerte que se dislocó la muñeca. Al quejarse del dolor y al no tener esa mano activa para atacar, el Kraken tomó ventaja y la lanzó contra una roca cayendo al final al agua.