Limones y Fresas SasuSaku

Labial rojo

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Esa mañana cuando Sasuke se levantó, lo primero que se dio cuenta era que Sakura no estaba a su lado en la cama, quizá no era algo sorprendente ya que ella tenían un turno en el hospital que respetar. Sin embargo sabía que eso no era así, no después de la ridícula pelea que habían tenido un día antes. Una pelea por celos.

Sasuke suspiro y se levantó como si fuera otro día a pesar que le hubiese gustado un buenos días de parte de su esposa, debía suponer que no le haría nada en gracia que algunas de sus colegas más jóvenes en la oficina le tiraran los perros como si el fuera soltero. Quiza en el momento de la pelea debió darle la razón aun que el defendiera que mientras a el no le interesaran era suficiente. Bajo las escaleras con el humor por lo suelos y de nuevo se soprendio al ver un desayuno completo y surtido sobre la mesa. Luego su esposa apareció con una pequeña bata roja y los labios del mismo color, tan hermosa y sexy que deseo poder tocarla. Sakura le indico que se sentara a la mesa.

—¡Buenos dias, anata! ¿Cómo amaneciste?

—Todo lo que se puede amanecer bien cuando tu esposa te ignora toda la noche.

Le fue sincero Sasuke, tal y como lo era desde que se habían convertido en marido y mujer.

Los ojos de Sakura se movieron a los lados un poco arrepentida por sus actos pero como no iba a enfadarse cuando al ir a la torre del Hokage se encontró con algunas kunoichi rondando a su marido. Quizá lo hubiese pasado por alto de no ser por qué una de ellas se atrevió a abrazarlo y otra le besaba la mejilla.

Había entrado en celos total y las hubiese mandado a volar de no ser porque Sasuke la saco de allí al hombro. Luego cuando estuvieron solos en el apartamento, le explico que el elevador se había quedado atorado y las asustadizas kunoischis lo estaban sacando de quicio pues no dejaban de gritar en cada movimiento extraño del elevador. Así que simplemente abrió a la fuerza la puerta del elevador y al ver que la puerta del siguiente nivel  no estaba muy lejos, las ayudó a subir. La emoción fue mucha que su agradecimiento fue su perdición y para más molestar en el justo momento que Sakura llegaba de pura casualidad.

—Yo tampoco pude dormir bien.

Expreso Sakura sentándose en sus piernas y dandole un beso de media luna sin resentimiento. Un acto que repitió por algunos lugares estratégicos de su cara.

Solo entonces Sasuke se preguntó si realmente Sakura había entrado en razón o si tramaba algo sin embargo esa pasó a segundo plano cuando su esposa le beso el cuello y mordió su oreja. Sea lo que sea que la tenia molesta, agradecía que se le pasara rápido. Sus misiones fuera de la aldea estaban a la orden del día y prefería pasar el tiempo libre con su esposa. Ya sea compartiendo una tasa de café o entre sus piernas disfrutando del  calor de su cuerpo.

Sasuke cerró los ojos, dejándose llevar por el momento, mientras tras Sakura quitaba su capa y le abrí los botones de su camisa.

—¡Entonces no más peleas, no mas celos absurdos!

Sakura lo miro a los ojos y asintió. Debía recordar que su esposo no era así de abierto con nadie a excepción de Naruto. Sin embargo algo le decía que las intensiones de las chicas si era ponerla celosa ya que la habían visto de antes y eso las había motivado a acercarse mucho más a el. Así que trazo un plan perfecto para decirle a esas en que territorio se estaban metiendo.

Mientras tanto Sakura decidió disfrutar del momento íntimo que estaba teniendo con el amor de su vida, toco la piel que cubría los muscukos de su abdomen, lo beso por última vez mordiendo su labio inferior, se dejó caer de rodillas dejando atrever sus pechis a través de la tela de seda de la bata y abrió la bragueta de Sasuke sin miramientos.

El miembro hinchado de Sasuke salió  de su escondite, tan fornido  y perfecto como era. Ante la atenta mirada se Sasuke, aleteo sus pestañas, paso sus lengua por su labio inferior y  con sus manos comenzó a acariciarlo.

Sasuke dejo escapar el aire con fuerza al sentir las manos suaves de su esposa y como uno de sus dedos rodeaba la cabeza de su miembro enviando pequeñas descargas eléctricas por todo su vientre. Ese placer se duplicó cuando Sakura terminó de desatar su bata, dejando sus pechos al aire. Su mano se estiró para tocarlos pero Sakura se alejo con una sonrisa de lado. Estaba jugando con el y sus intensas ganas de hacerla suya.

Dejo caer el brazo conteniendose. Su intensión era dejar que Sakura se desenvolviera como ella quisiera. Ella comenzó a mover su caderas como en un baile sensual, sus manos comenzaron a acariciarse sola desde su vientre, sus pechos y su cuello. Por último estrujó sus pechos y se mordió el labio inferior.  Su polla de seguro no podía ponerse más dura sin embargo si seguía por ese rumbo de seguro su paciencia se acabaría.

Sasuke volvió  a intentar acercarse pero Sakura volvió a alejarse. Ese juego comenzaba a volverle loco pero para su buena suerte está vez Sakura decidió tocarlo. Coloco su miembro en medio de sus pechos y el placer visual lo envío por un túnel sin salida. Cerró los ojos invadido y los volvió a abrí cuando de nuevo ya no podía sentir su piel. A penas iba abriendo los ojos cuando siento la boquita húmeda de su esposa succionado su miembro. Luego siento su lengua lamerlo como si fueran una paleta. El placer lo inundó y le fue imposible no gemir como un poseso su nombre. Sakura mientras tanto seguía metiendo su miembro en su boca en movimientos de arriba a abajo, mientras su lengua presionaba en puntos exactos.

Sabía que no duraría mucho y más cuando Sakura con sus manos comenzó a acariciar su bolas. Hizo su cabeza hacia atrás al mismo tiempo que se venía. Su cabeza perdió el sentido de la orientación y estaba seguro que en sus ojos aparecieron destellos de colores.

El peso del cuerpo desnudo de Sakura de nuevo estaba en sus piernas. Sus ojos brillaban y sus labios carmesí brillaban con su saliva y sin pensarlo dos beses la beso sintiendo su propio sabor. Si eso no era pasión, no quería nada.

Más tarde en el elevador las mismas chicas de siempre corrieron para entrar junto a él y Sasuke inmediatamente se arrepintió  de no tomar las esca,eras. En el elevador sin embargo cuando le iban a saludar se detuvieron de repente. Sasuke se había tensado esperando que lo tocaran sin embargo eso no sucedió y se alejaron con los brazos cruzados, Sasuke no entendía nada pero lo dejo pasar y se relajo.

Pronto las puertas del elevador se abrieron y camino al despacho de Naruto quien lo recibió con unas palmadas en el hombro.

—Por un momento pensé que te habías olvidado de la reunión, es raro que llegues tarde.

Sasuke no dijo nada,  era consiente que llegaba tarde después se una rica sesión de sexo oral. Una sesión que hubiese continuado de no ser por qué tenían ambos reuniones.

La risa de Shikamaru rompió el silencio y se acercó a Sasuke despacio.

—Te equivocas Naruto, Sasuke no olvido la reunión. Solo tuvo algunos "inconvenientes de última hora"–dijo tomando un espejo y enseñándole las marcas de labia en su camisa y parte de su cuello.

Naruto también río cuando se percato de lo que Shikamaru estaba hablando.

—¡Vaya amigo, si que tuviste una buena razón!...

....

¡Hola mariposas!

Espero que el capítulo les halla gustado. ¿Que les parecería una revancha por parte de Sasuke?

También les cuento sobre mi grupo de Facebook donde comparto lo que ando escribiendo o hago preguntas.

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Nos vemos pronto

Besos y abrazos
Lia Diso 🌹