Limones y Fresas SasuSaku

¿Uzumaki?

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Sarada Uchiha estaba en una misión de recuperación con su equipo. La recuperación de un collar peculiar que había sido robado de la aldea de la arena. El collar con una apariencia rudimentaria al ser tallado en madera y cuero negro, no era la pieza más valiosa sin embargo cristal con destellos de colores si lo era.

Se decía que podía alterar el destino de toda la humanidad si caía en manos equivocadas. No entendía cómo podía hacer eso pero la aldea de la arena había pedido expresamente que el collar ahora se resguaradara en la seguridad se Konoha.

Lastima que no pensó a tiempo que las manos de Boruto tampoco eran las adecuadas. ¡Maldición!

Solo habían pasado unas horas desde que habían encontrado al ladrón en un simple y vulgar bar en donde bebía disfrutando de su asalto. Obviamente sin saber lo valioso o mejor dicho peligroso que cargaba en la mochila. Luego lo habían visto querer deshacerse de la baratija sin éxito. Nadie quería algo tan feo y tampoco se esperaba que ninjas de la aldea de la hoja lo estuvieran esperando a la salida.

Había sido como robarle un dulce a un bebé, ni siquiera valía la pena detenerlo. No era más que un pobre diablo con suerte de encontrar en una cueva abandonada algo tan valioso sin saberlo.

Ya de regreso se interpuso la noche en su camino y a su pesar tuvieron que acampar muy cerca de Konoha. Todo iba muy bien, ella se encargaba del fuego, Boruto de cuidar el collar y Mitsuki de vigilar. Nada del otro mundo. Más nadie previó que un lijero viento les hiciera imposible juntar un fuego decente y sin cuevas al rededor no quedó otra opción que meterse en sus improvisadas camas que había juntado para que no se perdiera el calor.

No fue pasada la madrugada que Sarada despertó titiritiando de frío y se dio cuenta que era la única que sufría de esa mal porque Boruto y Mitsuki estaban bastante calientitos.

Se mordió el labio inferior pensando en sí sería bueno acercarse solo un poquito más y así lo hizo pero no espero que Boruto despertara en su intento por robarle calor.

-¿Sucede algo Sarada?-Pregunto entre un bostezo Boruto.

-¡No nada, sigue durmiendo!-mintio Sarada e intento regresar a su lugar pero la mano de Boruto impidió tal cosa y se dio cuenta que estaba muy fría.

-¡Estás congelada!

Boruto no pensó dos veces para quitarse su suéter y colocarse lo encima. ¡Maldición olía a el y olía demaciado bien!, Se dijo a si misma tratando de no pensar en eso y entonces se dio cuenta que en una de las bolsas Boruto guardaba el collar sin ninguna protección. Asi, a la brava.

-¿Que te dije de cuidar el collar?

Boruto paso un brazo destraba de su cabeza y se rió.

-Solo es un feo collar. ¿Que puede pasar?

Le pregunto arrebatando el collar de sus manos al mismo tiempo que le gritaba cosas estúpidas a este.

-¡Hey! ¿Que demonios es lo que haces? ¿Cumples deseos? ¿Das poderes? ¿Vas al futuro o al pasado? O solo eres una baratija de los viejos de la arena.

Sarada rodó los ojos.

-¡Dame eso! ¡Ni para eso tienes tacto!

Le dijo tomando el collar al mismo tiempo que la piedra del centro cambiaba de color y abría un remolino de colores brillantes. Una monada de no ser porque era un puto remolino traga cosas.

-¡Boruto!

Grito Sarada al ver que el remolino intentaba chupar a Boruto y este solo se sostenía de un árbol en un intento de escapar de esa cosa. Mitsuki despertó asustado por el ruido que hacían sus compañeros de equipo. Alargó sus brazos y salvo de manera exitosa a Boruto.