Deseo Concedido 🍒

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Sakura Uchiha estaba sentada tomando un café en la cafetería del hospital. Acababa de atender a una pareja de esposos que  tenían a un bebé recién nacido.

—Lo extrañas—expuso Ino tomando su habitual lugar al lado de  Sakura en la mesa del hospital.

La pelirosa suspiro y movió con pereza la taza del café que tenía entre sus manos.

—¿A quien? —respondió sin saber bien a lo que se refería su amiga. Su mente aún estaba ocupada en el pequeño bebé de ojos negros.

Ino por su parte tenso los labios, sabía perfectamente que su amiga no le estaba prestándole atención. Trono los dedos a unos cuantos centímetros de su cara haciendo que la ojijade levantara la vista y dejara de mover su café.

—¿De quién mas? De el único hombre que has amado en tu vida. ¿Quieres más pistas?

Sakura tomo un sorbo de su café.

—No es eso.

—Entonces que es lo que tienes amiga y no me digas que nada porque te conozco.

—Sarada creció muy rápido

Ino la miró de reojo y apesar de que estaba de acuerdo en ese punto por qué su hijo también había dejado sus brazos muy rápido, no era algo que la atormentara.

—Lo se, Inojin también pero era algo de esperarse. ¿Eso es lo que te tiene triste?

La pelirosa pensó un momento que era lo que la tenía triste y regreso a los ojos del pequeño bebé que había tenido entre sus brazos. El bebé solo tenía un poco de fiebre nada que alarmarse.

—No lo se. Acabo de atender a un bebé que me recordó mucho a Sarada. El tenía los ojos igual de negros y era super inquieto.

—¿Esta muy enfermo?

Pregunto la ojiazul con semblante preocupado.

—¡No,  no!—Nego Sakura utilizando las manos tambien—Solo tenía fiebre.

Ino dejó escapar el aire de sus pulmones, lo que más odiaba era ver a un niño enfermo de gravedad.

—Me alegro. Hay algo que no entiendo

Sakura volvió a tomar un sorbo de su café y la miró a los ojos esperando que le dijera algo pero ella solo miraba a la mesa pensando y cuando al fin la idea toco su pensamiento, hablo.

—No me digas que quieres tener otro bebé.

La pelirosa  abrió los ojos y se atragantó con el café caliente el cual derramó encima de  su vestido y parte de la mesa.

—Mira lo que me has echo hacer Ino puerca.

—Callate frente de marquesina. A mí no me engañas, tú quieres otro bebe.

Sakura desvió la vista evitando el contacto visual de Ino. Ella había dado justo en el blanco.

Ino rio

—Eso es. Mi querida amiga  quiere otro bebe—exclamo lo suficiente alto para que Sakura la callara.

—Shhhh, no  hables tan fuerte

Pero ya era tarde varios médicos  y enfermeros se habían enterado comenzando a cuchichear.

—Sasuke-kun sabe esto—pregunto la ojiazul levantando una ceja.

Sakura suspiro

—No hemos tenido tiempo de hablar del tema—explico Sakura mientras se le tenían las mejillas de un rojo intenso.

Ino chillo encantada

—¡Que emoción! Esta vez yo quiero ser la madrina.

Sakura dejó caer su cabeza en la mesa, aún no tenía la menor idea de cómo iba a iniciar esa conversación con su esposo.
Ni sabía si estaría el de acuerdo.

.

Después de meses de estar fuera de la aldea Sasuke decidió regresar, ya extrañaba a su esposa e hija y que mejor escusa para verlas que venir personalmente a entregarle el informe a Naruto.

—¡Sasuke, que bueno es verte de regreso!—Le saludo uno de los guardias que patrullaban la entrada.

Sasuke inclinó la cabeza y continuó su camino rápidamente pero cuando estaba a punto de llegar a la Torre del Hokage cambio de rumbo. El impulso principal que tuvo en ese momento fue hacerle una visita a su querida esposa en el hospital.

—¿Escuchaste lo que dijo hoy al almuerzo?

Pregunto un ninja médico  a su compañero los cuales caminaban  muy cerca de el pelinegro.

—Si, lo escuché—admitio el de pelo castaño —Decearia ser yo su esposo para cumplirle todos sus anelos.

El compañero de pelo blanco río  casi a carcajadas.

—Si fuera mi esposa ya tendría ese bebé que tanto quiere y no me iría de misión a cada rato.

Sasuke puso los ojos en blanco. Pobre del hombre a quien le estuvieran deciando la esposa, seguramente el anda protegiendo la aldea y casi no la puede estar con ella tal y como en su caso.

—Te acuerdas cuánto le crecieron los pechos cuando tuvo a su hija. Se miraba tan sexy, podría haberla follado y demostrarle que yo soy mejor hombre que su marido.

—Eso dices ahora pero de seguro te vieras meado en los pantalones de solo ver los ojos de su marido.

—Crees que soy débil le estaría haciendo un favor a la hermosa pelirosa al sacar de circulación al aburrido de su marido.

Ambos se miraron y sonrieron pero Sasuke cada vez le quedaba menos duda que estaban hablando de Sakura.

—¿Crees que no hace feliz a Sakura-sama?

El pelo blanco no le pudo contestar, en su garganta blandía la katana de Sasuke quien estaba furioso por todos los comentarios grotescos que había dicho. Además había algo más que atormentaba la mente del susodicho pero primero le haría saber el precio de abrir su boca sin ver a su espalda.

—Repite lo que acabas de decir—pronuncio Sasuke haciendo que sus ojo brillará en un rojo Sangre.

Los dos ninjas médicos empezaron a temblar de solo ver la imagen que proyectaba Sasuke parecía el demonio encarnado pero eso solo lo habían provocado por sus palabras.

—¡Sasuke-kun!

Grito una voz muy cerca. Esa voz tenía la capacidad de hacer que su rabia desapareciera en cuestión de segundos, de la misma manera que lo había hecho con el sello maldito de Orochimaru.

—¡Sakura-sama!—pronunciaron los dos al mismo tiempo intentando que ella los salvará pero Sasuke no dejo que dieran ningún solo paso.

Al contrario el dejó escapar el aire de su pulmones para pensar con más claridad. Enfundó su katana y tomo del cuello al de pelo blanco mientras al de pelo castaño lo dejaba ir.

—¡Nos vemos más tarde Sakura! —pronuncio antes de irse. Naruto sabría ponerle un castigo apropiado antes que él lo desapareciera...

...

Ufff un Sasuke celoso....

Nos vemos
Lia Diso 😘

Limones y Fresas SasuSakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora