Año 2020
Samuel y yo llegamos a comisaría a la una y media con la intención de recoger un par de cosas y comer juntos.
Ponernos al día de lo que había pasado en estos dos años sin vernos, pero cuando entramos, Raquel nos dijo que Oscar había traído a la mujer de Nicolás, para hablar con ella.
ㄧSí que es rápido tu chico.
ㄧSí... Tiene muchas ganas de ser un buen policía, y es muy listo. Me recuerda a mi hija cuando era pequeña...
Sonreí al pensar en la primera pista que le di cuando tenía catorce años y me había colado en su despacho.
Era una habitación que tenía cerrojo, porque Samuel no quería que viera todas esas fotografías colgadas de personas asesinadas.
Pero como buena hija de policía, no me costó mucho abrir el candado. Al principio se enfadó, pero cuando vio que no había manera de que no volviera a meterme ahí...
Empezó a escucharme, y la verdad es que tenía buen instinto desde muy pequeña.
Entramos en mi despacho y nos encontramos de frente con Oscar, que al parecer nos estaba esperando.
ㄧEstá en la sala de interrogatorios. ㄧdijo nada más vernos.
ㄧ¿Y por qué no estás con ella?
Él me miró directamente a los ojos, dando a entender que me había esperado para que fuera yo quien hablará con ella.
ㄧCreí que a Núria le gustaría hablar con ella.
ㄧGracias...
Entré yo sola, encontrándome con una mujer de unos treinta años, pero que realmente aparentaba muchos más, aunque estuviera pintada con kilos de maquillaje.
ㄧBuenos días, ¿Cómo se llama?
ㄧRebeca.
ㄧBien, Rebeca. ¿Le han dicho por qué está aquí?
ㄧSi. Me han dicho que mi marido está muerto, ¿es verdad?
ㄧSi.
La mujer que tenía delante llevaba una camisa transparente, con un escote bastante profundo y vestía unos vaqueros oscuros, algo desgastados.
Era rubia, teñida, y tenía los ojos de color caramelo.
Pero lo que más me llamó la atención no fue como iba vestida o si iba a la peluquería dos veces al menos. Lo que me atrajo desde el principio fue su pasividad.
No había estado llorando y acababa de decirle que su marido estaba muerto.
¿No se supone que la gente se casa por amor? Si a mi me dijeran que a mi marido lo habían asesinado, llorar era lo mínimo que haría.
ㄧ¿Me disculpa un segundo? Se me ha olvidado algo en la otra habitación, solo será un momento.
ㄧClaro.
Salí de la sala casi corriendo, y cuando entré en la habitación de detrás, Samuel y Oscar me miraban como si fuera un marciano verde.
ㄧ¿Qué pasa?
ㄧNada... Solo quiero probar lo que me has dicho antes. Oscar, ¿Qué ves raro en ella?
ㄧ¿Me lo estás preguntando en serio?
ㄧTotalmente.
Oscar se acercó al cristal y observó con detenimiento a Rebeca.
Estuvo callado un par de segundos, hasta que desvió sus ojos negros hasta mi.
ㄧVa muy maquillada, no me gustan las mujeres que se esconden tanto detrás del maquillaje.
ㄧBuena capacidad de observación. ¿Algo más?
ㄧNo lo sé... Está muy... Normal.
ㄧ¿Define normal, chico? ㄧSamuel soltó una carcajada tan grande que temí que Rebeca se diera cuenta de que la estábamos observando.
ㄧPues eso, que está normal. No parece una persona a la que se le acabe de decir que su marido la ha palmado.
ㄧOscar...
ㄧYa, ya lo sé, perdón. Que su marido ha muerto. ㄧrectificó con una sonrisa en los labios.
No voy a negar que me reí, y me gustó reírme. Ser policía no te daba muchos momentos alegres.
ㄧ¿Entonces? ¿Qué dices? ¿Estamos frente a una asesina en potencia? ㄧle pregunté, para picarle un poco más.
ㄧ¿La verdad? No lo creo. Deberías pedirle que vuelva sin tanto maquillaje.
ㄧ¿Por qué?
ㄧPorque esconde algo.
Era una idea que se me había pasado por la cabeza desde el instante en el que la vi. Pero quería ver si él también llegaba a esa conclusión.
ㄧTenías razón. ㄧle dije a Samuel.
Salí de la habitación y fui al despacho a por unas toallitas desmaquilladoras y volví a donde estaba esperando Rebeca.
Me sonrió cuando entré, pero cuando le dije que se quitase el maquillaje del escote, se negó rotundamente.
ㄧNo se te lo estoy pidiendo, Rebeca.
Se negó un par de veces más, hasta que cedió. Cuando empezó a quitárselo, dejó a la vista varios moratones que tenía en el pecho y una marca de una mano alrededor del cuello.
ㄧ¿Fue Nicolás?
La mujer, que hasta ahora había presentado una voluntad y una fuerza de hierro, se echó a llorar en mis brazos y empezó a contarme que su marido era un maltratador.
Cuando conseguí calmarla, la llevé con la psicóloga del equipo y Rebeca me abrazó.
ㄧ¡Núria! ㄧoí como Samuel me llamaba desde el inicio de las escaleras que daban a la morgue.
ㄧ¿Qué pasa?
Cuando estuve a su altura, me hizo un gesto con la cabeza para que bajara con él. Allí me esperaban Raquel y Oscar, con una bolsa transparente en las manos.
ㄧ¿Es la nota? ㄧlos tres se miraron entre sí, esperando a que uno de ellos diera el paso, pero por alguna extraña razón, ninguno se atrevía. ㄧ¿Qué os pasa? Ni que fuera la primera nota que deja.
ㄧNuria, está nota es... Diferente. ㄧse aventuró a decir mi amiga.
ㄧ¿Qué pone?
Oscar suspiró demasiado alto y aquello hizo que todos mis sentidos se pusieran en alerta.
Raquel me pasó la bolsa, para que yo misma viera que era lo que les hacía estar tan raros, y cuando la leí, lo entendí todo.
ㄧ"Venga a buscarme, Inspectora Núria".
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Instinto
Mystery / ThrillerEn 1990 comienzan una serie de asesinatos que nadie parece poder resolver, hasta que de un día para otro, cesan. A su misma vez, una niña grita pidiendo auxilio en su propia jaula, sin tener escapatoria de sus propios demonios. En pleno 2020 los te...