Año 1991
ㄧ¡Feliz año nuevo! ㄧse escuchó desde la comisaría.
Algunos agentes de policía habían improvisado una pequeña fiesta para celebrar el año nuevo.
Al principio solo eran un par de amigos, pero conforme iban pasando las horas, aparecieron casi todos los compañeros acompañados de sus parejas y sus hijos.
Oliver, estaba sentada al fondo, vestido con unos pantalones negros y una camisa roja, a juego con su pelo. Y desde el fondo, podía ver a todo el mundo.
Pero él solo tenía ojos para una persona.
Vio como Rubén entraba perfectamente peinado, sin rastro de las ojeras y esa aura de tristeza que llevaba con él desde lo de Verónica.
Lo vio con una camisa blanca planchada y una sonrisa de oreja a oreja en los labios.
Había cambiado, había dejado atrás las noches de borrachera donde le llamaba pidiéndole que fuera a buscarle, había dejado atrás las conversaciones sobre el amor, sobre la pérdida, la compasión...
Él había cambiado.
Solo hacía unos cinco meses habían discutido como nunca en su casa. Y un día vio como salía por la puerta de la comisaría derrotado, casi sin vida en los ojos...
Y al día siguiente, apareció resplandeciendo.
Como nuevo.
Era como si se hubiera convertido en una persona diferente, como si se hubiese limpiado de las heridas que Verónica dejó, de la ausencia de unas hijas de las que nunca hablaba y de las que no sabía nada.
ㄧ¡Oliver! ¿Qué haces ahí escondido?
ㄧSolo estoy pensando...
ㄧ¿¡Pensando!? ¡Venga coño, que estamos de fiesta!
Rubén se sentó en una de las sillas, cerca de Oliver y palpó su pierna para llamar su atención.
ㄧ¿Y en qué piensas?
ㄧEn el asesino.
Llevaban cinco meses con el caso y no tenían nada, ni una sola mísera pista.
Era como si supiera los procedimientos, las pautas que debía seguir...
ㄧBueno, al final todos acaban cometiendo algún error y se les pilla. Tranquilo.
ㄧ¿De verdad crees que lo cogeremos?
Oliver giró su cara un milímetro, el suficiente para ver como la expresión de Rubén pasaba de tranquilidad... A algo que no supo identificar.
Solo le vi sonreír de una forma extraña.
ㄧ¡Oh! Por supuesto, estoy seguro... Pero es listo, ¿no crees?
ㄧSí... Quizás lo sea demasiado.
ㄧ¿A qué te refieres? ㄧpreguntó él, dejando el vaso de alcohol que llevaba en la mano.
ㄧA que es demasiado inteligente, es como si...
ㄧ¿Cómo si siempre fuera un paso por delante? ㄧOliver asintió y la sonrisa de Rubén se ensanchó aún más. ㄧYo también lo he pensado.
Rubén se giró completamente hacía su amigo y le miró a los ojos, preparándose para lo que iba a decir.
ㄧQuería pedirte perdón por lo que pasó en mi casa.
ㄧNo tienes que pedirme perdón por nada, los dos dijimos cosas que no debíamos decir.
ㄧNo, escúchame. Lo siento de verdad, Oliver. No debí meterme donde no me llamaban. Eres mi mejor amigo, lo sabes, ¿no?
Entre los dos hubo un largo silencio, un silencio que a simple vista, podría parecer que era el mismo.
Pero no lo era.
Oliver, que era demasiado bueno y en ese momento pensó que había estado exagerando. Que quizás se había dado cuenta que emborrachándose y lamentándose no iba a ir a ningún lado.
Y le perdonó en el mismo instante en el que lo vio sonreír de manera sincera.
El silencio de Rubén, en cambio, no fue nada más que un acto.
Una obra de teatro.
Cine.
Ficción.
ㄧClaro que lo sé, amigo.
Y con aquella frase, sin saberlo, Oliver acababa de firmar su sentencia de muerte.
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Instinto
Mystery / ThrillerEn 1990 comienzan una serie de asesinatos que nadie parece poder resolver, hasta que de un día para otro, cesan. A su misma vez, una niña grita pidiendo auxilio en su propia jaula, sin tener escapatoria de sus propios demonios. En pleno 2020 los te...