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Después de mi terrible pesadilla he podido mantener mi mente ocupada comprando cosas para la bebé aunque ya eran muchas para haber pasado una semana, tanto que le pedí a Hande que platicaria con Samuel sobre si acondicionamos una nueva habitación aquí o en otro lugar.

Por otro lado cada vez se me notaba más el estómago y creí que nunca me iba a ver con un bebé, pero cuando me siento es la realidad de los cinco meses que tengo.

- Mamá porque no nos sentamos un rato, Diana dice que ya se canso de ver tantas cosas de bebés y yo también -

- Lo siento pero quiero que tenga muchas cosas que le recuerden a mi -

Me distraigo por un momento cuando el olor a fresa invade mi nariz.

- ¿Qué pasa? - me pregunta Philip al ver que me perdí en el olor.

- Quiero fresas huele delicioso -

- Iré por algo que tenga fresas -

Philip se ha encargado de complacerme en cuanto a caprichos y eso me encanta, es buen tío y aún no nace su sobrina. Regresó con un algodón de azúcar y se lo arrebato.

- Todo por complacer a mi sobrina - lo termino todo sin invitarles nada y es cuando mi hora de dormir me ataca en medio del centro comercial.

- ¿Nos podemos ir? - pregunto bostezando.

- Si mamá ¿nos podemos ir? - sonrío.

- Está bien pero mañana volvemos - Philip y yo nos miramos, y no creí decir esto pero Hande ya estaba obsesionada con las compras.

Me sorprende ver a Samuel temprano en casa y esta vez me dirigí a la cama donde me acosté y cerré mis ojos.

- Dime por favor que no compraron todo el centro comercial -

- Casi en serio tu mamá me está dando miedo con las compras -

- Hablaré con ella, está a punto de llenar la bodega de cosas para la bebé -

- Hablando de la bebé, no hemos pensado en un nombre para ella -

- Seguramente ya tienes tu enorme lista en un cuaderno como todas esas mamás locas - río.

- No de hecho no he pensado en uno hasta que los dos estuviéramos de acuerdo -

- Jamás pensé que esto fuera tan difícil de escoger -

- ¿De verdad no tienes idea? - insisto.

- Con la letra m, solo que no sé cuál -

- ¿Margarita? -

- No ¿qué estás pensando? -

- Pues en un nombre Samuel, además es de una flor también y a mí me encantan - sonrío porque sé que está perdiendo la paciencia.

- Eres pésima -

- Muy bien continuemos…¿Marcela? -

- No -

- ¿Maddie? -

Se queda pensando un momento hasta que responde.

- No -

- Me rindo - cierro mis ojos volteandome del lado al ya no poder estar boca arriba.

- Madeleine...no suena mal - habla despacio y vuelvo a quedar frente a él.

- ¿Te gusta? - me pregunta.

- Es bonito el nombre, ¿sabes su significado? -

- ¿Importa eso? ¿No se supone que solo debe de tener un nombre y ya? -

La Cazadora ( I y II Parte)  (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora